DESTINOS ENTRELAZADOS 3 YOONMIN (Saga Selenosis Completa)

¿ACEPTAS ENTRAR EN MI VIDA PARA SIEMPRE?

Las vacaciones de casi tres meses en Brasil habían llegado a su fin y Jimin renuentemente debía dejar a Jin, cediéndole a una niñera las funciones que había desempeñado con el cuidado de sus sobrinas, porque era de esa manera como las veía.

Taehyung se despidió de Namjoon con un fuerte y sincero abrazo, mientras él le regalaba un beso en los cabellos, les había dado la bendición para casarse, si eso era lo que deseaba hacer su hijo no se opondría.

Yoongi se despidió de Jin y de su tío con un abrazo, prometiendo como siempre mantenerlo al tanto de todo lo sucedido en Seúl, así como cuidar de Jungkook. El aludido sólo bufó.

—No sabe cuidarse él mismo, mucho menos lo hará conmigo.

Padre ya no necesito que cuiden de mí, soy lo bastante mayorcito.

—Está bien, sé que eres un hombre. Ya Yoon no te cuidará más, pero ten en cuenta que él es el mayor, por meses, pero lo es —le recordó guiñándole ligeramente un ojo a Yoongi en un acuerdo silencioso entre ambos.

Yoongi asintió mostrándose de acuerdo con su tío y con una de sus manos en la parte baja de la espalda de Jimin lo guió hacia el avión.

Aunque Jimin estuviese despidiéndose con ademanes y toda su atención estuviese puesta en las personas que dejaba, cierta parte en el no podía olvidar que quien pilotearía la avioneta sería Rowoon, y aunque todos hablaran maravillas de él, no lograba confiar plenamente.

La noche anterior cuando les informaron que debían trasladarse en avioneta hasta Sao Paulo, porque el avión se encontraba en esa ciudad y el que estaba en Río no tenía combustible, no vio ningún inconveniente hasta que Rowoon dijo que él los llevaría. Cuando se fue a la cama, no podía dormir pensando en que sería el hijo mayor de Namjoon quien pilotearía entonces con mucho tacto le sugirió a Yoongi que el prefería trasladarse en un vuelo comercial. Él se negó rotundamente y ahora estaba a punto de subirse a una avioneta piloteada por alguien que tal vez no tendría ningún tipo de certificación para hacerlo.

Lo primero que hizo al sentarse fue ajustarse el cinturón de seguridad y se aferró a una de las manos de Yoongi, mientras miraba por la ventanilla a Jin y Namjoon alejarse.

—¿Estás nervioso, Jimin? —preguntó Rowoon con burla, poco antes de despegar.

—Sólo espero que sepas lo que haces —respondió con una sonrisa nerviosa.

—No tienes nada por qué temer amor, esta avioneta no es nada comparado con lo que pilotea Rowoon—Yoongi lo tranquilizaba un poco, al acariciarle con los nudillos una de las mejillas.

Llevaban mucho tiempo volando y a Jimin empezaba a hacérsele extraño, porque era que Rowoon piloteaba demasiado lento o definitivamente no sabía leer las coordenadas geográficas y estaría perdido. Lo sorprendió que Yoongi empezara a quitarle el cinturón de seguridad.

—Esto ya no lo necesitas.

—No te preocupes, así estoy bien —se rehusó aferrándose al cinturón.