Otro par de meses pasaron y las cosas entre Lucian y yo iban mejor.
Empecé la universidad haces algunas semanas y me estuve enfocando en eso mucho últimamente.
Aunque la rutina era un poco repetitiva, me gustaba que fuera así.
Lucian se iba al trabajo temprano y siempre regresaba los medio días a comer conmigo, y se encargaba de recogerme en la universidad.
Y tal cual había dias, que se quedaba de más y volvía tarde a casa por cosas que no me gustaría decir.
Pero muy legales no eran.
A las dos de la mañana me paseo por la cocina buscado algún dulce después de haber hablado con Lucian minutos atrás, me dijo que seguía en una de las oficinas que quedan al lado del departamento y que no tardaría en llegar.
Abro la nevera y lo escaneo todo.
Aunque solo encuentro mucho postre que siempre hago y que siempre se termina comiendo Lucian.
Lo sé, extraño, yo no pruebo mis propios postres.
Con una camisa larga blanca puesta y un pantalón corto de tela me dirijo a la sala.
Pero antes de llegar el sonido del timbre hace que salte en mi lugar por el susto, y miro la puerta extrañada.
A lo mejor a Lucian se le quedó las llaves está vez.
Camino hasta la puerta y la abro solo un poco.
Para mí mayor sorpresa la Barbie plástica estaba sorpresivamente parada frente a mi.
-¿Hola? -le digo con confusión.
Ella me mira de arriba abajo y sin decir una sola palabra pasa al departamento nuevamente y por segunda vez como perro por su casa, la agarro por el brazo.
-¿Que mierdas haces aquí?.
Ella me mira.
-Vine aquí, porque es mi casa.
Me río.
-¿Tu casa enserio?, sal de aquí hasta que te rompa las extensiones que traes puestas.
Ella me mira con una sonrisa y se dirige hacia la cocina.
-¿Acaso no me escucha te dije que... -me corto cuando veo en sus manos una pistola.
Siento mi sangre helada por el miedo y mi cuerpo se paraliza viéndola.
Ella se ríe y se acerca a mi.
-Su mamá no te quiere cerca, yo tampoco muñequita.
La miro poniéndo mis manos frente a mi.
-No tienes porque hacer esto.
-No vine aquí a hablar Leyla, esto será rápido y sencillo.
La mira a los ojos.
-¿Crees que esto hará que Lucian se fije en ti?.
-¿Que se fije en mi?, si yo lo quiero es atarlo a mi para siempre, no me importa si no me ama, yo lo amo a el y eso es suficiente amor para los dos.
Ella me apunta con la pistola, y yo pongo las manos frente a mi y la mira nerviosa.
-¿Porque estar con un hombre que no amas?.
-La cantidad de dinero que dará su madre si me caso con el, es divina. ¿Debería decirte cuánto es?.
Al ver que me quedo callada ella se ríe.
-Te aseguro que es mucho más de lo vale tu miserable vida, solo eres un estorbo, necesito sacarte de en medio.
Y entonces sucede lo siguiente, Victtoria apunto de disparar y yo poniendo las manos en la pistola desviandola hacia arriba.
Ella no quita las manos de la pistola y la pelea conmigo llevándola abajo.
No sé que estaba mi cabeza, no se en que momento lo estaba pensando, pero solo sucedió.
Cuando la pistola estaba apuntando a ella disparo.
Grito de el susto y mi cuerpo tiembla agitadamente, Victtoria me ve y baja la mirada lentamente. Pone su mano en el abdomen y este se llena se sangre rápidamente.
La veo asustada, mi vista se nubla un poco y me paralizó.
¿Que acabó de hacer?.
Victtoria se agarra de mi y yo la agarro sentandola en el piso.
Ella no dice una palabra y yo pongo mis manos temblorosa en su herida que no para de sangrar haciendo un desastre en el piso.
Victtoria va cerrando los ojos y yo agarro su su cara con mis manos manchadas de sangre.
-¡No, no! -Le grito. -¡Victtoria mírame no cierres los ojos por favor!.
Ella trata de hacerlo pero en unos segundos. Sus ojos se cierran, y deja de respirar.
Me separó de ella con miedo y me rompo a llorar.
Soy una asesina.
Mate a alguien.
No merezco ser feliz.
Miro a los lados con desesperación y me levanto, pongo las manos en mi cabeza saltando en mi lugar con desesperación si saber que hacer.
Saco mi móvil y marco el número de Lucian pero mi teléfono queda sin señal lo tiró al suelo con rabia.
Hago lo primero que se me ocurre.
Salgo de el departamento cerrando la puerta sin importarme estás llena de sangre, manchada de una sangre de una persona que acababa de matar accidentalmente.
Corro hacia las escaleras abajo, nadie está por los departamentos a estas horas ni el guardia peor seguro las camaras lo vieron todo. Bajo corriendo descalza, abro la puerta mirando la exterior.
Miro el edificio de al lado, y corro hacia allí.
Ahora mismo si alguien se asomaba por la ventana juraría a ver visto a un fantasma.
Solo era yo corriendo desesperada por lo acababa de hacer.
En la puerta de edificio el chico me ve aterrizado.
-Señorita..
El guardia intenta agarrarme pero lo esquivo corriendo hacia la oficina de Lucian que queda en el primer piso.
Abro la puerta.
Lucian sentado en la mesa de la oficina con hombre Alrededor de el hablando, yo con llena de sangre y descalza.
Que loco verdad.
Lucian volteo hacia a mi y me ve.
Los hombres a su alrededor también lo hacen y se calla brucamente viéndome con sorpresa.
Lucian se despega lentamente y camina hacia mi con pasos lentos.
-Dime que paso pequeño ángel. -Me dice tratando de mantener la calma.
Miro mis manos llenas de sangre con asco, mi camisa hecha un desastre, convertida en algo que odiaba, y las lágrimas se salen por si solas.
-Fue un accidente...
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.Volvi, jaja que cosas verd pero buenas noticias, tengo el libro completo.
Y no salta mucho para que termine, porque lo que viene está cabron.
¿Leyla hizo mal por matar a Vittoria?, recuerden que ella reaccionó por impulso, es tan inocente que esto se le quedará marcado para siempre, y claro que traerá consecuencias.
Sin más que decir los quiero mucho y nos vemoooooosss.
Coplit 🤍
