CAPITULO 21

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Rin, con la mirada fija en el hombre de aspecto sombrío que se encontraba frente a él, le ofreció una sonrisa ladeada.

- Tengo una propuesta para ti, amigo. Una que te hará ganar una buena cantidad de dinero - expresó el menor de los Haitani.

El hombre, con un cigarrillo colgando en sus labios, levantó una ceja con interés.

- Escúchame bien - continuó Rindou, su voz suave pero firme -. Necesito información. Información sobre un tipo llamado Kaito.

Sin duda alguna, Rindou sabía quien era el hombre, pero no sus movimientos ni su ubicación exacta.

El hombre asintió lentamente.

- Se que eres un hombre de recursos - dijo Rin, deslizando un fajo de billetes sobre la mesa -. Y se que puedes conseguirme lo que necesito.

El hombre tomó el dinero y lo examinó con cuidado.

- Dime qué necesitas saber - dijo finalmente.

Rin le explico la situación de Kaito. El hombre escucho atentamente, con el ceño ligeramente fruncido.

- Entiendo - dijo finalmente -. Puedo conseguirte esa información. Pero me va a costar.

Rin asintió.

- Lo que sea necesario - dijo.

El hombre sonrió, mostrando una hilera de dientes amarillentos.

- Entonces, hagamos un trato - menciono Rindou.

Mientras Rindou y el hombre discutían los detalles del trato, Ran permanecía en silencio, observando la escena con una mezcla de preocupación y resignación. Ran sabía que su hermano se estaba arriesgando, pero lo apoyaba porque él también habría hecho lo mismo en su lugar. Sabía que Rin era testarudo y que no cambiaría de opinión.

- Ten cuidado, Rin - dijo finalmente, con un tono de voz bajo.

Rindou le dedico una sonrisa tranquilizadora.

- No te preocupes, hermano. Sé lo que hago.

El hombre terminó de contar el dinero y guardó los billetes en su bolsillo.

- Me pondré en contacto contigo cuando tenga la información - dijo, antes de levantarse y salir del club.

Los hermanos Haitani se quedaron solos en la sala, en silencio - Espero que sepas lo que estás haciendo - dijo el mayor finalmente.

Rin suspiró - Lo sé - dijo - Solo estoy cuidando nuestros intereses - Comentó, refiriéndose a que Kaito también quería unirse a la compañía de Hattori. Tengo una ligera sospecha de que ese sujeto sabe más de lo que debería; ya antes se acercó a Himari, y eso no es una casualidad - Soltó Rindou.

Ran asintió, comprendiendo la determinación de su hermano - Está bien - dijo -. Quiero que sepas que te ayudaré si es necesario.

Rindou sonrió agradecido - Gracias, Hermano. No sé qué haría sin ti.

...

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𝐓𝐇𝐄 𝐓𝐀𝐓𝐓𝐎𝐎 𝐎𝐅 𝐌𝐘 𝐒𝐎𝐔𝐋 (𝐑𝐈𝐍𝐃𝐎𝐔 𝐇𝐀𝐈𝐓𝐀𝐍𝐈)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora