Capítulo 55

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Chaeyoung

Mina y yo estábamos sentadas frente a la mesa en la sala de estar, con la caja decorada frente a nosotras. El ambiente estaba lleno de una mezcla de nervios y anticipación, mientras que mis madres se preparaban para abrirla. Y mis hermanas no podían quedarse quietas, saltando alrededor de la caja, ansiosas por saber qué había dentro.

—¡Ábrela ya! —gritó Dahyun, con sus pequeñas manos estiradas hacia la caja.

—¡Sí, mamá!, ¡Rápido! —añadió Ryujin, prácticamente tirando de la camiseta de mi madre.

—¿Qué tienen, eh? Tranquilas, no va a desaparecer —dijo, riendo mientras empezaba a desatar la cinta.

Mientras tanto, Mina y yo nos mirábamos nerviosas, sin poder dejar de sonreír, esperando la reacción de ellas cuando finalmente vieran la sorpresa. Las mellizas se quedaron en silencio por un segundo, observando cómo Jeongyeon retiraba la tapa con deliberada lentitud, como si disfrutara de la expectación.

Finalmente, la tapa se levantó, y dentro, las pequeñas pijamas tejidos a crochet por Mina y zapatitos de bebé quedaron a la vista. Mi madre arqueó las cejas, sacando uno de los zapatitos con expresión divertida.

—¡Miren nada más! —exclamó, riendo—. ¡Ya tenemos los primeros regalos para nuestro bebé! —dijo alegremente, mientras levantaba el zapatito en el aire, claramente refiriéndose a Nayeon, quien también estaba embarazada.

Las mellizas, confundidas, se miraron entre ellas y luego a mí, mientras yo no pude evitar reírme nerviosamente. Mina, a mi lado, se mordía el labio para contener su propia risa.

—Má... —intenté decir, pero ella seguía sin captar la verdadera sorpresa.

—¡Esto es perfecto! —dijo, todavía sin entender—. ¡Estos nos servirán cuando nazca tu hermanita!. Ay hija no sabía cuánto deseabas tener otra hermanita.

Mamá se acercó, también sonriendo, pero algo en la caja llamó su atención. Se inclinó un poco más y vio un sobre blanco que no había notado antes. Con curiosidad, lo tomó, mirándolo con cierta intriga.

—¿Qué es esto?.—preguntó, mientras abría el sobre.

El ambiente cambió inmediatamente cuando sacó la ecografía. La expresión de mamá se transformó de confusión a sorpresa. Sus ojos se abrieron más al ver el contenido del sobre y leyó en voz baja las palabras: "Positivo de embarazo".

Hubo un segundo de silencio antes de que mamá levantara la mirada, incrédula.

—Chaeyoung... Mina... —susurró, mientras una lágrima de emoción se deslizaba por su mejilla—. ¿Ustedes...?

Mi madre, que hasta ese momento seguía feliz con los zapatitos, frunció el ceño y se acercó para ver el sobre.

—Espera... —dijo, mirando la ecografía más de cerca—. ¡Un momento! ¿Ustedes... serán...? —Su voz se fue apagando mientras lo procesaba.

Mina sonrió con los ojos llenos de lágrimas, y yo, sin poder contener más la emoción, asentí, apretando su mano con fuerza.

—Sí, Mina está embarazada, Mamá. —dije finalmente.

La sala estalló en una mezcla de emociones. Mamá se llevó las manos a la boca, conteniendo un sollozo, mientras que mi madre finalmente soltó una carcajada, llena de sorpresa y alegría.

—¡Vaya! ¡Felicidades!—dijo Jeongyeon, abrazándonos fuerte—. ¡Esto es increíble! ¡Voy a ser abuela y madre de nuevo al mismo tiempo!. Y... Cuántos meses ya tienes, Mina.

730 Días A Tu LadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora