Capítulo 20 - Conexión

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Era ya la una de la tarde mientras bajaba las escaleras para tomarme mi café matutino, cuando me encontré a mi madre hablando con Rosa en la cocina. El corazón se me aceleró cuando pensé que quizá también estaba el pequeño de los González, pero no había rastro de el.

- ¡Ari cielo! - me saludó mi madre - ¡Qué bien que ya estés despierta! Ven, siéntate a desayunar con nosotras

No pude evitar sospechar. Es verdad que mi madre era activa por la mañana, pero nunca tanto, y la mirada de Rosa me confirmó que este interés que tenían de desayunar conmigo no era que anhelaran mi compañía.

Me senté frente a ellas con cuidado, como si temiera que me fueran a leer la mente, y mi madre me plantó la taza de café delante antes de sentarse frente a mi.

Miré a las dos con una ceja enarcada y sin saber que era lo que me esperaba exactamente de esta charlita.

- Bueno - empezó Rosa - Supongo que la idea de compartir piso con Pedro no fue tan mala ¿No?

Mierda, así que íbamos por allí. Tomé un sorbo de mi café antes de contestar.

- Podría ser peor, pero estamos soportándolo

- Ya - dijo mi madre con una ceja enarcada demostrando que no se creía nada - Hemos notado que ya no os discutís tanto durante las cenas ¿Que bien no?

- Bueno, supongo que ya nos hemos empezado a acostumbrar a pasar el día juntos - respondí como pude

- ¿Así que ya volvéis a ser amigos? - preguntó Rosa

Joder, esto cada vez parecía más un interrogatorio y menos un desayuno

- Supongo - respondí

Rosa y mi madre se miraron entre ellas hasta que la segunda negó con la cabeza cruzándose de brazos

- Vale ¡esto es ridículo! - exclamó mi madre

Bien, como mínimo no era la única que había notado que esto era una locura

- Me alegra saber que no soy la única que lo piensa - respondí

- Vale cariño  - me dijo Rosa - la verdad es que queríamos hablar contigo sobre un tema, bueno mejor dicho sobre las cosas entre Pedro y tu

Volví a beber otro sorbo de café, ni de coña iba a conseguir librarme del bombardeo de preguntas. SI ya era difícil escapar las preguntas de mi madre imagínate la de dos madres unidas, era un reto prácticamente imposible.

- ¿Qué pasa? - pregunté como quien no quiere cosa

- ¿Qué pasa? - repitió mi madre - ¡La pregunta es que no pasa!

La miré con una ceja enarcada sin entender nada

- Mira Ari, te conozco bastante mejor de lo que piensas, y a Pedro igual, os hemos visto crecer juntos, y pasar de ser mejores amigos a odiaros y ahora... ahora a esto - dijo mi madre

- ¿Qué se supone que quiere decir "esto"? - pregunté confusa

- Quiere decir que entre vosotros hay una conexión diferente a la que siempre ha habido - resolvió Rosa

Ahora si que no estaba entendiendo nada ¿Qué conexión ni que pollas?

- No estoy entendiendo que me queréis decir

- Ari, sabemos que entre vosotros dos ha pasado algo, y nos referimos a un acercamiento más allá de la amistad. - dijo mi madre por fin

Me quedé petrificada, la mano me empezó a doler de tanto apretar la taza y quise que la tierra me tragara en ese mismo momento.

Siempre fuiste tú - Pedri GonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora