VII.

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Días después…

Tres días han pasado desde que cené con Jennifer en su departamento, pero desde entonces no hemos podido coincidir exceptuando las mañanas donde va a mi departamento con un café y conversamos así sea cinco minutos, para mí suelen ser los mejores cinco minutos de todo mi día, suspiro y arreglo mi estetoscopio sobre mis hombros para entonces agarrar una bata, unos guantes y un tapaboca, rápidamente me los coloco y corro hasta la entrada de urgencia donde van llegando dos ambulancias.

- Agarro la segunda – avisa una colega y asiento –
- Nombre, Thomas Harper – dice el paramédico a mi lado – edad, 28 años – prosigue y agarro el estetoscopio para escuchar su corazón –
- Vamos – digo y entramos a un cubículo para pasarlo a la camilla –
- Doctora – me volteo para ver al paramédico – sálvelo, por favor que es un deportista – dice y asiento –
- Sabes que haré todo lo que esta en mis manos – asiente y mientras se va, yo llamo a un par de enfermeras –

Después de casi una hora, logramos estabilizar al paciente, estará bien, le mandé a hacer un par de exámenes y también una placa, firmo el cuaderno clínico y se lo entrego a una de las enfermeras, agradezco y me quito los guantes, después el tapaboca y finalmente la bata para entonces caminar hasta salir de urgencia, voy hasta la sala de espera donde están desde los medios esperando hasta fanáticos, pregunto por su familia y dos mujeres se acercan, les explico la situación y la señora mayor sonríe aliviada, mientras que la más joven la abraza, agradecen y niego para entonces despedirme, me disculpo y me volteo para entrar a urgencia de nuevo.

Ser médico es que un día se muera en tus brazos un niño, pero al otro salves a un deportista y así pasan los días, tratas de hacer todo lo que esta entre tus manos para que puedan salir con vida, pero algunas veces no suele pasar así y frustra, duele, sin embargo, se respira profundo, se recuerda que hay más vidas afuera y se sigue adelante, no hay de otra, es así. Sonrío al ver a mi padre y se acerca para luego abrazarnos.

- Quisiera que estuviera pasando la MLB para ir a un juego – susurro y papá se ríe –
- Falta un mes – responde y asiento –
- Ya es febrero – susurro y asiente –
- ¿Todo está bien? – pregunta y volteo a verlo – escuché por ahí que estas saliendo con alguien – confiesa y me quedo boquiabierta –
- Traidora – me quejo y se ríe – algo así papá – susurro y me mira curioso –
- ¿Cuál es el miedo? – pregunta y niego –
- Nada, es solo que… - iba a proseguir cuando emergencia nos interrumpe –
- Luego me cuentas todo – se queja y asiento – ¡A trabajar! – chilla y resoplo –

Me despido de papá y entro a urgencia, hago el mismo procedimiento de antes y salgo a la entrada, la ambulancia se detiene y se abren las puertas, los paramédicos bajan al paciente, que es un niño de al menos 8 años de edad y corremos hasta un cubículo para comenzar a tratarlo, una enfermera se me une y entonces empezamos a trabajar mientras los paramédicos se van.

                                            …

Jennifer♡:
¿Qué te parece una película esta noche?
18:40 p.m.

Yo:
Acepto, ya casi salgo
18:41 p.m.

Jennifer♡:
Entonces nos vemos más tarde
18:41 p.m.

Sonrío y bloqueo el celular, me asusto con un grito diciendo mi nombre, alzo la cara y es Mariam acercándose, guardo mi celular en la bata blanca y abro los brazos, la castaña se acerca y nos fundimos en un abrazo como si duramos dos años sin vernos, nos reímos y le dejo un beso en la mejilla para luego alejarnos, me doy la vuelta y caminamos hasta la cafetería, en el camino vamos conversando de todo un poco.

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