Eternal Curse Of The Moon

Festival de las flores

El sol ya se había puesto, la noche se empezaba apoderar del reino. Las dulces melodías se escuchaban por las diferentes calles del reino, la risa de las personas y los niños quienes danzaban al ritmo de las melodías que se tocaban. Las familias de los reinos vecinos también celebraban junto a las familias de nuestro reino el tan esperado festival de las flores.

Tras el paso de las horas la población se reunió con alegría viendo las exposiciones de los diferentes cuadros hechos a base de distintos tipos de flores; había muchos cuadros hermosos, a decir verdad, me sorprende lo creativos que pueden llegar a ser las personas realmente.

Todos los chicos estábamos reunimos viendo los cuadros que estaban en nuestro camino, recibiendo elogios de las personas que se nos acercaban con algo de vergüenza y nervios; nosotros estábamos un poco contentos de verlos felices luego de todo lo que había pasado anteriormente en Entoria, sin duda alguna podíamos sentir esa aura de felicidad irradiar de ellos fuertemente.

Audrey y yo nos acercamos agarradas de la mano a nuestro cuadro que estaba siendo cuidado por algunos guardias, cuando nos vieron se retiraron a otra área cerca de nosotras. Las personas se acercaron rápidamente para hablar sobre el cuadro y lo hermoso que nos había quedado, Audrey sonreí orgullosa al escuchar los halagos a nuestro trabajo de muchas horas, aunque halagos sobre el cuadro no era lo único que recibía Audrey, el vestido que llevaba puesto era de color verde con estampados de flores, sin duda, nos dejaba claro que el verde era su color, mi compañera de vida se miraba preciosa y no era de extrañar que tantos niños como jóvenes halagaran lo hermosa que se miraba esta noche.

Por otro lado, tenemos a los demás chicos que estaban rodeados de un pequeño tumulto de jovencitas que los halagaban sin parar, esperando poder bailar con ellos en algún momento de la noche que quedaba; solté una pequeña risa al ver la expresión de aburrimiento de Lewis, la manera en la que Brock y Leyden hablaban sin parar con algunas doncellas; como James, Marwaen Y Birenth trataban de mantener su postura y no reír por las ocurrencias de Brock y Leyden.

El ruido de unas trompetas hizo que las personas que estaban reunidos se mantuvieran en silencio ante la llegada de nuestros padres, las personas reunidas murmuraron mientras otros tenían una expresión de alegría al ver a los reyes llegar por fin a la celebración. Las doncellas que estaban con los chicos se alejaron de ellos rápidamente ante la presencia de nuestros padres, nosotros por nuestra parte nos mantuvimos de pie en nuestros lugares esperando por su llegada a nuestro lado.

Cuando se acercaron lo suficiente hicimos una reverencia la cual fue seguida por el resto de personas que se encontraban en el lugar, al terminar los ojos de mi madre cayeron sobre mí con una pequeña sonrisa la cual correspondí lentamente para después regresar a mi postura habitual, mi padre dio un paso al frente para hablar.

-Tengan una hermosa noche mis queridos Entorianos y visitantes de los reinos vecinos, es un gran honor para mí y mi familia tener aquí esta noche a los reyes de Aclasia, Anciel, Prouston, Glinasty, Forlez y Hyrule –dijo señalando a los reyes mientras ellos asentían levemente saludando a la población- Esperamos que estén pasando un momento agradable y sin perder más el tiempo, espero que esta noche el brillo de la luna caiga sobre todos nosotros y sigamos avanzando en tranquilidad.

La música volvió a empezar mientras las personas gritaban de alegría empezando a reunirse en la plaza para danzar con sus acompañantes; mi madre se acercó a mí con una sonrisa tomando mi mano con delicadeza.

-Les quedo muy hermoso el cuadro –dijo dándome una pequeña sonrisa-

-gracias madre –murmure haciendo una leve reverencia-

Mi madre se alejó de mi tomando la mano de mi padre para ir al centro del baile, tomaron sus manos y empezaron a dar vueltas al ritmo de la melodía que los músicos tocaban con entusiasmo, los padres de los chicos también se unieron al baile mientras se escuchaban los aplausos de las personas felices en el lugar; los minutos pasaron mientras los chicos se unieron también a bailar con algunas doncellas que les pedían poder bailar, Audrey y marwaen se unieron a bailar ellos dos juntos…fue muy divertido observarlos dar vueltas mientras reían tratando de seguir el ritmo de los demás, la música iba más rápido haciendo que el resto del baile fuera más divertido al ver a las parejas cambiar unos con otros mientras seguían bailando y dando vueltas una y otra vez entre risas;  luego de eso tenemos a Lewis quien se mantenía con la misma expresión de siempre viendo el suelo, a pesar de que muchas chicas se le acercaron para poder bailar junto él, el mismo se negó diciendo que no le apetecía bailar en ese momento.

