Pov Malia:La habitación se inundó de un silencio suave y cálido. El único sonido que se escuchaba era nuestra respiración entrecortada y la luz de la luna que se filtraba por la ventana. Kylie se había quedado dormida sobre mi pecho, con una pequeña sonrisa en sus labios.
No podía dejar de mirarla. Era tan hermosa. Su pelo lacio se esparcían sobre la almohada, y sus ojos cerrados me transmitieron un sentimiento de tranquilidad y felicidad.
La noche se había convertido en un torbellino de emociones. Habíamos charlado sobre nuestras vidas, sobre nuestras esperanzas y nuestros miedos. Y en medio de esa conversación profunda, había surgido una atracción irresistible que nos había llevado a besarnos de nuevo.
-Kylie- le susurré al oído, con un tono de voz suave y cariñoso. -Buenos días dormilona-
Ella abrió sus ojos color miel y me sonrió con una mirada llena de ternura. -Buenos días Maliki-
Nos quedamos abrazadas durante un largo rato, sintiendo el calor de nuestros cuerpos y el latir rápido de nuestros corazones.
El sol comenzó a asomarse por el horizonte, pintando el cielo de tonos rosados y anaranjados. Se nos había hecho tarde.
-Deberíamos bajar a desayunar- le dije a Kylie, con un tono de voz ligero.
Kylie asintió con un tono de voz tranquilo. -Sí, tengo hambre-
Al bajar las escaleras, estaba todo en silencio, y Kylie se dispuso a hacer café. La casa estaba vacía, mis padres se habían ido a pasar el fin de semana con mis abuelos por trabajo.
-Buenos días, otra vez Kylie- le dije a Kylie, con un tono de voz tranquilo. -¿Cómo estás?-
-Genial Mali, mejor que nunca- respondió, con una sonrisa que se extendía por su rostro. -¿Quieres que haga el desayuno?- Asentí y ella se puso a cocinar.
Kylie rapidamente preparo un desayuno sencillo pero delicioso: pan tostado, huevos revueltos y café.
-Sientate a desayunar- le dije, con una sonrisa.
Mientras desayunábamos, charlábamos sobre nuestras vidas y nuestros planes para el fin de semana. Kylie se mostraba amable y reservada, y yo no podía dejar de mirarla con amor.
De repente, Kylie se acercó a mí y me besó suavemente en la mejilla.
-Me encantas- me susurró al oído.
-Tú a mi tambien- le respondí, con una sonrisa.
En ese momento, la tensión en el aire se intensificó. Los dos sentíamos una atracción irresistible la una por la otra. Kylie se acercó a mí y me tomó la mano. Sus dedos entrelazados con los míos, me miró a los ojos, y la intensidad de su mirada me dejó sin palabras. Su sonrisa era una mezcla de nervios y deseo, y no podía evitar devolverle la mirada con la misma intensidad.
-Malia…- susurró Kylie, con un tono de voz que reflejaba la intensidad de sus sentimientos. -Quiero besarte, ¿puedo?-
Me incliné hacia ella, atraída por su mirada y por el deseo que se desbordaba en sus ojos. Nuestras bocas se encontraron en un beso lleno de pasión y de dulzura.
Kylie me tomó la mano con más fuerza, tirando de mí hacia ella. Yo la seguí con gusto, perdiendo la noción del tiempo y del espacio.
El beso se intensificó, y yo la atraje hacia mí, levantándola con cuidado y poniéndola sobre la mesada de la cocina. Kylie rodeó mi cintura con sus brazos, y me besó con más pasión aún.
Me perdí en la intensidad de su beso, en la calidez de su cuerpo y en la fuerza de su amor.
Pero de repente, la magia del momento se rompió con el sonido de la puerta de entrada. Nos separamos de golpe, con los rostro rojizos y el corazón latiendo con fuerza.
Afortunadamente, la puerta se abrió lentamente, y la voz de mi madre se oyó con un tono tranquilo: -Buenos días cariño, ¿Malia? Hemos decidido volver con tu padre un poco antes de lo que decidimos, nos hemos olvidado algunos papeles importantes, ¿Estás bien?-
-Sí, mamá- le respondí, con un tono de voz tranquilo. -Estoy perfecta-
Kylie se apartó de la mesada y se quedó de pie, con un tono de voz tranquilo. -Hola, Paula- dijo, con un tono de voz tranquilo.
-Hola Kylie, mi niña- respondió mi madre, con una sonrisa. -¿Estás bien?-
-Sí si, mejor que nunca- respondió Kylie, con un tono de voz tranquilo.
-Qué bien. Subo a buscar los papeles arriba y luego ya nos vamos, tu padre espera en el auto. Cuidense, las dos-
-De acuerdo, mamá. Disfruten del viaje- le respondí, con un tono de voz tranquilo.
Nos quedamos en silencio por unos segundos, sintiendo el eco de la emoción del momento y la incertidumbre de lo que acaba de suceder.
-Bueno, quiero terminar de desayunar- dijo Kylie, con un tono de voz tranquilo.
Asentí con un tono de voz tranquilo, y nos sentamos juntas en la mesa, sintiendo la calidez de nuestro amor y la incertidumbre de nuestro nuevo camino.
El desayuno de repente se volvió un poco incómodo. Las palabras se nos atragantaron, y la tranquilidad de la mañana se tornó en un silencio lleno de expectativa.
-¿Te gustó el beso?- le pregunté a Kylie, con un tono de voz suave y un poco nervioso.
Kylie sonrojó y bajó la mirada. -Mucho.- respondió, con un tono de voz tranquilo. -En realidad, me encantó. Me gusta estar contigo, Malia-
-A mí igual- le dije, con una sonrisa que se extendía por mi rostro. -Y creo que deberíamos seguir explorando esto que sentimos, juntas-
La mano de Kylie se acercó a la mía sobre la mesa, y me tomó la mano con un gesto delicado y cariñoso.
-Me encantaría- respondió, con un tono de voz tranquilo. -Me encanta estar contigo, Malia. Y me encantaría ser mucho más que tu amiga-
En ese momento, la incertidumbre de la mañana se disipó, reemplazadas por una sensación de calma y de esperanza. La magia de la noche se había transformado en un nuevo comienzo, un comienzo lleno de amor y de posibilidades.
La casa seguía vacía, y solo nosotras dos compartíamos ese espacio intimo y lleno de felicidad. La luz del sol se colaba por la ventana, pintando el ambiente de una calidez que se correspondía con el calor que sentíamos en nuestros corazones.
Sabíamos que teníamos un largo camino por recorrer, pero no podíamos negar la fuerza de nuestros sentimientos. Habíamos comenzado un nuevo capítulo en nuestra historia, un capítulo lleno de promesas y de sueños.
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Soy mejor que Él | Kylia (Fanfic)
RomanceKylie en una relación donde no la tratan como quiere, y Malia, decidida a demostrar a Kylie que ella puede ser una mejor novia que su actual novio. Malia y Kylie, dos mejores amigas desde pequeñas, comparten un secreto que ha crecido en silencio du...