Capitulo 16

53 7 4
                                    

-Mmm cuando creí que no podrías sorprenderme mas lo sigues haciendo-murmura Alessa  acariciando mi pecho desnudo- ¿te quedaras conmigo esta noche?

-Ajam- asiento.

-¿Porque?- pregunta ella con el ceño fruncido- ¿Por qué quieres quedarte conmigo?

-¿No es eso lo que querías?-  contra ataco- ¿quieres que me vaya?

-¡NO!- recarga su cabeza sobre mi pecho- no te vayas. Es solo que quiero saber porque ese cambio, siempre estas tratando de evadirme y ahora...siento que me estas utilizando.

Alessa y su maldita astucia, por supuesto que estoy evadiendo algo...Ania...estoy tratando de evitar a toda costa de no terminar una vez mas en su cama. La imagen de su cuerpo desnudo sobre mi cama me tortura, no puedo soportarlo mas, no creo que sea capaz de volver a compartir cama con ella sin tratar de recorrer su hermosa piel suave y ..... Joder...estoy cayendo nuevamente...piensa en lindos unicornios...

-Ya sabes como es esto-murmuro en su oído.

-¿Y si te mudas conmigo?- me pongo tenso- no la quieres a ella, ella no te da lo que yo te doy, quiero la exclusividad.

Tal vez no fue buena idea quedarme, pero tal vez no sea capaz de atravesar el pasillo y caminar hasta mi habitación,  la puerta de su habitación siempre me llama, me pregunto si Ania me esta esperando.

-¿Y tus amantes?-pregunto incrédulo-¿donde los vas a atender?

-Hace tiempo que no me veo con nadie mas que contigo.- forma un puchero-nadie me hace sentir tan deseada como tu, nadie me lo hace como tu.

Si ella supiera que desde hace días mi mente me juega una mala pasada e imagino que ella es otra persona, si ella supiera que a ella la trato como no lo haría con ella. Por supuesto que no, la que ocupa mi mente en estos momentos no merece ese trato despiadado y lujurioso, ella merece el mejor trato del mundo, el mas placentero y suave, me tomaría mi tiempo para disfrutar, aunque mi mente salvaje siempre me pide a gritos que la posea...claro que no me dejaría dominar de esa manera.

-¿A donde quieres llegar?-pregunto un tanto molesto.

-Múdate conmigo y seamos los amantes mas felices del mundo- ella se sienta en la cama- yo no te pido que me quieras....solo te pido la exclusividad...déjame atenderte...te esperare cada día en lencería para que me tomes cuando....

-¿Y cual seria la diferencia?- pregunto cubriéndome con la manta- todo eso ya lo hago.

-Quiero algo mas formal- susurra ella.

-¿Que?- la temperatura de mi cuerpo se eleva-¿que estas diciendo?

-Digo que quiero una vida de mentiras contigo-sonríe peinando su cabello de manera nerviosa.-Quiero que llegues aquí todos los días despues del trabajo y me hagas tuya. Quiero despertar cada mañana a tu lado y prepararte el desayuno...o ser tu desayuno....ya no quiero en mi vida a esos hombres que me llenan de riquezas....quiero al hombre que me llena de caricias y que solo el sabe como hacerme gozar y llevarme a los extremos.

-Te lo dije y te lo vuelvo a decir- menciono molesto- eso nunca pasara. Fue un error venir aquí, quieres una vida que nunca será tuya, el juego ya no es divertido si uno se enamora.

Abandono la cama y comienzo a vestirme, molesto busco las prendas desparramadas por toda la habitación. Alessa nunca me había manifestado este tipo de cosas, todo inicio desde que me case con Ania, ella sabe que nuestro matrimonio no es como el de los demás y aun así ella quiere una vida que no le pertenece.

-¡Si! ¡SI, ESTOY ENAMORADA DE TI!- comienza a seguirme por la habitación aun desnuda- es muy difícil estar contigo y no sentir nada. Eres el hombre que toda mujer desea en su cama ¡y no soporto que vivas con esa estúpida CIEGA!

ciega de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora