CAPITULO XXVIII HOLA CARIÑO

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Sentado frente a un gran ventanal con impresionante vista y un hermoso rubio a su lado, ¡acaso se podía pedir algo mas!

Taehyung: ¿crees que no vendrá por mi? En cuanto lo haga te matara.

El rubio se encontraba sentado en la alfombra atado de manos y pies mientras veía una enorme pantalla a su azabache junto a su compañera park eunha.

Jackson Wang: no acabas de ver, mi amor. Jeon le ha creído a la zorra.

Taehyung: el te matara.

Jackson Wang: por supuesto , claro si es que me encuentra... por cierto, no te esperabas que tu nueva amiguita fuera hermana de tu acosador; park bogum.

Taehyung: por mi, pueden pudrirse los 3.

Jackson Wang: hey , hey cariño... cuida esa preciosa y exquisita boquita, estar con jeon; no te hace bien cariño. ¿Dónde ha quedado mi sumiso rubiecito? (dice sirviéndose un trago de ron).

Taehyung: me importa una mierda.

Jackson Wang: ¡JODER! Me prende que seas así, no me provoques cariño...porque ganas de follarte son las que tengo al escucharte hablar así. Además mi plan esta saliendo a la perfección, jeon se dirige a la dirección que le di a eunha así que bueno... solo esperemos la indicación para abordar la camioneta y dirigirnos a nuestro destino

El azabache si se dirigía hacia su ángel pero no en la dirección que eunha le había dado, pues a el le había llegado la ubicación exacta por vía satélite; había hacheado el teléfono de Wang. así que se dirigía a su encuentro, mientras una camioneta similar a la suya se dirigía a la ubicación que la chica le había dado; para despistar a Jackson.

Tras llega al lugar el azabache repartió a sus hombre por toda el área de la casa, varios de los hombres de Wang habían sido asesinado por los hombres del primer mencionado. El equipo de jeon era muy bien experimentado; varios de ellos entrenaron día y noche para ser excelentes pues le debían lealtad a su "Amo" practicando desde, artes marciales, kung fu, karate... manejo de un sin fin de armas y ni hablar de la poderosísima aura que se cargaban, es como si el invierno llegara en verano.

Los hombre de Wang habían sido exterminados a excepción de los que se encontraban en la mansión custodiando cada rincón pero aquello no era nada para jeon.

Jackson Wang: bueno cariño, quédate aquí (dice dejando al rubio en una habitación) necesito checar las coordenadas a las que nos dirigiremos y bueno no confió en ti; para enseñarte el como llegar.

Cada minuto que pasaba taehyung sentía un enorme coraje, pues hubiera deseado poner en practica lo que jeon le había mostrado con referente a defensa personal. Pero lo habían tomado por sorpresa y aquello si que le había molestado; pues Jackson tenia razón, de aquel chico tímido, sumiso ya no quedaba nada pues ahora entendía que no siempre las personas merecían nuestra mejor versión a menos que fuera necesario. Las terapias y el apoyo que recibió fueron suficientes para abrirle los ojos... muy pocas personas merecían su amor, bondad, cariño y amistad pues ahora se sentía seguro de si mismo... sabia que era hermoso y que la única persona a su altura es y será jeon jungkook.

-señor la camioneta esta lista, solo estamos esperando la orden para seguir con el plan... el señor jeon no ha llegado aun a la ubicación establecida.

Jackson Wang: perfecto, retírate... llévenle comida a taehyung.

-por supuesto señor, permiso.

Aquella noche era diferente, el frio calaba hasta los huesos, el ambiente era pesado como si cargaras enormes cadena sobre la espalda. No era igual, definitivamente había algo diferente esta noche; suspirando se puso de pie caminando al mini bar que se encontraba en aquella enorme habitación, sirviéndose un trago de wiski. Camino hacia el gran ventanal para poder tomar un poco de aire. salió sin prestar atención a su alrededor, colocándose frente al barandal. Definitivamente algo andaba mal, ¿sus hombres? No había nada, ni un alma en pena ¿Qué estaba pasando? Tomo su celular marcando a su guardia principal, uno, dos, tres pitidos y nada. Al voltearse en su vida había sentido tanto miedo como ahora, justo ahora sentía que veía al mismísimo diablo en persona. Traje color negro, sin ninguna arruga; perfectamente planchado, zapatos pulcros y una mirada que atravesaría tu cráneo por lo fija que es. El mismísimo jeon jungkook sentado como el rey del inframundo que es, sonriéndole a Wang.

Jungkook: hola cariño.

Jackson Wang: ¿pero que, mierda?

Jungkook: cuida esa boquita, es de mala educación hablar así; frente a un superior.

Se pone de pie, caminando para así poder colocarse frente a frente a Wang, sus pisadas resuenan por todo el azulejo y haciendo eco en la gran habitación.

Jungkook: creíste que soy tan estúpido ¿Cómo tu? ¿Dónde esta mi ángel?

Jackson Wang: jeon (sonrie) que agradable sorpresa. No te esperaba la verdad, me tomaste desprevenido... yo pensé que estabas en otro sitio.

Jungkook: ¿Qué pensabas? creíste que podías ser mas inteligente que yo ¿enserio?

Sin previo aviso Wang le propuso un puñetazo corriendo hacia la salida, ocasionando que a jeon se le volteara la cara; comenzando a sangrarle la nariz. Al incorporarse se limpio, ya que su camisa blanca se había mancho de sangre... observando a la patética persona frente el. La puerta había sido cerrado en el lapso de la conversación de antes.

Jungkook: que patético eres (escupe) la puerta tiene seguro. Toma asiento... tenemos mucho de que hablar y antes de que intentes pedir ayuda a tus hombres, pues ya están muertos y los otros se unieron a mi... así que apresúrate a sentarte por que quiero ver a mi ángel. (dice yendo a sentar al gran sillón que es digno para un rey, ósea el).

Jackson Wang: ¿Qué mierda dices?

Sus hombres ¿muertos? ¿lo habían traicionado?

Jungkook: ¿Qué? (sonríe) de verdad ¿creíste que podrías hacerme daño a mi? , ¿Qué podías destruirme? No eres nada, no eres nadie. Tu eres mi sombra, jamás estarás a un paso de mi, yo soy el PUTO REY y tu eres mi peón. Te metiste con la persona equivocada, hiciste que mi ángel pasar un mal rato y aquello, lo pagaras.

Al terminar de decir aquello se pone de pie y camina hacia Wang tomándolo del cuello y estrellando su cabeza en la mesa de vidrio. Aquella acción logra que Wang le propicie un golpe en el abdomen e inicio la pelea. Wang sabia de ante mano que no había forma de ganarle a jeon... su fuerza era increíble, sentía que su cráneo estaba roto, sus costillas hechas trisas, ya no podía mas y de repente su vista se nublo.

Habían pasado ya algunas horas y sentía ahogarse, el estar encerrado lo ponía nervioso, ansioso... quería ir con jungkook. Sus manos y pies atados no ayudaban mucho no podía moverse, quería llorar de impotencia; estaba apunto de hacerlo cuando la puerta fue abierta de manera lenta, estaba a punto de gritar; cuando lo vio a su kookie.

MI BELLO ÁNGELDonde viven las historias. Descúbrelo ahora