CAPITULO 4

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LA BELLEZA EN LA IMPERFECCIÓN
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La fantasía del amor perfecto nos ha sido contada en cuentos, novelas y películas. El príncipe azul, la princesa pérdida, el amor a primera vista. Pero, ¿Qué hay de la realidad? ¿Qué hay de la verdad que se esconde detrás de la ilusión?

La verdad es que la búsqueda del amor perfecto puede ser una trampa. Nos gastamos la vida buscando a alguien que no existe. Un ser humano sin defectos, sin imperfecciones. Pero, ¿Es eso posible? ¿O es solo una quimera que nos hace perder el camino hacia la verdadera felicidad?

La respuesta es no. Todos somos imperfectos. Todos tenemos defectos, debilidades y cicatrices. Y aún así, esperamos encontrar a alguien que nos complete, que nos haga feliz.

La perfección no existe, solo la belleza en la imperfección. Ella no era perfecta, pero desde mis ojos, aún en su imperfección lo era. Me perdí tantas veces contemplándola para darme cuenta de que en su hermosa mirada había una mancha cerca del iris, una marca que la hacía única.

Sus ojeras contaban historias de noches sin dormir, de sueños y pesadillas. Las marcas en su frente eran testimonio de su desarrollo, de su lucha por ser.

Pero, ¿Qué es la perfección? ¿Es la ausencia de defectos o la presencia de belleza en medio de la imperfección? "El amor es una forma de aprender a amar lo que no es perfecto", dijo el escritor Gabriel García Márquez.

Por qué insistir entonces, en buscar la ausencia de defectos cuando nosotros mismos somos una recopilación de ellos. "El amor verdadero no busca la perfección, busca la conexión", decía el psicólogo Erich Fromm.

¿Cuántas marcas habitan en tu corazón? ¿Las cicatrices ya sanaron realmente? ¿Sientes miedo de amar? Tal vez esa sea la respuesta del por qué seguimos buscando perfección, del por qué no aceptamos la imperfección como parte del amor.

Tal vez porque tenemos miedo de ser heridos, de ser decepcionados. Solo queremos ser felices. Pero, ¿No es el amor precisamente el riesgo de ser herido? ¿Qué es la felicidad? ¿Es encontrar a alguien que nos haga sentir perfectos? O ¿es aceptar a alguien con todos sus defectos y amarlo igual?

La sociedad nos ha vendido la idea de que el amor debe ser perfecto, que debe ser romántico, apasionado y sin problemas. Pero la realidad es que el amor es imperfecto, es complicado, es trabajo. Y aún así, vale la pena. Vale la pena porque el amor verdadero no se basa en la perfección, sino en la aceptación.

Aceptar a alguien con todos sus defectos y amarlo igual. La imperfección es lo que nos hace humanos. La imperfección es lo que nos hace ser amables.

No necesitamos un príncipe azul o una princesa pérdida. Necesitamos alguien que nos ame por quiénes somos, imperfectos y todo. Ella no era perfecta, pero había belleza en su imperfección.

Encontré en ella la conexión que buscaba, la conexión que creí no existía, la conexión que por primera vez... me hacía sentir vivo.

 me hacía sentir vivo

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