Soy mejor que Él | Kylia (Fanfic)

Capitulo 4

Kylie y Malia se acomodaron en el sofá, cada una con su taza de chocolate caliente,  mientras Paula se unía a ellas para charlar un rato.

-¿Qué tal tu clase de pintura, Malia?- preguntó Paula, con una sonrisa cálida.

-Está bien, mamá.  Es un poco...  estresante.  Tengo que presentar un proyecto la semana que viene,  pero me gusta mucho lo que estoy haciendo- respondió Malia.

-Eso me alegra, hija.  Tu papá y yo siempre hemos admirado tu pasión por el arte- dijo Paula.

Kylie asintió, con una sonrisa tímida.  -Malia es una artista increíble.  Sus pinturas y sus cuadros son increíbles, Paula-

-¿Te gustaría quedarte a cenar con nosotros, Kylie?-  preguntó Paula, con una mirada amable.  -Puedes comer pizza con nosotros.  A Malia le encanta la pizza-

-No, gracias, Paula- dijo Kylie, con un tono un poco inseguro. -Mejor llamo a mi mamá para avisarle que me quedaré con Malia-

Malia la miró con ternura. -No te preocupes, Kylie.  A mi mamá le encanta que vengas a visitarla-

Kylie sonrió,  aliviada.  Se levantó del sofá y se dirigió a la habitación de Malia.  En el camino,  Malia le tomó la mano, sintiendo la suavidad de su piel.

-Kylie- dijo Malia,  con un tono suave, -todo va a estar bien-

-Lo sé-  respondió Kylie,  con un suspiro.  -Pero ahora mismo,  no me siento bien-

Malia se acosto en la cama, y Kylie se acurrucó a su lado.  En ese momento,  Malia sintió un torrente de cariño por Kylie.

-Te quiero mucho, K- dijo Malia,  con una sonrisa.

-Yo también te quiero,  Mali- respondió Kylie,  con los ojos llenos de lágrimas.  -No sé qué haría sin ti-

-¿Por qué no le cuentas a tu mamá lo que pasó?- preguntó Malia, con un tono tranquilo.

Kylie se encogió,  sintiendo un nudo en la garganta. -No quiero preocuparla.  Ella ya ha pasado por mucho-

-Yo sé que es difícil,  Kylie.  Pero tienes que hablar con ella.  Necesitas su apoyo- dijo Malia,  con voz suave.

-Tienes razón-  dijo Kylie,  con un tono cansado.

Kylie tomó su teléfono y llamó a su madre.  Le explicó la situación,  con voz  entrecortada.  Su madre le dijo que la amaba y que estaba con ella en todo momento.

Cuando Kylie colgó,  Malia la envolvió en un abrazo. -Ya está- dijo Malia,  con un tono tranquilo. -Ahora puedes relajarte-

Kylie se acomodó en la cama,  sintiendo el calor del cuerpo de Malia.

-Malia,  ¿puedo pedirte un favor?- preguntó Kylie,  con un tono tímido.

-¿Cuál?- respondió Malia,  con una sonrisa.

-Me gustaría pedir helado por delivery.  Y  ver películas de Disney- dijo Kylie.

Malia se rio. -¿Te parece buena idea?  ¡Me encanta la idea!-

Malia llamó a un servicio de delivery.  En un par de minutos,  ya tenían un tazón gigante de helado y varias películas de comedia a su disposición.

-Me encanta estar contigo-  dijo Kylie,  con una sonrisa. -Eres la mejor amiga que alguien podría tener-

-Y tú eres la mejor amiga que alguien podría tener- respondió Malia,  con una sonrisa. -Estoy feliz de que estés aquí-

Malia se acurrucó junto a Kylie.  Kylie se apoyó en el hombro de Malia, sintiendo su calor.

Kylie y Malia pasaron la noche juntas,  viendo películas y hablando sobre la vida.  Malia podía sentir el amor que Kylie sentía por ella,  un amor que era tan intenso y tan puro que la llenaba de felicidad. Se acurrucaron bajo las sábanas,  el aroma del helado y el calor de sus cuerpos creando una atmósfera de paz y seguridad.  Mientras los créditos de la película comenzaban a aparecer, Kylie se volvió hacia Malia,  su rostro iluminado por la pantalla.

-Malia..- susurró Kylie,  con un tono de voz que transmitía una mezcla de cariño y vulnerabilidad.  -Me siento tan...  perdida... yo amo a Ethan... osea lo quiero, me duele lo que hizo y su comportamiento-

Malia la miró,  su mirada llena de comprensión y amor. -Es normal,  Kylie.  Estás pasando por un momento difícil,  y tienes derecho a sentirte como te sientes-

-Pero...  ¿qué voy a hacer?-  preguntó Kylie,  sus ojos llenos de lágrimas.  -Siento que mi mundo se ha desmoronado-

-Kylie, Te prometo que voy a ayudarte a reconstruir tu mundo si se viene abajo- dijo Malia,  con una voz firme y llena de seguridad. -Tienes a tus amigos,  a tu familia,  y a mí.  Tenemos que aprender a confiar en ti misma,  Kylie.  A veces,  el amor no siempre es lo que esperamos que sea.  Pero eso no significa que no merezcamos ser felices-

-Gracias,  Malia-  dijo Kylie,  con un tono de voz lleno de gratitud. -Realmente no sé qué haría sin ti-

Malia acarició el cabello de Kylie,  sintiendo el calor de su cuerpo junto al suyo. -Yo tampoco sé qué haría sin ti-  susurró,  con un tono que reflejaba su amor profundo por su mejor amiga.

Con el corazón lleno de cariño y tranquilidad, Kylie se acurrucó más en los brazos de Malia,  sintiendo el calor de su cuerpo y el ritmo constante de su respiración.  En ese momento,  Kylie se dio cuenta de que Malia era mucho más que su mejor amiga:  era su refugio,  su confidente,  su fuente de fuerza y su amor verdadero.

La noche se convirtió en un cálido abrazo de comprensión,  un remanso de paz en medio del caos de sus vidas.  Malia y Kylie,  unidas por un amor que iba más allá de las palabras,  se dejaron llevar por el sueño,  encontrando consuelo y esperanza en el calor de su abrazo.

Kylie y Malia durmieron juntas y  abrazadas,  en la cama de Malia.  La tranquilidad de la noche y la fuerza de su amistad,  como un faro en la oscuridad,  por fin luego de un dia lleno de emociones tenia un momento de paz en medio de la tormenta las dos juntas, como siempre, ellas siempre se apoyaban mutuamente, desde pequeñas, desde el día en el que se conocieron y conectaron.

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