Lewis me dio una mirada de aburrimiento mientras se acercaba a mí, al llegar a mi lado se quedó de pie junto a mi sin decir una sola palabra o mostrarme alguna expresión muy diferente a la que siempre tiene en su rostro…a veces pienso que es algo extraño.

-Ya casi es media noche –empezó a hablar manteniendo sus ojos en las personas que bailaban en la pista-

Asentí en respuesta manteniendo mi mirada en el suelo, jugando con mis dedos por el sueño que sentía en ese momento; levanté mi rostro encontrándome con los ojos cafés de Lewis verme con curiosidad antes de hablar.

-Me harías el honor de dejarme bailar esta pieza contigo –dijo suavemente mientras colocaba con cuidado la rosa entre los mechones de mi cabello-

-Esa es la rosa que me quitaste hace unas horas ¿verdad? –pregunte con una pequeña sonrisa-

-Pueda ser…pero la rosa se mira más bonita en tu cabello que en el cuadro –confeso viéndome a los ojos, mientras terminaba de acomodar la rosa en mi cabello-

Lewis dio un paso más acercándose a mí con una pequeña sonrisa en su rostro, tomo mi mano con delicadeza para guiarme junto a él a la pista donde otras parejas ya nos miraban con curiosidad y otras atentas al ver el gesto de Lewis conmigo, otras miraban la hora viendo que la media noche estaba llegando; los murmullos no tardaron en llegar, algunos con recelo de ver al futuro heredero de Glinasty llegar al centro de baile junto a mí y otros eran expresando lo dulce de la escena que estaban admirando.

La música empezó anunciando que el baile de media noche había empezado, el aroma de las flores se colaba por mis fosas nasales, haciendo que el momento del baile de medio noche fuera aún más mágico de lo que era hace unos minutos; los caballeros comenzaron a acercase junto a una flor a su pareja escogida, la melodía empezó lentamente colándose con el ambiente nocturno, pero a la ves brillante del lugar; Lewis acerco mi cuerpo al suyo ligeramente tomando una de mis manos y colocando la otra en mi cadera suavemente para empezar a bailar al ritmo de la melodía, nuestros cuerpos se deslizaban con suavidad al dar una vuelta mientras nuestras miradas se conectaban por segundos, siendo atrapados en un momento de tranquilidad  en medio del caos que las olas de terios dejaban en el fondo de nuestros corazones; nuestros pies se mecían a un ritmo ligero por la pista, la sensación de nuestros cuerpos bailando bajo la luz de la luna parecía ser mágico, nuestros ojos se conectaron manteniendo la mirada uno al otro mientras seguíamos bailando al son de la música y cada minuto que pasaba se hacía más difícil el apartar la mirada uno del otro…mis ojos miraban los suyos con curiosidad por querer descubrir por qué Lewis era tan distante.

-Bailas muy bien –murmuro el con suavidad mientras tomaba mi mano izquierda al compás de la melodía-

-Si tú lo dices, te creo –respondí con una sonrisa moviéndome por su costado dando una vuelta a su alrededor-

Nuestros ojos conectaron nuevamente y solo por unos segundos el mundo parece ir un poco lento al ver los ojos de Lewis con un ligero brillo que tenía años sin ver...

-No solo es mi opinión…Es un hecho princesa –respondió mientras se detenía al escuchar el ultimo acorde de la melodía-

Quedamos frente a frente viéndonos sin decir nada por unos segundos, los aplausos nos sacaron del momento haciendo que soltáramos el agarre que teníamos en nuestra mano derecha, nos dimos la vuelta viendo los rostros de los chicos con curiosidad y a la ves con ternura, las miradas de los presentes estaban también en nosotros a la vez que se anunciaba el fin del festival de la noche de las flores.

-Fue un placer bailar contigo princesa –dijo Lewis dejando un pequeño beso en el dorso de mi mano derecha-

Después del pequeño momento entre ambos se levantó haciendo una corta reverencia para luego alejarse de mi e ir donde se encontraban sus padres; yo seguía de pie ahí viendo mi mano sintiendo todavía la calidez de los labios de Lewis sobre ella.