Llegar a Brasil es algo que Red Bull entero hubiese deseado no hacer.
Al iniciar las actividades, Horner volvió a llamar a Max y Checo a su oficina y la sorpresa fue encontrar a George Rusell en ella.
El pobre omega lucia entre aterrado y emocionado. Algo curioso en realidad.
Todos tomaron asiento y Christian solo miro fijamente al piloto de Williams indicando que podía comenzar.
Bajo la fuerte mirada de Max y una sonrisa que buscaba ser reconfortante de Sergio, comenzó a hablar.
Los rumores comenzaron desde la sesión de fotos. Los primeros eran sobre la desesperación de RB por conseguir piloto y como nadie quería estar con Max tomaron al primero que pudieron estuviera preparado o no; después siguieron aquellos donde ponían en tela de duda las habilidades del mexicano; los problemáticos llegaron cuando se dijo que el omega había engatusado al primer piloto de RB y que además también se insinuaba a otros pilotos como Lewis y Alonso lo que daba peso a la teoría de que la rivalidad era más allá de la pista. Algunos, los peores, hablaban de que Checo había desaparecido por un embarazo no planeado y que el padre de ese bebé era Hamilton.
Para Sergio no fue sorpresa escucharlos todos, los había estado escuchando a sus espaldas todo el tiempo. Eso no significaba que no dolieran.
Una parte maldecía y agradecía que su relación con Jules hubiera sido tan cerrada a los medios y al público general y asi nadie pudiera atacarlo con el accidente del francés pero tampoco podía defenderse de esas acusaciones justo por el hecho de no querer mencionar que se fue para cuidar a su prometido y todo lo que pasó después.
Max, por otro lado, estaba furioso.
—¡¿Y bien?! ¡¿Quien es el hijo de puta qué los ha estado haciendo?!— Su fuerte y enojada voz hizo tragar saliva a George.
—No-No lo sé. — Jura que pudo notar un aura asesina salir del alfa. — ¡Juro que no lo sé! Yo... Yo solo digo lo que escuché.
—¿Que nos garantiza que no eres tu? — Esta vez fue Horner, buscando una grieta en George para sacar más información.
—¿Yo?
—Si, al fin de cuentas Sergio entró a remplazar a Albon, ustedes dos eran cercanos.
—¡No fui yo!
—¿Es una especie de venganza por Alex? — Esta vez fue Max, levantándose de su asiento.
—¡Qué no fui yo!
Sergio no tuvo corazón para dejar que siguieran atacando al pobre chico que parecía al borde de las lágrimas. Detuvo a los otros dos y le paso un vaso de agua al piloto de Williams.
—Yo le creo. — Estuvo a punto de ser interrumpido con el rubio pero con una sola mirada lo hizo callar. — No veo porque George haría algo así. Si bien no nos conocemos mucho, no creo que sea ese tipo de persona.
El británico quiso esconderse en los brazos de Sergio, aliviado de ser salvado pero la cara de Max bastaba para detener ese tren de pensamiento. Principalmente por que le gusta vivir.
No se pudo hacer mucho más, además el personal de Williams había ido en rescate del británico lo que concluyó la reunión.
—Realmente no creo que sea George. — Volvió a declarar Sergio una vez que pudieron salir de las oficinas al ver a Max aun enojado.
Horner prometió seguir investigando pero no se veia esperanzador.
Fernando y Carlos habían estado dando vueltas alderedor de los garajes de Red Bull sin entrar ni saludar a los pilotos.
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¿Cuantas victorias para tu corazón? Chestappen
FanfictionA Max le gustaba ganar y ahora su primer campeonato era un posibilidad asi que nada lo iba a detener pero si algo le gustaba más, era el bonito omega que sería su nuevo compañero y ahora que estaba la posibilidad de conseguir una cita por cada carre...