Past life.

Capitulo 𝑿𝑽𝑰

𝑩𝒐𝒔𝒄𝒐.

—Buenos días Bosco...—dijo tallandose sus bellos ojos.

—Buen día, Pedro pablo.

Se había vuelto costumbre despertar a su lado. Aunque si era sincero, se sentía algo extraño. Pero no quería tener malas vibras.

[...]

Un rato después, Pedro pablo ya se había arreglado, al igual que yo.

—Me tengo que ir a mi casa, pero prometo intentar visitarte seguido, ¿Okey?

—Si cariño...está bien. Te quiero, ¿Lo sabes, cierto? —asintió con una sonrisa en su rostro.

—También te quiero, bosco.

Le dí un suave y pequeño beso en sus labios que se habían vuelto adictivos.

—Te veo después.

El me abrazó, este abrazo podría sentirse algo extraño.

El se fue, así que yo también. Iba a ver a mamá, nuevamente.

No quería perder mi rutina de verla, tenía muchas cosas bellas por contarle.

El cielo estaba cubierto por nubes blancas, una ligera brisa recorría por todo el lugar, provancando que las hojas se movieran de un lado a otro. 

De un momento a otro ya había llegado al panteón. Me adentré poco a poco, mientras caminaba lentamente entre las tumbas. Claro que traía un ramo, eso jamás podría faltar. Ahora le traía sus flores favoritas, que eran los girasoles.

Al llegar a su lápida suspire, me arrodillé, mientras colocaba las flores cuidadosamente.

—Hola, mamá...—susurre, mi voz sonaba como un murmullo —No hay día en que no te extrañe.

Pase mi mano sobre su nombre grabado en la lápida. Era algo hermoso venir a hablar con ella, apesar que no respondiera, o me diera algún consejo, al menos sabía que ella me estaba escuchando. Aveces solía soñar con ella y seguir escuchando "Vuela alto y encontrar tus más grandes sueños"

—He encontrado a mi persona...—inseguro continue hablando —Se llama Pedro pablo, es el ser más bello que existe en esta tierra mamá...es un amor de persona, por supuesto que te había contado de el, pero ahora esto es diferente. Nos hemos dado nuestro primer beso, ha cumplido mi sueño de llevarme a un parque de diversiones, hemos bailado bachata juntos, hemos creado momentos únicos, que nunca van a cambiar.

Me quedé en silencio, intentando controlar mis pensamientos.

—Hemos compartido cada cosa, y cada vez que pasa siento algo en mi pecho, el despierta algo en mí, algo que no sabía que existía. Amarías a Pedro pablo, el me devolvió mi felicidad mamá...

Suspire sintiendo el peso de mis emociones.

—También he querido hablarte de otra cosa, sobre papá...la relación entre el y yo cada vez esta más rota que nada, mamá. No se que hacer para intentar cambiar la imagén que tiene de mí, piensa que soy un bueno para nada, pero se que no es así, he cambiado, quite todo lo que me lastimaba, me desintoxique, y aún así nada le importo. Pero esto lo hice por mí, quería mejor y quiero seguir mejorando cada día, no importa cuantas veces me caíga, quiero que sepan que, si es dificil o no, no me rendire. No puedo hacerlo, se que no será nada facil, pero cada esfuerzo llega a tener su recompensa.

El viento sopló moviendo cada árbol que había, sabía que ella estaba escuchandome.

—Se que no puedes responderme, pero eres mi mamá, mereces saber lo que ha estado pasando durante estas ultimas semanas, quiero compartir cada momento de felicidad contigo, eres esa luz que me ha guíado toda mi vida.