Shen Jiu regresa en el tiempo a cuando era un esclavo en la mansión Qiu después de que termina su segunda vida como un joven maestro mimado de una familia rica en el mundo moderno. El le dice un rotundo NO y elige quedarse fuera de la situación y se...
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NOTA
Shen Jiu lleva a sus discípulos jóvenes a una misión y Liu Qingge finalmente tiene tiempo en pantalla con su familia.
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"¿Quieres dirigir a los discípulos en misiones?", preguntó Cheng Qi con sorpresa. Su Gege no había dirigido una misión desde hacía bastante tiempo, desde Wen Yee...
—¿Qué misión tienes entre manos? —preguntó, intentando no pensar en cosas deprimentes—. Tenemos muchas peticiones que cumplir.
"Cualquier cosa que pienses que sería una buena lección para los jóvenes", dijo Shen Jiu, mirando los papeles y pergaminos.
Después de salir de su reclusión, nombró oficialmente a Cheng Yi como su senescal y a la mayoría de sus discípulos de la primera generación como sus maestros de salón. No era como si ya no estuvieran a cargo de sus respectivas casas, pero el título oficial aún no se les había otorgado, ya que no habían alcanzado la maestría en su nicho elegido hasta hace poco.
"Me gustaría evaluar primero a tus discípulos", le dijo Shen Jiu a Cheng Qi con un brillo de anticipación en sus ojos. Al verlo, la joven se estremeció de aprensión y rezó interiormente por la supervivencia de sus pobres discípulos.
—Sí, Shifu —dijo, y luego añadió suavemente—: Pero, por favor, sea amable con sus nietos.
"¿Qué nietos?", preguntó Shen Jiu, con el oído atento como siempre, y rápidamente le entregó un pergamino.
"Un pueblo cercano informó que había un fantasma", informó rápidamente. "Al principio, era relativamente inofensivo, por lo que los aldeanos simplemente lo ignoraron. Pero tres niños desaparecieron y les preocupa que desaparezcan más".
Sabiamente, decidió ignorar sus tonterías y abrió el pergamino. La aldea era relativamente pequeña, por lo que no fue una sorpresa que se notara casi de inmediato la ausencia de algunos ocupantes.
"¿Esclavistas?", preguntó y Cheng Qi negó con la cabeza.
"El jefe de la aldea fue quien llegó con la petición. Dijo que no había informes de que los hombres extraños hubieran pasado por allí", dijo.
