FUERZA (IEGO)

19.

Narra Riccardo.

Esa misma tarde, tras echar la mañana con Gabi y tras comer y estudiar puse rumbo a casa de Laura, quería hablar con ella y dejar claras algunas cosas, así que llegue a la casa del Gran Emperador, la tía de Laura me abrió y ella salió.

— ¿Puedes salir?.

— Eh si ¿Pasa algo?

— Quiero hablar contigo — ella asintió, entró a coger las llaves y salió — ¿Te parece si vamos al parque de la torre? — le pareció buena idea y allí fuimos a sentarnos en nuestro mítico banco.

—  Y bien, cuéntame me tienes con la curiosidad de que quieres hablar desde que hemos salido.

— Verás Laura yo...— suspiré nunca se me han dado bien estás conversaciones — Yo....a mí....— dios Di Rigo que te pasa — Bueno que si que me gustas que eso ya lo sabes.

— Ajá....

— Pero no quiero seguir con lo que acordamos de que tenías que elegirme a mí o a Gabi, es una idiotez seguir así, porque los dos ya sabemos que tienes clara tú decisión desde hace tiempo.

— Ya y mi decisión es Gabi ¿No? — ¿Eh si? ¿No? Vamos espero.

— Eso espero, si.

— Siempre has sido tú — mierda mierda mierda — Siempre, desde que llegué el primer día, tú mirada, tú genio, tú sonrisa, tú pelo, tú bordería, todo tú.

— No me digas eso Laura.

— Callate y déjame seguir — y eso hice, callarme — Eras misterioso y eso me gustaba y un cotilla también — sonrió acordándose de algo — Creo que me di cuenta que me gustabas el día que Blade hizo que os dieseis cuenta que era una imperial y gritaste mi nombre antes de que fuera — suspiro melancolica — Pero...

— Pero....— me miró obvia — Pero ese día te diste cuenta que yo no era el único que te gustaba.

— ¿Sabes porque reaccione de esa manera? — negué nunca habíamos hablado de eso — Porque me dolió haberle echo daño a Gabi, al contrario que tú siempre fue bueno conmigo y hasta ese día estando enfadado no permitió que me quedase en la calle, incluso cuando os abandone unas semanas y volví, él seguía hay, quería seguir sabiendo cosas, seguía preocupándose por mí, incluso cuando sabía que a  su mejor amigo le gustaba la misma chica que él y que yo lo sabía, él seguía.

— ¿Estás segura entonces que siempre he sido yo?

— Si porque aún sabiendo todo eso no podía sacarte de mi puta cabeza.

— Cuando me sacaste — la miré era de lógica a donde quería llegar con todo esto — Venga anda cuéntame en qué momento te diste cuenta que tenía que ser Gabi.

— El día que te desmayaste encima suya, cuando estabais medio enfadados — que momento más oportuno chica — La manera en la que te miró con preocupación como salió contigo corriendo en brazos sacando fuerzas de donde no las tenía de ver a su mejor amigo inconsciente en sus brazos y aún así después de eso quedó conmigo para hablar, se que se lo pidió Blade pero eres su hermano se tenía que haber ido contigo y aún así quiso asegurarse de que yo no iba a hacer ninguna chorrada.

— Que fue justo el día que te beso.

— Eso no significo nada en mi decisión, antes de ese beso algo en mi corazón explotó.

— ¿Te diste cuenta de lo que querías a Gabi por como se preocupo por mí?

— Me di cuenta que una persona como Gabi es todo lo que quiero, me di cuenta de que le quiero, a ti también y lo sabes — asentí — Pero si tengo que elegir...elijo a Gabi y siempre elegiré a Gabi.