ciega de amor

Capitulo 6

Min Yoongi

Recargado sobre la barra del bar bebía su copa de whisky con tan solo en ropa interior, la que ahora era su amante se encontraba dormida en el sofá, despues de tres rondas de sexo no había podido  quedar satisfecho, a pesar de que uso toda su fuerza, no podía quitar de su mente la mirada inocente de la que ahora es su esposa.

El trago le quemaba la garganta, Alessa su amante siempre había sido su chica preferida y esta vez sin importar cuantas veces la penetro, no pudo sentirse aliviado.

Alessa se despierta y observa a su alrededor, se masajea la cabeza tal vez un poco adolorida por los tirones de cabello que Yoongi le dio. Su bella lencería ahora se encuentra deshecha en el suelo. No se preocupa pues sabe que el le comprara mas.  

Se pone en pie y toma la camisa blanca del suelo, se toma su tiempo para abotonarla pues esta es mas grande de talla. 

-MMm.... fue espectacular- sonríe- no me lo habías hecho de esa manera sin importar cuan necesitado estabas ¿Qué te puso tan...

-Deberías irte-murmura con voz ronca.

-¿Por que, ya te cansaste?- eleva la ceja- podría jurar que aun me necesitas.

Rodea la sala para dirigirse hacia el bar, peina su cabello con los dedos y camina contorneando las caderas. En ese instante la puerta de la habitación de Ania es abierta, se escucha el golpeteo del bastón en el suelo.

Ambos se quedan paralizados, Yoongi se lleva el dedo a los labios para que Alessa guarde silencio, pero esta sonríe con malicia, como si estuviera planeando jugarle una mala pasada. Alessa camina de puntillas descalza y se para frente a Ania cuando esta se detiene.

Min yoongi se tensa, la mirada de Ania se encuentra perdida  pero al mismo tiempo se paraliza como si supiera que no esta sola en este momento. 

ANIA

Al salir de la habitación para buscar un vaso con agua me encuentro con una presencia misteriosa, se que no estoy sola. Una mujer, se para frente a mi, lo se porque distingo su perfume, las personas como yo, desarrollamos mas que las personas normales los demás sentidos, para poder suplir el que nos falta.

Siento una brisa de aire, como si estuvieran agitando algo frente a mi. Despues percibo un aroma alcohol y un aroma no identificable para mi, uno extraño, como una mezcla de sudor con algo mas.

Tal vez lo mejor sea ignorarlo, siento que no debería mencionar palabra alguna, desisto de mi decisión  y me regreso a la habitación,  pues mi corazón se siente tan acelerado que podría salirse de mi pecho.

Min yoongi

-Es escalofriante- Alessa se talla sus brazos- parece un fantasma.

-Su mirada parece perdida pero creo que....

-Creo que deberíamos tener otra ronda- sonríe de manera sensual- ¿O tu esposa te pega?

-No digas tontearías- bebe de su trago- es la esposa perfecta, nunca se dará cuenta de lo que hago y es tan sumisa que aunque se de cuenta no me cuestionara.

El la toma de la mano y la arrastra hasta su habitación, le exito el pensar que Ania los escuche o los descubra, quiere saber como actuara ella. Quiere ver que tan lejos llegaran las cosas. El juego apenas comienza.

ANIA 

En su primera noche, no había podido dormir nada, cuando regreso a su habitación no podía dejar de pensar en la misteriosa mujer, los había escuchado cuando pasaron frente a su habitación y tiempo despues escucho los gemidos. 

Hobi tenia razón, el es un mujeriego. Al menos el se contuvo y no le puso un dedo encima. Como le menciono, es mejor no meterse en sus asuntos, despues de todo el no es nada para ella mas que un carcelero. Pero al menos debería tener un poco mas de decencia e irse a un hotel, no es agradable escuchar el espectáculo.

Ania siempre a dormido poco, a pesar de que no tenia nada interesante por hacer, siempre se levantaba a primera hora. Revisa una de sus cajas y encuentra un vestido sencillo, lo sabe porque cada prenda tiene una etiqueta en braille, con la descripción y el color de la prenda. Hoseok siempre se asegura de colocarlas en las prendas cuando las trae de vuelta de la tintorería.

Bañarse es todo un reto, choca con todas las cosas y los productos de baño no están acomodados como ella acostumbre, pues se coloca primero el acondicionador y despues el shampo, no es capaz de encontrar el jabón de baño así que se rinde y abandona la ducha. Tiene mucho trabajo por hacer cuando llegue hobi.

Se arregla lo mejor que puede y abandona la habitación, camina a paso lento, escucha sonidos extraños provenientes de su lado izquierdo, pasa por un escalón que la hace tropezar, se pone en pie y trata de buscar un camino, sin darse cuenta choca con el borde de la mesa de la cocina.

-oh- alguien mas esta en la habitación- ¡cuidado!

El chico alto y delgado la toma del brazo y la guía para sentarse frente a la barra de la cocineta, en donde se encuentran esparcidos diversos ingredientes, es el Chef Kim Seok Jin y gran amigo de Yoongi.

-Mi nombre es Jin, soy el cocinero, intendente y multiusos de esta casa- ríe- a tu servicio, señorita.....Señora Min.

Es la primera persona que le llama señora, Ania no puede evitar sonreír pues en verdad ni si quiera siente que esta casada.

-Soy Ania- hace un saludo con una leve inclinación de cabeza- mucho gusto.

-Bien, ¿te gustaría desayunar algo en especial?

-Pues en la mañana solo bebo café con pan o galletas- se encoje de hombros- lo que sea es bueno.

-No tengas vergüenza- ríe a carcajadas estrepitosas como su amigo hobi- yo estoy aquí para ayudarte.

-Bien Señorita Min o  Señora Min....Ania Min....

-Solo Ania por favor- le suplica.

 -Bien Ania -busca la taza de café- ¿Cómo queda un mango despues de comer?

-Eh....¿un mango?- la toma desprevenida- no lo se ¿pelon?

-¡Magordito! Hahaha- su risa estrepitosa resuena por toda la cocina. Ania no puede evitar reírse con el. Así pasan su primera mañana en la cocina, haciéndole compañía a jin, que le gusta contar chistes e historias random, Ania no sabe que le causa mas gracia, si sus chistes o sus risas.