𝑩𝒐𝒔𝒄𝒐.
Esta semana parecía ser muy extensa. Había estado desintoxicandome, no era nada facil para mi hacerlo. Tener que dejar cada sustancia, era algo complicado, aveces solía ganarme el desespero de tomar un cigarrillo o algo mucho más fuerte.
Tenía mis ojos cerrados en estos momentos, intentando controlar, me costaba respirar un poco.
Pedro pablo se encontraba conmigo mirandome fijamente.
—Tranquilo Bosco, tienes que dejar ir eso.
Mire esas pequeñas bolsas blancas como si de algo doloroso se trataran. Entonces le di esas bolsas a Pedro pablo.
—Creeme que esto es lo correcto, cariño. Todo estará bien, poco a poco dejaras todo esto. Ire a tirar esto, ahora vuelvo.
Controle mi respiración, pero me era imposible. Me costaba tanto dejar ir todo esto, pero tenía que hacerlo, mi salud tenía que mejorar.
Pedro pablo regreso a el cuarto, mientras se sentaba a mi lado y tomaba mi mano con fuerza.
—Se que aún no termina esto, pero estoy aquí para ayudarte. Suelen ser dificiles las desintoxicaciones, pero no dudes que estare para sostenerte en el momento que pienses que vas a caer —dijo con una sonrisa.
—Gracias, pedro pablo.
Me acerque a el para poner mi cabeza sobre su pecho, mientras acariciaba mi pelo.
Aún tenía demasiada duda, no sabía si estabamos intentando algo o simplemente seguíamos siendo una amistad, eso era algo demasiado confuso.
Pedro pablo intentaba sacarme algo de platica, pero simplemente no podía decir algo, mi mente estaba tan nublada.
Y no me gustaba sentir esto, nisiquiera ignorarlo.
—¿Quieres que me vaya? —negué rapidamente, acercandome más a el.
Apesar de ignorarlo lo necesitaba a mi lado, quería que estuviera aquí conmigo para saber que si podía con toda esta porquería.
No tenía hambre, ni ganas de nada. Simplemente quería dormir.
Estaba acostado en mi cama, junto con Pedro pablo. Le había prestado ropa, para que pudiera dormir más cómodo.
—¿Cómo te sientes? —preguntó lentamente.
—Bien
El no dijo más, sabia muy bien que mentía que nada de esto era real. Pero realmente esto no era nada bello de sentir.
¿Cómo dejaría todo esto?
Me quedé dormido en el pecho de pedro pablo, mientras el acariciaba mi cabello.
[...]
Me desperté rapidamente al sentir tantas ganas de vomitar. Pedro pablo llegó rapidamente a mí, y empezo a agarrar algo de rollo. No sé ni cuantas veces había vomitado, pero sentía mi cuerpo demasiado cansado.
—Parate con cuidado bos—. me agarró lentamente—, ven, vamos a dormir nuevamente. Te prometo que vamos a mejorar juntos. ¿Si?
Asentí algo cansado. Antes de eso lave mis dientes nuevamente.
[...]
Estas semanas habían sido muy cansadas. Solía vomitar seguido, mi cuerpo temblaba cómo si sintiera demasiado frio. Mi piel ardía como nunca, mis ojeras se habían vuelto más moradas, incluso mi piel estaba más palida qie de costumbre.
Pero, pedro pablo no me dejo ni un segundo solo. Se ha quedado todas estas semanas conmigo, mientras intento mejorar, hemos pasado algunos malos momentos, y buenos tambien.
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Past life.
Ficção Adolescente"El recuerdo de una vida pasada, pertenece totalmente a tu alma."