''Cerraré mis ojos, entonces no veré
El amor que no sientes cuando me abrazas
Llegará la mañana y haré lo correcto
Sólo dame hasta entonces para renunciar a esta lucha
Y renunciaré a esta lucha''
(I'll close my eyes, then I won't see
The love you don't feel when you're holding me
Morning will come and I'll do what's right
Just give me till then to give up this fight
And I will give up this fight)
I Can't Make You Love Me - Bonnie Raitt
JAMES
La mañana llegó con la promesa de un nuevo día, aunque mi corazón seguía anclado en la noche anterior. Michael, William y yo decidimos ir a comprar el desayuno. El trayecto fue un tanto extraño aun que me ayudo a sentirme mejor.
El sol de la mañana entraba por las ventanillas del auto, filtrándose a través de las copas de los árboles mientras avanzábamos por la carretera. El silencio era pesado, cargado con el eco de la noche anterior. William era el piloto, meintras que Michael y yo estábamos en la parte trasera.
William se removió en su asiento, frotándose los ojos con cansancio. —No recuerdo mucho de anoche —dijo, su voz ronca—. ¿Qué pasó exactamente?
Michael y yo intercambiamos una mirada rápida. Sabíamos que no podíamos revelar todo, no todavía. —Fue una noche agitada —dijo Michael con suavidad—. Pero no te preocupes, nada demasiado loco para ti, para mi sorpresa no vomitaste nada esta vez. Dijo burlón
William asintió, pero su expresión era de pura confusión. —¿Y qué pasó con ustedes? —preguntó, girando ligeramente la cabeza para mirarnos. -Ahora son amigos o algo así?- ambos asentimos -Bueno en ese caso, YO TAMBIEN SOY AMIGO DE JAMES!- dijo efusivo y alegre, ambos reimos ante aquello.
.............................................
-James- dijo Michael calmado, -que pasó realmente anoche?-
Sentí mi estómago retorcerse. No quería hablar de lo que había visto, pero sabía que tenía que desahogarme de alguna manera. —Nada en particular —comencé, eligiendo mis palabras con cuidado—. Solo... cosas de siempre, ¿sabes?
Michael, con su tono más conciliador, intervino. —James, ¿por qué no nos cuentas a William y a mi sobre lo que sientes? Quizás eso ayude a aclarar un poco las cosas.
Suspiré, sintiendo el peso de sus palabras. No podía seguir evitando el tema, y aunque no podía decir toda la verdad, podía comenzar a hablar sobre lo que sentía. —Está bien —dije finalmente—la verdad es que... creo que me gusta Louis. Desde hace tiempo.
William abrió los ojos, la sorpresa evidente en su rostro, Michael por otro lado creo que aun recordaba la conversación de anoche y solo necesitaba una comprobación. —¿Desde cuándo? —preguntó, su voz suave.
—No lo sé exactamente —dije, tratando de recordar cuándo había empezado todo—. Supongo que comenzó como una simple amistad, pero poco a poco, me di cuenta de que mis sentimientos eran más profundos. Cada vez que estaba cerca de él, sentía que todo era más brillante, más significativo.
Michael asintió en silencio, dándome su apoyo. —Y anoche, ¿qué pasó? —preguntó con cuidado.
Tomé una respiración profunda, sintiendo cómo el dolor volvía a apoderarse de mí. —Los vi. A Louis y Ayesha. Besándose. Fue como si algo dentro de mí se rompiera. No sabía qué hacer, no sabía cómo reaccionar. Así que simplemente me alejé.
William frunció el ceño, su voz llena de preocupación. —¿Y Louis sabe cómo te sientes?
Negué con la cabeza, sintiendo la desesperación crecer en mi interior. —No. No tengo el valor de decírselo. No quiero arruinar nuestra amistad.
Michael se inclinó hacia adelante, su voz cargada de empatía. —James, es importante que hables con él. No necesariamente sobre tus sentimientos, pero sí sobre lo que viste. No puedes cargar con esto solo.
—Lo sé —dije, mi voz quebrándose ligeramente—. Pero tengo miedo. Miedo de que todo cambie, de que lo pierda. Ademas no quiero arruinar sea lo que sea que está empezando con Ayesha.
