Continuación...
De repente, soltó mi mano y se recostó en el respaldo de la silla, con una sonrisa que parecía forzada.
—Estoy bien por si te lo preguntas—dijo, cuando la miré con preocupación—. No te preocupes por mí, Chaeyoung. Disfruta el juego.
Su tono era demasiado ligero, como si de repente hubiera decidido que no valía la pena molestarse. Esa repentina despreocupación me puso en alerta, pero decidí seguirle la corriente, esperando que realmente se sintiera mejor.
El ambiente volvió a relajarse, y mis amigos comenzaron a hablar y reír de nuevo. Por un momento, pensé que todo estaba bien. Pero entonces, algo cambió. Mina, normalmente reservada y tranquila, pidió un trago fuerte, algo que rara vez hacía.
Me sorprendió, pero no quise decir nada que pudiera agriar el ambiente de nuevo. Ella tomó el trago de un solo golpe y pidió otro. Empezó a reírse más alto, a hacer comentarios sarcásticos sobre el juego y las bromas que se lanzaban entre mis amigos y yo. Sus ojos brillaban, pero no con la chispa habitual; había algo más, algo que me preocupaba.
—Mina, ¿estás segura de que estás bien? —le pregunté en voz baja, inclinándome hacia ella.Ella me miró, y su sonrisa se amplió, casi desafiante.
—Claro que sí, Chaeyoung. ¿Por qué no iba a estarlo? —respondió, su tono ligero, pero con una intensidad que no era normal en ella. Antes de que pudiera responder, Mina se levantó de repente y se dirigió hacia la pista de baile emocionada junto a Camila.
La música era animada, y pronto la vi perderse en la multitud, moviéndose al ritmo de la música con una energía que rara vez mostraba. Parecía que se estaba divirtiendo, pero algo no se sentía bien. Observé cómo tomaba más tragos, su cuerpo moviéndose con una soltura que me resultaba extraña.
Mis amigos notaron mi incomodidad, pero me dijeron que la dejara disfrutar, bromeando que mi señora necesita diversión. que quizás solo necesitaba soltarse un poco. Traté de seguir su consejo, pero no podía dejar de sentir que algo estaba mal.
Mina estaba bebiendo demasiado, y aunque seguía sonriendo y riendo, había algo en sus ojos que no cuadraba. Después de un rato, me levanté y me uní a ella en la pista de baile, intentando que se acercara a mí. Pero ella se alejó un poco, su risa demasiado alta, su mirada un poco perdida.
—Vamos, Chaeyoung, diviértete un poco —dijo, agarrando otro trago y dándome un pequeño empujón juguetón.
La seguí, preocupada por lo rápido que estaba bebiendo. Cada vez que trataba de acercarme, ella se alejaba, como si quisiera mantener una distancia. Aun así, me mantuve cerca, asegurándome de que no se metiera en problemas.
—Princesa, necesitamos ir a casa —le dije, intentando guiarla hacia el sofá para que descansaraun poco.Ella me miró, sus ojos vidriosos por el alcohol, pero aún había un rastro de los celos que había visto antes.
—¿Por qué? ¿No te lo estás pasando bien, Chaeyoung? —preguntó, su tono sarcástico, pero con un trasfondo de dolor.
—No es eso. Has bebido demasiado, necesitamos descansar —le respondí suavemente, tratando de no avivar su mal humor.
Ella me miró, y por un momento pensé que se molestaría aún más, pero en lugar de eso, sonrió de una manera que no había visto en mucho tiempo, como si de repente se hubiera liberado de todas sus preocupaciones.
—No te preocupes por mí, Chaeyoung. Solo estoy disfrutando un poco —dijo, su tono alegre y despreocupado.
Antes de que pudiera decir algo más, Mina se levantó del sofá con una energía renovada y se dirigió de nuevo a la pista de baile. La vi alejarse, moviéndose al ritmo de la música con una soltura que no era típica de ella. Me quedé sentada por un momento, observándola, intentando procesar lo que estaba viendo.
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730 Días A Tu Lado
Fanfic[TRILOGÍA MICHAENG] 3ra temporada. Chaeyoung tuvo un accidente la cual la dejó en coma por muchos años haciendo así que se le dificulte un poco recordar el pasado como también hacer algún movimiento motriz. durante el coma Chaeyoung a estado en un s...