Una vez se alinearon los planetas para abrir la brecha entre los dos mundos, con una esfera caída del cielo, Oh MinGyu se encuentra con la persona menos oportuna del todo el multiverso: un amigo y un primer amor.
Para su suerte, fue Choi Soobin qui...
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¡MinGyu estaba completamente harta de todo esto! Aún no comprendía porque seguían cruzando de mundo en mundo, estaba tan cansada como todos tratando de volver a su realidad, no le pasó eso inclusive cuando llegó al mundo de Soobin. Él susodicho miró el cielo estrellado, en este lugar era de noche y parecía estar todo muy tranquilo, a diferencia de los otros mundos que había visto. La suave brisa golpeaba su rostro trayendo calma con ello, a este punto se preguntaba si lograrían volver; de todas formas, ellos contaban con la blue hour y sin ella, Jeongwon no podría hacer nada al respecto.
Pensó por un momento cuando estuvo atrapado en aquel hospital, pasó una semana allí pero las cosas en el mundo de MinGyu parecían estar iguales, como si no hubiera pasado mucho tiempo allí; no obstante no sabía a ciencia cierta si en los otros universos el tiempo fluía de la misma manera que en otros, podían quedarse atrapados en este lugar hasta una década pero cuando volvieran, para ellos solo podrían haber transcurrido 10 minutos. Bogum cayó sobre la arena realmente rendido, estaba agotado de andar cruzando portales, cada vez uno peor que el anterior.
—Maldita sea, no se cuanto tiempo hemos perdido, estoy harto de tener que quebrarme la cabeza para hallar mi propio mundo —sostuvo la esfera con firmeza y las ganas de arrojarla sobre ese desierto le estaban tentando.
—Algo no debe estar bien, si seguimos intentando-...
—¿¡Intentar qué!? —lo interrumpió Taehyun, sabía que Goseok solo quería ser optimista, pero todos estaban agotados—. Hemos cruzado muchos mundos, pero hasta ahora no hemos hallado el correcto.
MinGyu remojó sus labios sabiendo que el castaño tenía toda la razón, suspiró un poco aclarando los pensamientos en su cabeza, pero escuchar a sus acompañantes discutir sobre la situación tan desfavorable en la que estaban, no la ayudaba en nada. Talló sus párpados, luego su cara y al final peinó un poco su cabello. ¡Necesitaba sacar su frustración! Beomgyu se sentó al lado de Bogum al verlo muy derrotado, y de uno de los bolsillos de su pantalón sacó la otra barra de chocolate que aún le quedaba.
—Me ayuda a concentrarme cuando estudio —farfulló extendiendole el dulce.
Bogum lo miró, aceptando el gesto considerado de él, para empezar a quitar el envoltorio y comer aquel chocolate rico en dulce.
—Gracias —contestó educadamente, volviendo a intentar una vez más.
Quizás necesitaba subir su azúcar para poder llevar acabo esto, de mejor manera. Miró de nuevo la pantalla virtual para trazar nuevas coordenadas, pero en su mente no aparecía ni la más remota idea de cuales poner. Goseok ya le había ayudado bastante, asi que no quería molestarlo una vez, permitiendo que se tomara sus cinco minutos al aire libre, bajo la fresca noche. En realidad, todos parecían disfrutar eso, menos él.
—¿Esto estaba allí antes? —preguntó Beomgyu señalando un icono en particular.
Bogum pestañeó analizando con cuidado lo que la persona a su lado le señalaba, realmente eso no estaba allí antes.