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------------------------------------------------------------- Dorito y Benja estaban jugando en el patio trasero de la cabaña como cualquier otro día, riéndose y compartiendo momentos de amistad. Sin embargo, había algo en el aire que parecía diferente. Desde que Dorito comenzó a entrenar para controlar sus poderes con la ayuda de Bill y Ford, sus habilidades habían empezado a manifestarse de maneras inesperadas. Benja, sin darse cuenta, también sentía algo raro en el ambiente, pero no le prestaba demasiada atención.
De repente, mientras jugaban a lanzar una pelota, Dorito se detuvo en seco. Una energía desconocida la invadió, sintió cómo su poder crecía dentro de ella sin control. Benja notó la mirada preocupada en los ojos de su amiga y corrió hacia ella.
"Dorito, ¿estás bien?", le preguntó Benja, tocándole el brazo.
En ese momento, una corriente de energía los envolvió a ambos. Un destello brillante los rodeó, y antes de que pudieran procesarlo, sintieron una especie de fusión entre ellos. Era como si sus mentes se hubieran conectado, compartiendo pensamientos, emociones y, lo más extraño de todo, poder.
"Dorito… ¿qué está pasando?", preguntó Benja, algo asustado pero también emocionado por la extraña sensación.
"No lo sé, pero siento que somos más fuertes juntos…", respondió Dorito, aún sorprendida.
Esa sensación de unidad duró solo unos segundos antes de que la energía se disipara lentamente. Ambos se miraron confundidos, tratando de entender lo que acababa de suceder. Sin embargo, esa conexión los dejó con una sensación de poder que ninguno de los dos había experimentado antes.
Dorito corrió a contarle lo ocurrido a Bill y Ford, quienes estaban en el sótano revisando viejos libros de magia. "¡Papá, Bill! ¡Algo extraño acaba de pasar!", exclamó, entrando de golpe.
Ford levantó la mirada, intrigado. "¿Qué sucedió, Dorito?"
Dorito les explicó todo lo que había pasado con Benja, cómo una energía los había envuelto y cómo sus poderes parecían haberse combinado por un breve momento. Bill se cruzó de brazos, pensativo.
"Es posible que haya una conexión especial entre ustedes dos, algo que va más allá de la amistad", explicó Bill. "Algunos seres mágicos experimentan algo similar cuando encuentran a alguien con quien sus energías resuenan. Esa conexión puede hacerlos más fuertes, pero también puede ser peligrosa si no saben controlarla."
Ford asintió. "Es cierto. Si ustedes dos comparten una especie de fusión de poder, podrían tener una ventaja en ciertas situaciones, pero necesitarán aprender a manejarlo antes de que se salga de control."
A partir de ese día, Bill decidió poner a prueba esa conexión. Cada vez que Dorito entrenaba, Benja estaba cerca para ver si la energía se manifestaba de nuevo. Había momentos en los que, ante situaciones de estrés o peligro, esa fusión volvía a ocurrir, pero de manera inestable. Bill, con su magia, lograba interrumpirla cuando las cosas se salían de control, devolviendo a Dorito a su estado normal.
