Foco de atracción: enemies to lovers ❤️‍🔥 | Joe Jonas

Capítulo 48: Nuestro pequeño secreto

Joe mantuvo su rostro serio por un momento más, antes de que su expresión se rompiera en una gran sonrisa.

Joe: Cariño... creo que vamos a necesitar una cuna (dijo, su tono lleno de una mezcla de incredulidad y felicidad)

Beth parpadeó, procesando las palabras de Joe.

Beth: ¿Qué? (preguntó, su voz casi inaudible)

Joe asintió, acercándose a ella y levantándola en un abrazo mientras ambos comenzaban a reír, las lágrimas de felicidad comenzando a llenar sus ojos.

Joe: ¡Vamos a ser padres, amor! ¡Vas a ser mamá!

Beth soltó una risa, mientras se aferraba a Joe.

Beth: No puedo creerlo...

Joe la miró con una sonrisa tonta en el rostro.

Joe: ¿Estás lista para que esta casa se llene de juguetes, pañales y muchas noches sin dormir?

Beth se quedó en silencio por unos segundos, aferrada a Joe mientras la realidad de lo que acababan de descubrir se asentaba en su mente. Finalmente, se apartó un poco, mirándolo con los ojos llenos de lágrimas y una mezcla de emociones que Joe no había visto antes.

Beth: Joe, no esperaba esto… (su voz temblando) Delphine solo tiene dos años..., y ahora... un tercer bebé.

Joe la sostuvo más cerca, sintiendo la ansiedad en su cuerpo tenso.

Joe: Beth, sé que esto es inesperado, y entiendo que estés nerviosa. Yo también lo estoy. Pero... (hizo una pausa, buscando las palabras adecuadas) No tienes que hacerlo sola. Estoy aquí contigo.

Beth dejó escapar un suspiro entrecortado, apoyando su cabeza en el pecho de Joe.

Beth: Creí que no estarías feliz...

Joe: Cariño... (miró sus ojos brillosos) no te pongas así, amor... si, no lo esperabamos, pero estoy feliz, ya lo amo, desde que vi esas dos lineas hace unos minutos.

Las lágrimas empezaron a caer por las mejillas de Beth mientras asentía lentamente y Joe las limpió suavemente con el pulgar.

Beth: ¿Estás seguro? No quiero que te sientas presionado por todo esto. Ya sé que tener dos niñas pequeñas no es fácil.

Joe negó con la cabeza, sonriendo.

Joe: Beth, estoy nervioso, claro que sí. Pero también estoy feliz, y emocionado por esta nueva etapa. Vamos a hacerlo juntos, paso a paso, como siempre hemos hecho. Y cuando te sientas abrumada, y tengas más antojos, estaré aquí, para ayudarte a respirar y recordarte que somos un equipo.

Beth se aferró a él un poco más fuerte, sintiendo cómo su ansiedad comenzaba a disminuir.

Beth: Gracias, amor... realmente me haces sentir que podemos con todo.

Joe sonrió y besó suavemente su frente.

Joe: Porque podemos, Beth. Ya lo hemos hecho antes, y lo haremos de nuevo. Este bebé es una bendición, y no importa lo asustados que estemos, lo haremos bien. Juntos.

Beth lo miró a los ojos, sintiendo una ola de amor y gratitud.

Beth: No sé qué haría sin ti.

Joe le sonrió con ojos de amor.

Joe: Afortunadamente, no tendrás que averiguarlo. Porque no planeo irme a ningún lado.

Beth, se inclinó hacia él y lo besó con una pasión que llevaba dentro desde el momento en que se dio cuenta de que, a pesar de sus miedos, no había nadie más con quien quisiera compartir este nuevo capítulo de su vida. Joe correspondió al beso con la misma intensidad, sintiendo cómo sus propios nervios se disipaban, reemplazados por una oleada de amor y felicidad.

Cuando finalmente se separaron, ambos respiraban entrecortadamente, pero con sonrisas en sus rostros. Joe bajó la mano con ternura hasta el vientre de Beth, acariciándolo suavemente mientras reía, aún un poco en shock pero claramente emocionado.

Joe: Es increíble pensar que hay un bebé aquí, justo ahora (dijo con un tono de asombro, sus dedos trazando círculos suaves en el vientre de Beth) Nuestro bebé...

Beth asintió, sus ojos brillando de emoción.

Beth: Es una locura, ¿verdad? Pero de alguna manera, se siente... correcto. Como si este fuera el momento perfecto, incluso si no lo esperábamos.

Joe la miró profundamente a los ojos, todavía acariciando su vientre.

Joe: Este bebé ya es tan amado. Y ya me estoy imaginando todas las cosas que vamos a hacer juntos.

Beth sonrió, sus manos cubriendo las de Joe mientras él seguía acariciando su vientre.

Beth levantó la mirada hacia Joe, sus ojos brillando con ternura. Se acercó más a él, y con una voz suave, casi un susurro.

Beth: Cariño, ¿te parece si mantenemos esto en privado por ahora? Solo hasta estar seguros y que todo esté bien... quiero disfrutar este momento solo entre nosotros por un tiempo más.

Joe la miró, comprendiendo de inmediato su deseo. Acarició suavemente su mejilla con el dorso de su mano, asintiendo.

Joe: Lo guardaremos para nosotros. Este es nuestro pequeño secreto, nuestro momento especial... y lo protegeremos hasta que estemos listos para compartirlo con los demás.

Beth sonrió, agradecida.

Beth: Gracias, amor. Quiero que este tiempo sea solo nuestro, sin presión, sin expectativas de los demás. Solo tú, yo, y nuestro pequeño bebé creciendo en silencio.

Joe la abrazó de nuevo, más fuerte esta vez.

Joe: Será nuestro secreto. Y cuando llegue el momento, lo compartiremos con todos, pero por ahora... lo mantendremos solo para nosotros.