𝑷𝒆𝒓𝒐... 𝑬𝒔 𝒖𝒏𝒂 𝑴𝒂𝒍𝒇𝒐𝒚 || 𝑯𝒆𝒓𝒎𝒊𝒐𝒏𝒆 𝑮𝒓𝒂𝒏𝒈𝒆𝒓 (𝒈𝒙𝒈)

Capítulo 19

—¡Demasiado cerca! ¡Samantha Malfoy acaba de salvar un tiro casi certero de Zacharias Smith! —comentó Lee Jordan, con su voz tan fuerte como podía. Llovía a cántaros durante el partido de Quidditch en Hogwarts.

Samantha ya no podía pensar con claridad. Los de Hufflepuff eran demasiado rápidos y, aunque no parecían tomarse el partido tan en serio, jugaban lo suficientemente bien.

Sam admitió que no estaba realmente concentrada al cien por ciento en el juego. Todavía podía recordar lo maravillosa que había sido su noche anterior. Recordaba lo dulce que sabía Hermione. Y no podía olvidar lo angelical que sonaban sus pequeños gemidos de placer.

—¡Y otra Bludger esquivada por Samantha! —anunció Lee con fuerza a través de los altavoces. La Bludger casi le había golpeado la cara a Sam.

"Así que están usando la misma estrategia que en su partido anterior contra Gryffindor" —pensó Sam.

Un relámpago iluminó el cielo. Seguido de un trueno.

Sam apenas podía ver a través de la lluvia. Solo alcanzaba a distinguir destellos de amarillo volando a su alrededor. Uno de los golpeadores de Slytherin, Matthew, estaba estacionado a su derecha, listo para deshacerse de las Bludgers por ella.

Era una pelea reñida contra Hufflepuff. Si tan solo el hermano de Sam pudiera atrapar la Snitch primero, todo acabaría pronto. Y finalmente podría estar con Hermione de nuevo.

Entonces Sam vio el destello de una pelota marrón.

La oscuridad absoluta vino después.

************

Los ojos de Sam comenzaron a abrirse. Frente a ella, podía ver un techo blanco. Arrugó la nariz, percibiendo un olor extraño a ungüento y hierbas a su alrededor.

De repente, dejó escapar un quejido por el dolor en su cabeza. Entonces se dio cuenta de que su cabeza estaba envuelta en vendajes.

—Sam, ¿Cómo te sientes? —Sam escuchó la dulce voz de Hermione, algo entrecortada, a su lado. Giró la cabeza hacia la izquierda y vio a su castaña, visiblemente preocupada, sujetando su mano con firmeza.

—¿Ya estoy muerta? Porque eres un ángel muy hermoso —dijo Sam, sonriendo débilmente.

Hermione soltó una pequeña risa y le dio un suave pellizco en el brazo por la broma.

—No digas tonterías.

Sam intentó incorporarse, pero el dolor que sentía en todo el cuerpo la hizo gemir. Hermione la empujó de nuevo a la cama suavemente por los hombros.

—Sam, no te levantes... solo te harás más daño.

—¿Qué pasó? —preguntó Sam, tratando de recordar todo, preguntándose por qué estaba en la enfermería. Miró a su alrededor, y vio a un par de estudiantes de Ravenclaw rodeando una cama en la otra esquina.

—Tengo buenas noticias y malas noticias —dijo Hermione a su lado.

—Está bien. Las malas primero... —respondió Sam, riendo con dificultad.

—Mmm, te golpearon fuerte con una Bludger en la cabeza... Te caíste de la escoba. Menos mal que el profesor Dumbledore estaba allí para atraparte antes de que tocaras el suelo —dijo Hermione, acariciando el rostro de Sam.

La ojigris frunció los labios.

—¿Y las buenas noticias?

—Draco atrapó la Snitch primero —añadió Hermione— así que ganaron.

Sam rió suavemente.

—Sabía que lo lograría.

************