𝐶𝑟𝑢𝑠ℎ // 𝐻𝑢𝑛𝑡𝑒𝑟 𝑥 𝐿𝑒𝑐𝑡𝑜𝑟𝑎 [PAUSADA TEMPORALMENTE]

☆𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 40☆

Pov _____: 

Más días habían pasado, estaba recostada en la cama, mirando el anillo mientras lo giraba entre mis dedos, me encontraba inmersa en una maraña de pensamientos y sentimientos encontrados.

La realidad de que Hunter no se había quitado el anillo desde el momento en que se lo di me impactaba profundamente. Además, había visto el anillo en su mano cuando estaba ebrio, confirmando que no mentía sobre llevarlo siempre consigo.

Me quedé mirando el anillo durante un tiempo, tratando de comprender lo que significaba para mí ahora. La reflexión sobre mi decisión me llenaba de dudas. ¿Había hecho lo correcto al decirle que no sentía nada? Era una pregunta que no dejaba de atormentarme.

La realidad de que Hunter había estado genuinamente enamorado de mí y no solo jugando con mis sentimientos desafiaba todo lo que creía saber sobre él. Durante tanto tiempo, había estado convencida de que él solo se estaba burlando de mí, que sus sentimientos no eran más que un juego. Pensé que él simplemente disfrutaba de verme sufrir, que su interés en mí no era más que una forma de diversión. Pero ahora, con su confesión sobre sus sentimientos, me encontraba dudando de todo lo que había creído. Aún así, ¿cómo podía reconciliar mi visión de él como alguien que solo me lastimaba con la posibilidad de que sus sentimientos eran auténticos?

Pero ahora, cada recuerdo de nuestras interacciones me parecía como una serie de errores y malentendidos. Si su amor era real, entonces lo había lastimado de una manera que nunca imaginé. Recordaba todos esos momentos en los que actué con hostilidad hacia él, todos esos intentos por alejarlo, por protegerme de lo que creía que eran sus intenciones engañosas.

Ahora, una parte de mí deseaba desesperadamente abrazarlo, pedirle perdón, tratar de entenderlo todo. Quería aclarar las cosas, ver si había alguna manera de arreglar lo que se había roto entre nosotros. El deseo de acercarme a él, de hablar y comprender sus verdaderos sentimientos, se entrelazaba con la necesidad de redimir mis propios errores.

Sin embargo, la otra parte de mí sabía que no podía. En primer lugar, ya había declarado mis sentimientos y mis decisiones. Y en segundo, una relación con Hunter... eso sería como mezclar fuego con hielo. La realidad era que Hunter y yo proveníamos de mundos totalmente opuestos. Él era parte del Aquelarre del Emperador, su tío era el mismísimo Belos, y él era el Guardia Dorado, una figura que tenía responsabilidades y obligaciones que no podía ignorar. En mi mundo, eso significaba que cualquier tipo de relación entre nosotros no solo era complicada, sino también peligrosa. 

Sin contar de que Belos había mandado a Hunter a vigilarme, lo que solo añadía un nivel extra de peligro y complicación.

A pesar de todo, las palabras de Hunter seguían resonando en mi mente. Su confesión, su sinceridad, me hacían cuestionar si lo que había hecho era realmente lo correcto. ¿Había sido justa al rechazarlo así, cuando había una parte de mí que quería creer en sus sentimientos? Pero, por otro lado, ¿qué pasaría después? ¿Cómo podría intentar una relación con alguien que estaba vinculado a la misma fuerza que quería destruir todo lo que conocía? Las consecuencias de estar con él podrían ser catastróficas, no solo para mí, sino para él también.

Con un suspiro profundo, guardé el anillo con cuidado, como si al hacerlo pudiera sellar también todos esos sentimientos encontrados. Me quedé allí, sintiendo una tristeza abrumadora. No solo porque lo había rechazado, sino porque sabía que, incluso si quisiéramos estar juntos, el contexto y las circunstancias lo hacían casi imposible. 

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