Leah salió del salón privada y se apoyó contra la pared del pasillo, todavía sintiendo la adrenalina correr por sus venas. Estaba claro que la confrontación con Nicholas no había terminado; esto era solo el comienzo. Respiró hondo, cerrando los ojos por un momento, tratando de aclarar sus pensamientos.
De repente, sintió una presencia a su lado. Abrió los ojos y ahí estaba Cooper, casual como siempre, apoyado contra la pared a unos metros de ella. Vestía un traje oscuro, pero con la corbata floja y una actitud relajada que contrastaba con el caos que Leah acababa de vivir.
"Vaya, vaya, si no es la futura reina del pop en persona," comentó Cooper, con una sonrisa ladeada que irradiaba ese encanto despreocupado que siempre lo rodeaba.
Leah no pudo evitar una ligera sonrisa. Cooper siempre tenía una habilidad para hacerla sentir un poco más ligera, incluso en los peores momentos. "¿Estabas espiando?" preguntó, aunque lo hizo más en tono de broma que de reproche.
Él se encogió de hombros, su sonrisa creciendo. "No necesitaba espiar. Nicholas no es exactamente el más discreto cuando se enfada. El tipo explota como una bomba cada vez que algo no va según su plan." Cooper la miró de reojo, con una chispa traviesa en los ojos. "¿Te dijo que estabas cometiendo un gran error? ¿O ya superamos esa parte del drama?"
Leah soltó una risa amarga, sin poder evitarlo. "Sí, exactamente eso me dijo. Y sabes qué, quizás tenga razón. Pero ya no me importa."
Cooper se apartó de la pared y caminó hacia ella, su expresión volviéndose más seria. "Tienes razón en no importar. Leah, este es tu momento. No es de Nicholas, no es de nadie más. Él puede ser un genio en su campo, pero no puede decirte cómo ser tú misma."
Leah lo miró, sorprendida por lo directo que estaba siendo. "¿Crees que estoy haciendo lo correcto?" preguntó, necesitaba escuchar otra opinión, algo que la anclara.
Cooper la miró a los ojos por un largo segundo antes de responder. "Lo que sé es que si sigues a Nicholas ciegamente, te vas a convertir en otra marioneta más de la industria. Y tú no eres una marioneta, Leah. Tienes esa chispa... pero te falta soltarte."
Leah arqueó una ceja. "¿Soltarme? ¿Qué quieres decir con eso?"
Cooper sonrió de nuevo, esta vez con un toque más pícaro. "Digo que estás contenida. Nicholas te ha metido en esta jaula de perfección, pero yo he visto destellos de quién realmente eres. Y créeme, el mundo está listo para esa versión de Leah, no para el ángel que Nicholas quiere que seas."
Leah sintió que sus palabras la alcanzaban en lo más profundo. Él tenía razón. Todo este tiempo había estado jugando seguro, intentando cumplir con las expectativas que Nicholas y la industria tenían de ella. Pero algo en su interior había estado luchando por salir, algo más audaz, más atrevido.
Cooper se acercó un poco más, bajando la voz. "¿Sabes qué deberías hacer?"
Leah lo miró con curiosidad, inclinándose ligeramente hacia él. "¿Qué cosa?"
"Deberías tomar el control de todo. La música, tu imagen, tu vida. Y la mejor forma de hacerlo es dando un golpe en la mesa. Haz algo que nadie espere. Provoca. Rompe las reglas." Cooper la observaba intensamente, como si estuviera trazando un plan en su mente. "Haz que la gente hable de ti, no solo como la cantante en ascenso, sino como la estrella que se apodera del escenario."
Leah lo miró, intrigada pero también dudosa. "Eso suena... arriesgado."
"Lo es," respondió Cooper con una sonrisa. "Pero también es emocionante, ¿no? Si quieres que te vean como una estrella, tienes que brillar más fuerte que cualquier otro."
Leah bajó la mirada, pensando en lo que acababa de decir. Sabía que Cooper tenía razón. Desde que empezó, había estado siguiendo el plan de Nicholas, confiando en que él sabía lo que era mejor para su carrera. Pero ahora todo parecía confuso, como si su vida hubiera estado guiada por las decisiones de otros.
"Y si Nicholas no está de acuerdo...," empezó Leah, pero Cooper la interrumpió.