-Aye es nuestra amiga sabes, desde pequeños hemos estado juntos, pero esto no significa que tus sentimientos no valgan, debes hablar del tema con el, o incluso con ambos, pero guardarte todo esto para ti no es sano ni esta bien- un tono casí paternal se hacía presente en la voz de Will
Michael puso una mano en mi hombro, su toque reconfortante. —No tienes que enfrentarlo solo. Estamos aquí para ti, James. Hagas lo que hagas, te apoyaremos.
Las palabras de mis nuevos amigos me dieron un poco de consuelo, pero el dolor seguía ahí, constante e inescapable. Sabía que tenía que encontrar una manera de seguir adelante, de enfrentar mis miedos y ser honesto con Louis. Pero en ese momento, todo lo que podía hacer era respirar y esperar a que el tiempo comenzara a sanar mis heridas.
Mientras el auto continuaba su camino, el peso de la conversación se sentía un poco más ligero.
Luego de un rato llegamos a un ''Dunkin' Donuts'' a comprar todo para el desayuno y luego de aquello nos pusimos otra vez en marcha.
El tráfico se alargó, y mi teléfono vibró con llamadas de Louis. Ignoré cada una de ellas, sintiendo una punzada en mi pecho, estaba siendo inmaduro? tal vez pero no me sentia listo para afrontar esta situación, al menos no aún. Sabía que tarde o temprano tendría que enfrentar mis sentimientos, aunque no fueran correspondidos. Pero en ese momento, en el auto con Michael y William, solo quería huir. Llegamos a casa Will y Michael se me adelantaron meintras yo bajaba las demas cosas para nuestro desayuno.
De pronto, aquel chico de rizos salió de la casa y se acercó a mí, su mirada reflejaba una mezcla de preocupación y confusión. —James, pasa algo? No respondiste mis llamadas —preguntó, acercándose más de lo que podía soportar en ese momento.
Sentí un nudo en la garganta, la furia y el dolor se mezclaban, pero no podía decirle la verdad. —No pasa nada, Louis, mi telefono se quedo sin bateria —respondí con brusquedad, tratando de mantener la compostura—.Ademas estoy cansado.
—Vamos, James. Sé que algo te molesta. ¿Es por lo de anoche? ¿Te enojaste porque te dejé solo en la fiesta? —insistió, con un tono casi desesperado.
El peso se hacía cada vez más insoportable. —Sí, Louis, es por la fiesta. Me dejaste solo y... —hice una pausa, sintiendo que las palabras no podían expresar el torbellino de emociones que estaba sintiendo, tratando de mentir lo mejor que podía—. Solo estoy cansado, ¿vale?
Louis intentó acercarse más, colocando una mano en mi hombro, un gesto que normalmente me habría reconfortado, pero que ahora solo intensificaba mi malestar. —James, somos amigos. Si hay algo que te molesta, puedes decírmelo. No tienes que cargarlo solo.
Sentí que mi control se desvanecía. —No, Louis. No quiero hablar de esto ahora. Solo... déjame en paz, ¿sí? —le dije, apartando su mano con un movimiento brusco. No podía soportar estar cerca de él en ese momento. No después de haber visto lo que vi.
—James... —intentó decir, pero las palabras se quedaron atrapadas en su garganta.
Antes de que pudiera decir algo más, recogí las bolsas y me dirigí hacia la casa, dejándolo allí, con una expresión de confusión. Me dolía verlo así, pero no podía lidiar con mis propios sentimientos mientras intentaba proteger los suyos.
Entré a la casa y dejé las bolsas en la cocina, ignorando las miradas preocupadas de Michael y William. Sabían que algo estaba mal, pero no podían hacer nada para arreglarlo. Necesitaba espacio, necesitaba tiempo para procesar lo que había visto y lo que sentía.

ESTÁS LEYENDO
Solo Un Poco De Amor
RomanceLas dudas nos hacen retroceder, nos hacen sentir miedo y nos hacen sentir vulnerables. No está mal no saber que hacer y no está mal no tener siempre las respuestas, sólo recuerda que cuando te sientas tan mal como para no querer seguir recuerda que...