Mordí el interior de mi mejilla, Natalie me sonríe antes de aplicarme labial rojo en mis labios
—Te ves preciosa, a tu novio se le caerá la baba apenas verte
—¿Y si no quiere estar conmigo?
—Pues si no quiere estar contigo lo mandas a la mierda.
—No es tan fácil
—Ahora muestra esa sonrisa preciosa que tienes y ve con tu novio que seguro debe estar esperándote
Asiento con la cabeza, hoy era el cumpleaños de Asher por lo que sus padres decidieron hacerle una fiesta. Habían chicos del equipo incluyendo a mi hermano, casi la mayoría del instituto por lo que la casa mañana sería un caos.
Estaba segura de que entregarme a Asher. Debajo del vestido llevaba el conjunto de lencería que me había regalado Natalie la ocasión anterior.
Pego un brinco cuando salgo del baño y lo encuentro recargado en la pared con su sonrisa encantadora.
—Hola sirenita te estaba buscando
—Estaba ayudando a Natalie ya sabes urgencias de chicas
El asiente con la cabeza, llevaba puesta una camiseta negra y un pantalón negro.
—Te he traído esto
Sonrió cuando estira un plato con rollos de jamón y queso. Toma uno llevándolo a mi boca, muerdo sus dedos a propósito
—Gracias —planto un beso sobre su mejilla tomando el plato entre mis manos para llevarme otro rollo a los labios y después darle a el —
Desliza sus grandes manos por mi cintura atrayendome hacia el, rodeo su cuello con mis brazos. Nuestras lenguas se enredan, sostengo con fuerza el plato. Cuando nos separamos mi respiración está hecha un desastre
—¿Que pasa?
—No te he dicho feliz cumpleaños
—No es necesario, ya me has felicitado
Mis mejillas se enrojecen, Asher sonríe.
—¿Ya te he felicitado?
—Si, en la mañana
—Solo nos bañamos juntos
—Y tuve una grandiosa vista
Puse los ojos en blanco
—Eres un pervertido
—No escucho que te quejes de eso —me da un azote en el trasero—
—Asher...
—Dime
—¿Podemos ir a tu habitación?
—¿Que vas a hacer pequeña perversa?
—Nada, solo quiero estar a solas un rato con el cumpleañero ¿O no se puede?
—Tu puedes hacer lo que quieras conmigo
Caminamos hacia su habitación, al ingresar cierro la puerta con seguro dispuesta a seguir mi plan
—¿Que vas a hacer?
Dejo los nervios a un lado caminando hacia el, se sorprende cuando rodeo su cintura con mis piernas. Tomo un rollo de jamón y queso
—Abre la boca —el hace lo que le ordeno— muy bien
Unos minutos después tomo el último rollo de jamón y queso que queda en el plato pero lo hago caer en el escote de mi vestido a propósito
—Upss, se me ha resbalado ¿Podrías quitarmelo?