capitulo 22(soy una carga)

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La rutina de TN se había vuelto predecible: desayuno ligero, caminatas por los jardines, sesiones con la nutricionista y descansos prolongados. Pero aquel día, algo en su estado de ánimo se sentía más pesado. Desde que había comenzado el tratamiento, TN había estado luchando con la sensación de estancamiento, pero siempre había una pequeña chispa de esperanza, un rayo de luz que le hacía creer que todo mejoraría eventualmente. Sin embargo, hoy esa esperanza parecía lejana.

Después de la caminata matutina, decidió que era momento de enfrentarse a una realidad que había estado evitando. En el baño, la báscula esperaba silenciosamente en un rincón. TN la miró por un largo momento, su corazón acelerado, mientras las dudas y los miedos la asaltaban. Respiró profundamente y se subió.

El número en la pantalla apenas había cambiado.

25 kilos.

Su estómago se hundió, y sintió una oleada de frustración atravesarla como una descarga eléctrica. Todo ese esfuerzo, todo el dolor, las sesiones con la nutricionista, los intentos de comer más... ¿para qué? Nada parecía estar funcionando. Las lágrimas empezaron a llenar sus ojos mientras se bajaba de la báscula con las piernas temblorosas.

Sentía que todo se desmoronaba de nuevo.

Michael la encontró minutos después, acurrucada en el borde de la cama, con las manos apretadas alrededor de su rostro, luchando por contener el llanto. Al verla así, supo inmediatamente lo que había sucedido.

 Al verla así, supo inmediatamente lo que había sucedido

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—TN... —dijo suavemente, acercándose a ella, preocupado—. ¿Qué pasó?

Ella no respondió al principio. Las palabras se le atascaban en la garganta, y la vergüenza por no haber avanzado como esperaba la invadía por completo.

—No he subido nada... —susurró al fin, apenas audible—. Todo este esfuerzo, y sigo igual. No puedo hacerlo, Michael. No puedo seguir así.

Michael se sentó a su lado, colocando una mano en su espalda para consolarla.

—Sé que esto es difícil, TN. Pero lo que importa no es lo que dice la báscula. Lo que importa es cómo te sientes, cómo estás luchando por seguir adelante cada día. El número no define tu progreso.

TN negó con la cabeza, limpiándose las lágrimas apresuradamente.

—Pero debería. Se supone que debería haber subido algo. Todos esperan que mejore, que sea más fuerte, pero no puedo. No puedo hacerlo.

Michael tomó su rostro entre sus manos, obligándola a mirarlo a los ojos.

—Escúchame, TN. El hecho de que estés aquí, intentando, es todo lo que importa. Sé que es frustrante, sé que parece que no estás avanzando, pero cada paso que das, cada día que decides seguir luchando, es una victoria. No quiero que te castigues por algo que llevará tiempo. Lo que más importa es tu bienestar, no un número.

Los ojos de TN seguían llenos de lágrimas, pero algo en las palabras de Michael le dio un pequeño rayo de consuelo. Aun así, el peso de la decepción seguía oprimiéndola.

—Es que... me siento como una carga para todos. Para ti. No quiero seguir siendo así.

Michael la miró profundamente, con una mezcla de dolor y ternura.

—No eres una carga, TN. Eres alguien que amo, y quiero ayudarte a superar esto. No me importa cuánto tarde o cuán difícil sea. Estoy aquí porque quiero estar aquí. No tienes que hacerlo sola. Estoy contigo, siempre.

La sinceridad en su voz hizo que TN sintiera un calor en su pecho, como si por un momento pudiera creer que las cosas realmente podrían mejorar. Se permitió respirar más profundamente, aunque el dolor seguía allí.

—Gracias... —susurró, con la voz quebrada.

Michael la abrazó suavemente, sosteniéndola en silencio. Sabía que las palabras no siempre eran suficientes, pero esperaba que su presencia pudiera ser un ancla en medio de la tormenta que TN estaba atravesando.

Esa tarde, decidieron no hablar más del peso. En su lugar, TN intentó concentrarse en los pequeños pasos, en las pequeñas decisiones que sí podía controlar. Sabía que habría días como este, días en los que se sentiría atrapada en el mismo lugar, pero también sabía que Michael no la dejaría caer.

Aunque el camino era incierto, lo único claro para TN era que no estaba sola. Y tal vez, solo tal vez, eso era lo que realmente necesitaba para seguir luchando.

todo puede pasar en una nocheDonde viven las historias. Descúbrelo ahora