Foco de atracción: enemies to lovers ❤️‍🔥 | Joe Jonas

Capítulo 54: Primer día

El llanto del bebé llenó la sala, un sonido que rompió la tensión del momento y dio paso a una ola de emoción que recorrió a Joe y Beth. Con una delicadeza infinita, la enfermera limpió al recién nacido mientras Joe y Beth apenas podían apartar los ojos de él. Era pequeño, frágil y, al mismo tiempo, lleno de vida.

Finalmente, tras asegurarse de que todo estuviera en orden, el bebé fue colocado en los brazos de Beth. Ella lo miró, su mirada desbordada de amor, con los ojos húmedos y una sonrisa que parecía iluminar la habitación entera.

Beth: Hola, pequeño (susurró con la voz entrecortada. Su mano temblaba ligeramente mientras acariciaba la pequeña mejilla del bebé, sintiendo su calor por primera vez)

Joe, quien no había soltado la mano de Beth en ningún momento, se inclinó más cerca. Su mirada era pura devoción, y por primera vez en mucho tiempo, parecía sin palabras.

Joe: Es... perfecto (susurró, con la voz rota por la emoción)

Joe se inclinó y besó suavemente la frente de Beth, luego se agachó para besar la cabeza del bebé.

Después de unos minutos, la enfermera se acercó para tomar al bebé y limpiarlo cuidadosamente. Joe observaba cada movimiento, su corazón latiendo con fuerza, sintiéndose protector y embriagado por la nueva responsabilidad que ahora tenía. Cuando el bebé fue devuelto a Beth, envuelto en una manta suave, Joe se sentó junto a ella, pasando su brazo alrededor de ambos.

El tiempo pareció detenerse para ellos. Durante las siguientes dos horas, el mundo exterior no existía. Beth descansaba, su cuerpo agotado pero su corazón lleno, mientras Joe no podía apartar los ojos de su hijo, cada pequeño detalle le parecía un milagro. Tocó sus diminutos dedos, su naricita, sus párpados cerrados, y no pudo evitar soltar una risa suave cuando el bebé frunció el ceño ligeramente en sueños.

Joe: Es... es nuestro (dijo, como si todavía no pudiera creerlo)

Beth asintió, sus ojos llenos de lágrimas de felicidad.

Un par de horas después, mientras el silencio cómodo de la sala continuaba, se escuchó un leve golpeteo en la puerta. Las primeras visitas habían llegado.

La puerta se abrió lentamente, y las primeras en entrar fueron sus familias cercanas. Denisse, la madre de Joe, fue la primera en ver a su nieto, con los ojos llenos de lágrimas y una gran sonrisa en su rostro.

Denisse: Oh, Joe... Beth... es precioso (dijo emocionada mientras se acercaba a la cama, con Kevin y Frankie siguiéndola de cerca)

Brenda: Dios mío (abrazó y beso a Beth)

Theodore: Tiene tus ojos hija

Priyanka y Nick también entraron al poco tiempo, ambos ansiosos por conocer al nuevo integrante de la familia.

Nick: Finalmente el cuarto miembro que nos faltaba

Bromeó mientras se inclinaba para verlo mejor. Priyanka le dio un suave abrazo a Beth, mirándola con admiración.

Kevin: Es tan pequeño

Danielle: Es igual a su padre, con tus lindos ojos Beth

..............

El sol comenzaba a entrar por las ventana, inundando la sala con una luz suave y cálida. Beth estaba sentada en el sillón, acurrucada con Nathan en brazos, quien dormía plácidamente envuelto en una suave manta celeste. La sala estaba en calma, un contraste perfecto con la intensa emoción que habían vivido horas antes.

Beth acariciaba la cabeza de su hijo con una sonrisa tranquila, aún asimilando lo increíble que era tenerlo finalmente en sus brazos. Se sentía completa, rodeada de una paz nueva y profunda. Su mirada se desvió hacia la puerta cuando escuchó el sonido de la cerradura girar. Era Joe, y no venía solo.

La puerta se abrió, y Joe apareció con una gran sonrisa, luciendo su clásico estilo desenfadado, pero con un brillo especial en los ojos. En sus brazos llevaba a Lion, y a Cleo.

"¡Miren quiénes vinieron a conocer a su nuevo hermanito!" dijo Joe con entusiasmo, cerrando la puerta detrás de él. Lion, empezó a olfatear el aire mientras Cleo, con su característica actitud reservada, se mantenía unos pasos atrás, observando todo desde una distancia segura.

Joe se acercó lentamente a Beth y al bebé, dejando a Lion en el suelo, quien de inmediato corrió a explorar. Cleo, por su parte, se acercó más despacio, observando cada movimiento de Joe y Beth. Nathan seguía durmiendo profundamente, ajeno a toda la expectación.

Joe: Vamos, no sean timidos

Cleo lo miró con sus profundos ojos verdes, como evaluando la situación, antes de subir al sillón junto a Beth y olfatear con curiosidad la pequeña cabecita de Nathan. Beth soltó una risa suave, acariciando a Cleo, agradecida de ver cómo sus queridos gatos comenzaban a aceptar al nuevo miembro de la familia.

Lion, que hasta entonces había estado dando vueltas por la sala, se acercó a Joe y, con su característico atrevimiento, saltó al regazo de Beth y se acomodó junto a Nathan, mirando curioso, como si tratara de entender quién era ese pequeño humano que ahora se llevaba toda la atención.

Beth observaba la escena, llena de ternura. Ver a sus dos gatos tan cercanos a Nathan, y a Joe con esa expresión de amor, le hacía sentir que todo estaba exactamente como debía ser.

Joe se inclinó sobre el sillón, y besó la frente de Beth suavemente antes de acercarse al bebé.

Joe: Parece que aprueban a su hermanito (dijo con una sonrisa satisfecha)

Joe observó a su familia con una sonrisa, sintiendo una profunda gratitud por todo lo que habían construido juntos.