"Si no está de acuerdo, es porque tiene miedo. Tiene miedo de que te des cuenta de que no lo necesitas tanto como él necesita tener el control. Y cuando vea que puedes triunfar sin él, va a perder los estribos." Cooper rió suavemente. "Y eso, querida Leah, va a ser divertido de ver."
Leah se sorprendió ante la franqueza de Cooper, pero también lo encontró reconfortante. "¿Por qué me ayudas? Tú eres su mejor amigo."
Cooper la miró fijamente, sus ojos verdes brillando bajo la luz tenue del pasillo. "Porque tú tienes algo que ni siquiera Nicholas ha entendido aún. Y sería una pena verte desperdiciar todo tu potencial por seguir el camino de alguien más. Además..." Cooper hizo una pausa, bajando un poco más la voz, casi conspirador. "Si le sacudes el mundo un poco a Nicholas, no me molestaría en absoluto."
Leah soltó una carcajada, pero había algo en los ojos de Cooper que la hacía sentir que no estaba bromeando del todo. Sabía que la relación entre Nicholas y Cooper era complicada, una mezcla de amistad y competencia constante. Y quizás, solo quizás, Cooper estaba disfrutando el hecho de que ella podría ser la que encendiera la chispa que hiciera explotar todo.
"Bien," dijo Leah, finalmente decidiendo. "Lo haré. Voy a tomar las riendas."
Cooper sonrió, su expresión cómplice y encantadora. "Esa es la actitud que necesitaba escuchar."
Antes de que Leah pudiera decir algo más, Nicholas apareció de repente en el pasillo, claramente molesto al verlos juntos. "¿Qué demonios está pasando aquí?" preguntó, su voz cargada de frustración.
Leah lo miró con firmeza, su corazón latiendo más rápido pero sabiendo que esta vez no iba a retroceder. "Estamos hablando de mi carrera, Nicholas," dijo, su voz más fuerte de lo que esperaba. "Y de cómo voy a hacer las cosas a mi manera de ahora en adelante."
Nicholas la miró incrédulo, pero antes de que pudiera responder, Cooper intervino con una sonrisa burlona. "Relájate, amigo. No puedes controlarlo todo, ni a todos."
La tensión en el aire era palpable, con Nicholas mirando fijamente a Cooper como si estuviera a punto de explotar. "No te metas en esto, Cooper," siseó Nicholas, su voz baja pero llena de ira. "Este asunto es entre Leah y yo."
"¿Seguro?" replicó Cooper, dando un paso hacia Nicholas, pero manteniendo su tono casual. "Porque parece que Leah ya no quiere que sea solo entre ustedes dos."
Leah observaba la escena con una mezcla de temor y emoción. La presión entre ambos hombres era evidente, y aunque Cooper lo tomaba a la ligera, Nicholas claramente estaba perdiendo el control. Pero, por primera vez, Leah no estaba asustada. En lugar de eso, sentía que algo dentro de ella estaba despertando.
Nicholas dio un paso hacia Leah, sus ojos oscuros y duros. "¿De verdad piensas que puedes hacer esto sin mí?" Su tono era casi una súplica disfrazada de desafío.
Leah lo miró fijamente, tomando aire. "Voy a hacerlo, Nicholas. Y sí, puedo hacerlo sin ti."
Nicholas pareció quedar congelado por un instante, como si no pudiera creer lo que estaba escuchando. Luego, con un gesto de frustración, giró sobre sus talones y salió del pasillo sin decir una palabra más.
Leah se quedó en silencio, observando cómo Nicholas desaparecía. Pero cuando volvió a mirar a Cooper, él simplemente sonrió y murmuró: "Esto va a ponerse interesante."
![](https://img.wattpad.com/cover/379512595-288-k255316.jpg)
YOU ARE READING
𝐓𝐡𝐞 𝐏𝐞𝐫𝐟𝐞𝐜𝐭 𝐒𝐢𝐧𝐧𝐞𝐫'𝐬
Fanfiction╔═══════════════╗ +21 FANFINC ╚═══════════════╝ Nicholas Alexander Chavez es la definición de perfección en el mundo del espectáculo: carismático, talentoso y con un rostro que esculpió el mismo diablo. Pero detrás de esa fachada impecable, hay u...