Fantasías

Fantasía 45: Sex in the gym parte 2🔥

Mi amiga Dina me recomendó su gimnasio, estaba pasando una ruptura y quería un cambio, me corté el pelo, empecé a salir de fiesta y empecé también a ir al gimnasio.

Era la primera vez que iba al gimnasio y estaba algo nerviosa, al llegar me encuentro con Dina que al verme me abrazó.

- Te va a gustar esto del gimnasio, aquí puedes conocer a tu próxima pareja, o quién sabe tener un revolcón con alguien de aquí-dijo Dina algo divertida.

Me reí al recordar como Dina me contó que había tenido sexo salvaje con Matías, que era su nuevo entrenador, cuando me lo contó casi me atraganté con la copa de vino, es verdad que Dina es guapísima y con un cuerpo de infarto, ay dios mío, me estoy pillando por ella.

- No creo que vaya a pasar lo del revolcón aquí, en ti si que pasaría porque eres una loca salvaje que tiene sexo en cualquier lugar-dije divertida.

- Cierto, pero quién sabe, contigo puede pasar, solo tienes que dejarte llevar, ahora vamos a entrenar antes de que me excite, jeje-dijo Dina riéndose.

¿¡Excitarse?!, si la que estaba excitada era yo, pero lo oculté, para distraerme empecé a hacer pesas y a saltar a la comba, empecé con estiramientos leves para no sobrecargarme tanto, la verdad que esto del gimnasio me estaba gustando mucho, pero todavía me sentía excitada, al mirarme las mallas vi que estaban algo oscuras dela excitación, al alzar la mirada veo a Dina mirándome juguetonamente.

- ¿Vas a tocarte?-preguntó Dina curiosa.

Me había pillado y no sabía que hacer, me sentía algo nerviosa y excitada.

- Sabes que no-dije.

- O vamos, necesitas tocarte para liberar el placer que se te acumula-dijo Dina acercándose a mí.

De repente siento sus labios posarse sobre los míos, estaba sorprendida, ¿y esas confianzas?.

- Tranquila, soy bisexual y he tenido experiencia con otras mujeres-dijo Dina.

- Eso no lo sabía-dije curiosa.

- Mi primera vez con una chica fue con un trío que hice con Matías, y la verdad es que eres muy atractiva y me gustaría acostarme contigo-dijo Dina.

Cogió mi mano y me llevó a los baños, cerró la puerta con pestillo y empezamos a besarnos lujuriosamente, siento los dedos de Dina apartar mi ropa interior y tocarme el clítoris, gemí en su boca y yo empecé a quitarle la parte de arriba y tocar sus pechos, mis dedos tocaron sus pezones, mi lengua mordió sus pezones y Dina gimió, empezamos a desnudarnos y empecé a tocarla el clítoris, al chocar mi mi espalda con la pared empezó a caer agua de la ducha, nos reímos y volvimos a besarnos, Dina empezó a hacerme el mejor oral que me habían hecho en la vida y me corrí en su boca, le devolví el favor yo también y empecé a lamer su intimidad, se sentía tan húmeda y tan deliciosa, luego nos tumbamos y su clítoris rozó el mío, ese roce era muy excitante y empezamos a movernos muy rápido sin parar de gemir, el orgasmo que tuvimos fue muy placentero y precioso.

- Me ha gustado-susurré en su boca.

- Me gustaría follar contigo más veces-dijo Dina.

- Me gustaría mucho-dije.

Después de ese día quedábamos para follar en su casa y en la mía, y también cuando coincidíamos en el gimnasio nos metíamos en los baños para follar.