Lidia:
Los días se han vuelto buenos, Nathan ha sido un problema pero todo problema se desvanece cuando llegó a casa de Elizabeth y ella me espera para cenar y luego poder ir a dormir juntas, Elizabeth ha estado ocupada con sus tareas y estudiando para los exámenes que llegan en dos días, si ella aprueba especialmente el de matemáticas y literatura es un hecho que podrá ir a la competencia, también a estado ensayando muy duro, me cuenta los cambios que ha hecho en su coreografía y en lo que planea hacer.
Yo aunque no entiendo mucho la apoyó en lo que sea, volvimos a retomar sus clases, pero está vez por menos tiempo, ella quería estudiar sola y aunque se me hizo raro no tuve más remedio que aceptar, a veces cuando tenía alguna duda venía a preguntarme y yo la resolvía.
Mi madre y mis dos hermanos han estado viviendo conmigo, mi madre está teniendo problemas con mi padrastro y bueno… solo puedo decir que es un idiota.
Mis hermanos apoyan a mi madre así que yo también lo hago. Quería que mi madre conociera a Elizabeth y bueno justo hoy estaba planeando una cena para que mi familia conociera a mi novia.
Mi novia… que lindo suena eso, Elizabeth y yo volvimos a estar juntas aunque es claro, ahora con más comunicación de por medio. No le he dicho nada a Nathan pero para evitar cualquier soborno o extorsión creo que lo mejor es consultarle a la directora que Elizabeth y yo estamos juntas. Elizabeth no está muy segura de mi decisión pero yo creo que es lo mejor. Al final de cuentas ambas somos personas mayores… y espero que la directora pueda entender eso.
Por ahora me encuentro calificando unos proyectos de uno de mis grupos, cuando tres jóvenes cruzaron la puerta de mi oficina.—¿A qué debo el honor de tener a los tres mosqueteros en mi oficina? —respondí mientras mi vista seguía pegada en mi laptop.
—Queremos pedirte un favor, amor —esa fue la voz de mi novia, el tono con el que lo dijo captó mi atención y levanté la vista para mirar a los tres jóvenes que se encontraban enfrente de mi.
—¿Qué necesitan? —Respondí con cierta inseguridad.
—Bueno más que favor solo es pedirte que si dejas a Elizabeth ir a un antro —esa fue la voz de Josh, al cual mire seguido de el hablo Michel.
—Queremos ir a un antro mañana por la noche —
—¿Mañana por la noche? —pregunte está vez con una ceja alzada mirando a mi novia. —¿Por qué me pides permiso si sabes que puede ser linda?
Tanto como Elizabeth, Josh y Michel se miraron entre sí aquella acción me hizo entrecerrar mis ojos mirándolos ahora con sospecha.
—Es que bueno… —habló Elizabeth con un tono nervioso.
El ambiente comenzó a tornarse extraño.
Estos traen algo entre las manos y no me gusta, ¿por qué Elizabeth está nerviosa? No tendría ni siquiera que pedir permiso, no soy nadie para negarle algo.
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Entre tú y yo, Competencias de amor
Teen FictionEN CURSO. Lidia Camden es una de las mejores profesoras de literatura y matemáticas en una prestigiosa universidad en Londres, Elizabeth es una de las mejores bailarinas que ha ganado dos veces la medalla de oro en la competencia de baile contemporá...