Especial de Halloween: Una noche con Anyel

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Parte 3

-Nunca pensé que llegaría a trabajar en una pollería. En fin, todo por mi futuro celular.

Antito vivía en Perúlandia, el mejor país de todos, donde todos comen rico según un ministro x. Antito, como todos los adolescentes horny, quería un celular para tener fotos xxx de autos, gustos normales de cualquier adolescente que quiere ponerla, pero lamentablemente no tenía un celular, así que, como ella es una chica que le pone punche, se fue a buscar trabajo, y lo consiguió en una pollería como una vigilante de cámaras.

Una vez dentro, Antito camino por los pasillos viendo cada uno de los animatrónicos en forma de pollas, cada uno con su color, la gallina blanca llamada Mina, la negra Shani y el gallo Anyel que era 100% más negro que Shani. Cuando encontró el lugar de vigilancia de las cámaras, entró y se sentó, su trabajo era simple: vigilar que ningún ratero entrará a robar hasta las 6:00 am.

Antito estaba viendo las cámaras, y en eso, un teléfono comenzó a sonar, Antoñito agarró el teléfono y escuchó una voz que le hablaba en inglés. Sin dudarlo, Antonella se paró, agarro el teléfono y lo patio hacia el suelo.

-Con eso servirá.- Antonella se sentó nuevamente solo para ver que los tres animatrónicos se habían movido.

-Que carajos...- Antoñito comenzó a buscarlos a cada uno por las cámaras, Shani estaba en la cocina, Mina en la zona de juegos y Anyel se encontraba viendo la cámara de cerca.

-Hola.- dijo Anyel con una cara de gallo bad boy.

Antonella notó una iluminación a su lado izquierdo, era Shani la cual estaba a punto de entrar. Antito simplemente se acerco a la puerta y presionó el botón para que la puerta se cierre.

-¿Ladrillos?- otra polla, esta vez la polla blanca la cual tenía un ladrillo, al parecer estaba comiéndolo.

Antonella se acercó con toda la paciencia del mundo, agarró el ladrillo, para luego lanzárselo  y cerró la puerta

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Antonella se acercó con toda la paciencia del mundo, agarró el ladrillo, para luego lanzárselo  y cerró la puerta.

Mientras, con Anyel, este estaba escuchando como Randy y Dyland planeaban el próximo movimiento de este. Anyel estaba sentado mirando una de las cámaras con aburrimiento y enojo.

-Muévete, Anyelo, haz algo de una vez.- dijo Randy con una voz de molestia.

-¡Me dijiste que me ibas a decir lo siguiente que yo iba a hacer y todavía no lo haces por estar peleándote con Dyland!

-Pues podrías ir pensando en que hacer, ¿No?- le respondió Dyland en un tono quejón.

-¡Pero me dijeron que si hacia algo me mataban!- replicó Anyel con frustración.

-Muérete, y deja de frustrarte que tus tuercas van a explotar.- dijo Randy en un tono burlón.

-Apura weon, solo mátala.

-Ya voy, ya voy...

Anyel se levantó con su expresión enojada en el rostro y comenzó a ir hacia donde se encontraba Antonella, mientras maldecía entre murmuros a Randy y Dyland.

-Ustedes se me hacen muy familiar...- Antoñito se quedo viendo tanto a Mina como a Shani con una mueca de curiosidad plantada en su rostro. En eso Mina se fue yendo, Antonella abrió la puerta y Anyel salvaje entra y la mata arrancándole la cabeza.

-Eso fue... fácil.- Anyel levanta la mirada y mira a Shani que estaba con cara de traumada.

Anyel estaba a punto de irse, pero en ello nota como la cabeza de Antonella se regenera, lo que le dejo con la boca abierta y antes de que reaccionará, Antonella se convirtió en un carro y atropella a Anyel.

Antonella se vuelve a su forma normal, mira a Mina que seguía comiendo su ladrillo. Antonella extiende sus brazos en forma de invitarla a un abrazo, a lo que Mina responde tirándole el ladrillo al rostro de Anto.

-¡Hijas de puta!- Anyel se levanta, con sus partes mecánicas rotas.- ¡No me van a vencer nuevamente tres perras estúpidas!

Anyel le rompe la cabeza a Mina y se acerca a Antonella para intentar nuevamente en matarla... Aunque, Shani lo convirtió en una hamburguesa con el poder de los sueños, imaginación, si.

-¿Qué hacemos con él?- preguntó Mina mientras agarraba su cabeza.

-Hay que llenarlo de lechita...

Las tres chicas se miraron entre sí y, se lo follaron, fin.

Escuela De Héroes Peruanos:Valle SagradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora