13

102 22 2
                                    


En Touman no se sabe que pasó, pero algo si sabían, Kiyosama hizo algo para enfadar a tal punto a los ejecutivos de Bonten, que se estaban turnando para torturarlo de formas tan horribles que nadie podría imaginar, lo sabían porque Kiyosama no pasó el tercer día, como lo haría cuando primero lo visitaron Manjiro e Izana, luego esa misma mañana los ejecutivos de la primera división, Ryusei, Kazutora Y Baji durante seis horas completas, el trío lo golpeo; pero esos gritos de esas seis horas no fueron nada comparados cuando los hermanos Haitani entraron en la habitación, durante cuatro horas completa, las personas fuera de la habitación escucharon a Kiyosama gritar, llorar y lo que ellos pesaron era suplicar lo que más podía sin lengua, la cual le habían quitado los líderes de Tenjiku y la Touman.

Era un poco más de las ocho cuando los hermanos Haitani salieron de la habitación y casi las nueve cuando los ejecutivos de Bonten, junto con otros tres hombres, entraron nuevamente.

Fue una noche larga, los gritos de Kiyosama retumbaron en el lugar, los guardias evitaron erizarse cuando el sonido de la piel siendo desgarrada, huesos rotos, risas, gritos, maldiciones y golpes llegaron a los oídos de los guardias; los cuales suspiraron de alivio, cuando llegó la mañana junto al sonido de un disparo.

No paso mucho tiempo antes de que la puerta se abriera para dejar ver a cada uno de los ejecutivos, siendo los primeros en salir los tres hermanos Sano, todos cubiertos de sangre, al igual que los tres capitanes de la primera división y los tres invitados; obviamente al parecer el resto de los ejecutivos de Bonten no se quedaron atrás, puede que la suciedad sea menos, pero podían ver sus manos, manchadas junto a rostro, ropa y cabellos salpicados.

Limpien eso, desháganse de esa basura no quiero un cabello suelto _ dijo Takeomi a los guardias al pie de la puerta, los hombres asintieron, mientras veían a todos irse; cuando el último de los ejecutivos salió del lugar el grupo de cinco hombres entro solo para sentir la bilis subir por su garganta.

¡Mierda! Kiyosama, bastardo, ¿qué hiciste? _ dijo uno de los hombres mirando el montón casi irreconocible de persona que era el hombre.

Kiyosama, era una mierda de personas, pero nadie quería esta muerte ni siquiera para su peor enemigo.

Justo frente a los hombres, había una escena digna de un escenario gore, la sangre estaba esparcida por el suelo del lugar, incluso había huellas de zapatos, algunas, en la pared junto a las de manos, la ropa desgarrada en suelo, ahora sospechaban la razón del sonido de desgarrón, mientras veían los miembros apenas unidos al cuerpo, la quijada abierta de manera inhumana, había huesos visiblemente salidos de su lugar, y lo que más los desconcertó fue la forma en la que su pene estaba abierto, como si fuera una flor bastante florecida, no muy lejos encontraron sus testículos cortados y para finalizar el largo y grueso tubo metálico que estaba insertado profundamente en su ano; el cual estaban más que seguro que no solo metieron, de hecho podían ver la sangre pintar el tubo como si la hubieran esparcido a lo largo de él.

No sé qué hizo, pero tuvo que ser algo realmente malo, para terminar de este modo _ dijo otro hombre mirando el hoyo en su frente donde descansaba la bala.

Afortunadamente, ya murió _ dijo otro

Era un bastardo de mierda _ dijo el primer hombre _ pero no hubiera querido verlo así.

Ya dejen de hablar, y busquemos algo para limpiar este desorden, o los jefes se enojarán _ dijo otro hombre haciendo estremecer al grupo.

Luego se escuchó un quejido _ maldito hijo de puta, hasta muerto tenemos que limpiar su desorden _ dijo uno de los hombres.

.

.

.

Los ejecutivos de Bonten junto a Hanma, Chombo y Choji, estaban bastante aliviados de haber sacado a Kiyosama del camino de una manera definitiva, pero ahora debían solucionar lo que pasaría con los chicos de ahora en adelante.

Ignorando por completa su apariencia ensangrentada, el grupo estaba sentado en la sala de estar.

¿Qué haremos ahora? _ dijo Kazutora.

He separado una cita con la terapeuta que recomendó la doctora _ dijo Koko _ su primera consulta es para mañana en la tarde, aquí, si no es molestia _ dijo el peliblanco mirando a Hanma quien asintió en aprobación.

Esta tarde entrevistaremos al equipo médico que se encargara de su seguimiento _ dijo Chombo _ la idea es poner dos enfermeras que estarán siempre con ellos, por ahora dejaremos de lado a los guardaespaldas _ dijo mirando a Ran _ así que tú y Hamada tendrán que turnarse para verlos, los guardaespaldas los dejaremos para cuando ellos decidan que se sienten cómodos para salir y si quieren, ir a la escuela _ dijo, los chicos fruncieron el ceño.

Ese es otro _ dijo Hanma _ he decidido contratar tutores que los pondrán al corriente en sus estudios _ dijo

¿No es demasiado pronto? _ interrogó Shinichiro.

La doctora dijo que los mantuviéramos ocupado, no digo que sea mucho, pero que empiece con un par de horas al día, dijo que aprender un instrumento o practicar un deporte les ayudara a distraerse y no dormir tanto, las caminatas cortas _ dijo Ran _ creo que es buena idea.

En ese caso, me encargaré de buscar al mejor _ dijo Koko _ también me encargaré de hacerle saber los límites y las reglas de acuerdo con su trato _ dijo.

No había que ser un genio, para saber de lo que hablaban, todos ellos habían llegado a un acuerdo donde sobreprotegían demasiado a los adolescentes, y aunque no lo dijeran, las reglas eran simples.

Si ellos no quieren, no lo harán.

Si ellos no quieren a alguien cerca, se aleja.

Si los hacían llorar, morían.

Lo que ellos dijeran, eso se hacía.

Eran cuatro reglas simples que ellos no establecieron, pero las sabían y nadie estaba dispuesto a permitir que las rompieran, en especial la última.

El grupo estuvo de acuerdo, Hanma, Junto a Chombo y Chome se pusieron de pie.

Nos iremos, para mañana antes del mediodía, los chicos estarán aquí _ dijo Hanma, y los demás asintieron.

ソウルメイト... (ALMAS GEMELAS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora