Me desperté en el medio del vuelo con un poco de frío. Miré a mi lado, Franco dormía cómo un tronco, hecho un bollito. Supuse que tenía frío también, estaba en manga corta, así que agarré su manta que estaba a un costado y con cuidado lo tapé. Morí de ternura al ver cómo se acurrucaba al tacto de la manta calentita. No pude evitar sonreír, no sólo era lindo y simpático sino que también era tierno.
Me acomodé en mi asiento totalmente reclinado y me tapé hasta la cabeza también. Mientras me removía en busca de una posición más cómoda, escuché la voz de Franco adormecida.
- Cami...
- ¿Sí? -Respondí en voz baja asomándome por encima del apoyabrazos.
- Gracias. -Apenas pronunció con la voz ronca y abriendo los ojos para encontrarse con los míos que ya lo miraban.
Una sonrisa se esbozó en su rostro.
- De nada. -Le devolví el gesto lista para volver a acostarme, pero me llamó deteniéndome nuevamente.
- Cami.
Esperé a que dijera algo pero se mantuvo en silencio observándome. Alcé ambas cejas creyendo que así hablaría, pero no. Presionó sus labios guardándose las palabras y negó con la cabeza cerrando sus ojos lentamente listo para volver a dormir. Lo ignoré, y volví a dormir.
Desperté horas más tarde cuando ya habíamos llegado, bajamos del avión y fuimos cada uno por su lado, sabía que lo encontraría más tarde en el hotel de todas formas. En el camino, fui charlando con mi viejo, poniéndonos al día con nuestras cosas, hasta que hizo determinado comentario.
- ¿Qué onda con Franco? -Quedé tiesa, aunque él no podía verme porque iba adelante, se rió ante mi silencio.- Mamita. -Negó tentado.- Es tremendo este pibe.
- No pasa nada con Franco. -Me defendí.
- Sí, dale... y yo soy pelado de gusto.
Rodé los ojos y desvié la atención a mi celular, entré a Instagram y vi notificaciones de seguidores nuevos.
francocolapinto ha comenzado a seguirte. 1h
Sin quererlo una sonrisa se dibujó en mi rostro. Le devolví el follow. Una vez llegamos al hotel nos acomodamos cada uno en su habitación y al rato apareció mi viejo para decirme que él iba a ir al autódromo así que si quería podía aprovechar el día e ir a la playa que estaba cerca con el otro auto que había alquilado. Eran las nueve de la mañana así que obviamente acepté la oferta y después de cambiarme y hacerme un bolso fui al estacionamiento en busca del auto, al verlo quedé boquiabierta, era un Porsche celeste como el de Cars. Mi viejo sabía que era mi película favorita, y que me encantaba ese auto, sobretodo para ir a la playa.
Me subí contenta y manejé rumbo a la playa, allí pasé toda la mañana tomando sol y metiéndome al mar. Alrededor de la una de la tarde me empezó a dar hambre, agarré el celular para buscar a donde podía haber un lugar para comer cercano pero una notificación en mi pantalla me llamó la atención. La abrí sin pensarlo.
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Loco (Franco Colapinto)
FanfictionCamila, una chica totalmente común y corriente, estudiante de diseño y modelo en sus ratos libres, acompaña a su padre en un viaje de trabajo en el que su vida da un giro inesperado al tener que convivir con el nuevo icono argentino, Franco Colapint...