En un vasto océano de leyendas y secretos, donde los ecos de antiguas batallas aún resuenan entre las olas, se despliega un mundo de piratas y aventuras que desafían la imaginación. Un reino donde los dioses observan desde lo alto, susurrando destin...
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▐くらやみ るす ▐ 𝐊𝐮𝐫𝐚𝐲𝐚𝐦𝐢 𝐑𝐮𝐬𝐮 ▐ 𝕶𝖚𝖗𝖆𝖞𝖆𝖒𝖎 𝕽𝖚𝖘𝖚
¡Santos Dioses del Olimpo! ¿Podría pasarme a mí lo más vergonzoso del mundo? ¡Oh!, ¡claro que me pasa a mí!
Limpiaba el submarino, y esta vez por decisión propia, mientras golpeaba mi cabeza con el palo de la escoba. Una, y otra, y otra vez paraba la misma imagen de Law debajo de mí y, ¡POR LOS DIOSES! ¡Qué vergüenza!
—¡Ahg! —me acaricié la frente, el golpe que me di antes sí que fue fuerte
—Rusu-chan —Bepo me miró preocupado
—Bepo, haz que la tierra me trague y me escupa en Troya —le pedí mientras me acercaba a abrazarlo, abrazo que el tierno osito correspondió
—No tengo ese poder, lo siento...
—No te preocupes, de igual forma, Troya no es tan bonito —lo consolé, no me agradaba la idea de que se disculpe por todo
—¿Quieres que revise tu frente?
—Nah, ya se me pasará el dolor, he pasado por peores cosas
—Sí... —parecía que Bepo quería decir algo, así que le di una indicación para que siguiera— Rusu-chan..., ¿en algún momento de tu vida..., te torturaron? —aquella pregunta me heló la sangre, me puse tensa en el pelaje del oso y agaché ligeramente la cabeza
—¿A-a qué te refieres?
—Bueno... cuando estaba sanándote, luego de Marineford, vi tus cicatrices... Rusu-chan, no son normales, lo sabes, ¿verdad?
—¡P-por favor, Bepo! ¡Son completamente normales en un pirata! —reí nerviosa
—No, Rusu-chan, no lo son
—Creí que el médico era Law, no sabía que tú también —le espeté con el ceño fruncido mientras me alejaba con la escoba
—Lo siento...
—Da igual, me voy a dormir —dejé la escoba en la pared y fui a mi habitación
Me habría encantado dormir en la cubierta, pero era inútil, estábamos sumergidos. Nos habíamos ido de la isla de las Kujas luego de aquel fatídico accidente que tuve con Law, que aún quiero olvidar, pero siempre se me ha dado mal el tema de eliminar recuerdos de mi cabeza.
Mi mirada se dirigió al brazalete casi de forma inconsciente; desde hace como cinco años que no los veo y la última vez fue por lo de Marineford, algo de vital urgencia.
