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'Querido diario…'

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UN AÑO DESPUÉS

“Ser o no ser…”

…Río de Janeiro, Brasil…

“Querido diario: hace un año que logré, con éxito, infiltrarme dentro de la academia de una de las familias 'D.' a pedido de mi amo, el dueño de mi destino: Buffalo Vince. Está doble vida me ha permitido ser consciente de mucha información, la cuál he compartido con el amo.

Mi amo, se ha encargado de regarla a varios puntos de su conveniencia. Llegó mi hora y debo actuar con mi siguiente objetivo, algo muy preciado para la familia Monkey D.

El siguiente heredero al trono…

Monkey D. Rob.”

—¡Todos arriba!, es hora de desayunar.

De 14 niños rescatados… Siete son niños y siete son niñas. Hoy en día todos cumplen con los dieciséis años o más de edad.

Cada lunes por la mañana, Dragón bajaba junto con su familia a desayunar con esos niños rescatados para darles seguridad, y un pequeño bono de dinero para ellos.

Ya sea para dulces, libros o juguetes, lo que quieran. Juguetes cómo: canicas o balones o tirachinas, etcétera.

Intentaban darles lo que consideraban más que necesario para mantenerlos fuera de la tentación.

Esa tentación de probar más y más, y con el dinero en sus manos, podían irse por un río más tranquilo y “sencillo”.

Zoro y Usopp, estuvieron en esa academia varios años…

Luego de que la madre de Usopp enfermara y que su padre no apareciera; Banchina, por amor a su hijo, lo dejo a manos del “Ejército Revolucionario” de Monkey D. Dragón.

Yasopp, le dijo: «sí, algo me sucede, llévalo con ellos.»

En cambio… Zoro paso de ser un niño con futuro en Kendo, a vivir lejos de Japón, en otro continente y en otro país.

Cultura nueva, lengua nueva…

No se dio por vencido, con el apoyo de sus padres aprendió (y domino) el idioma, sus habilidades aumentaron cuando participó en clases de JJB ó Jiu Jitsu Brasileño.

Sin embargo…

Un día sus padres fueron víctimas del odio, del racismo, y la xenofobia.

«¡Malditos amarillos de mierda!», se grabó en la memoria de un Zoro de diez años de edad. «¡Regresen a su país!», escuchó.

«¡Solo traen pobreza y enfermedades!», lo último que alcanzó a oír, antes de que una piedra golpeará su cabeza, y perdiera todo conocimiento.

Al despertar… La verdad fue cruda y muy dolorosa.

Paso de tener una familia, a ser un niño en las calles, huérfano, pero todo cambio una tarde cuando se topo con Luffy, Usopp, Uta jugando de arriba para abajo por dónde no deberían.

Los ideales de Luffy y Dragón comenzaron a navegar por corrientes distintas, al pasar de los años.

En esos días… Uta se encontraba más que enamorada por Luffy, pero el chico quería pasar tiempo con sus amigos.

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