A sea without water, a compass without direction ⪼ SunSun

19. Dolor

—¡Deberías habérmelo dicho! ¡Deberías haberlo sabido mejor para no ocultarme esto!

—Sunoo– él me pidió–

—¿Eres un jodido sirviente? ¡Tienes un jodido cerebro, úsalo por una vez!

Todo está distorsionado.

Sunoo sigue nadando dentro y fuera de su conciencia, hay voces y toques en su frente y en el resto de su cuerpo y las palabras "Por favor despierta" se siguen repitiendo y hay tanto dolor, un dolor infinito, como si su cuerpo intentara darse la vuelta.

—No podemos darle la sangre, capitán, está muy débil, lo matará.

—¡Se está muriendo, Jay! ¿Por qué no me lo dijiste? ¡Podríamos haber evitado que esto sucediera!

Es Sunghoon, tiene que ser Sunghoon. Todo se vuelve negro otra vez, y luego Sunoo escucha unas voces diferente.

—Le traje un poco de agua, capitán.

—Gracias. Jake, ¿Verdad?

—Sí. ¿Cómo está él– maldición! Él es... mis disculpas, capitán, pero no creo soportar verlo así.

Jake suena asustado. Él nunca tiene miedo. Sunoo debe verse bastante mal entonces. Espera que no sea tan mal como se siente, porque entonces no hay esperanzas.

Comienza a ser difícil separar los sueños de la realidad. En un momento ve un contorno borroso del techo de la Odisea Maldita, luego ve a sus hermanas, luego está encima de Sunghoon besándolo, y luego está el techo otra vez. Los sonidos tampoco tienen sentido, él ve el techo pero escucha la risa de su madre. Luego se está riendo con Sunghoon en una playa, pero la voz alegre de Sunghoon se contradice con la voz preocupada que sigue diciendo: "Vuelve a mí, amor. Despierta para mí, ¿Sí? No me dejes".

Dios, el dolor. Hay tanto, en la mayor parte de su estómago, como si se abriera una y otra vez, y se cosiera solo para abrirse de nuevo.

Sunoo no sabe cuánto tiempo pasa. Sin embargo, es mucho, porque la voz se vuelve cada vez más desesperada y cada vez está menos y menos consciente. Hay mucha oscuridad y menos techo, y las almohadas en las que está, están empezando a desaparecer de su toque. Las manos que lo siguen tocando se vuelven menos prominentes: puede sentirlas, pero cada vez es más difícil. Se necesita mucha concentración, que también empieza a perder.

En un momento, sin embargo, se ha sacudido. Bruscamente.

—¡Sunoo! ¡Sunoo! ¡Por favor, joder, no, no!

—Sunghoon, está de vuelta, está bien, está de vuelta.

Sunoo es el único que tiene permitido llamar a Sunghoon por su nombre. Hay un intruso, no está bien.

—Él... él se había... —hay una pausa.— se había ido, Jay, estaba muerto.

—Pero ahora está de vuelta, está bien.

—Mierda, míralo y dime que está bien. Él no esta bien. Él no lo está. ¿Por qué no me lo dijiste, Jay? ¿No eres mi amigo?

Está oscuro otra vez. Sigue oscuro durante mucho tiempo. Sunoo se siente débil, y a veces siente como si flotara. El dolor ya no es tan malo, pero cada vez que desaparece, él se sacude de nuevo y escucha la voz de Sunghoon llena de pánico diciéndole "¡No!" ¿No qué? ¿Que no duerma?

Sunoo no está tratando de irse. Lo jura, pero no puede hablar; necesita demasiada energía.

A veces escucha a alguien llorar. Él no sabe quién es, pero cree que es Sunghoon. No puede estar seguro, nunca antes había escuchado a Sunghoon llorar, al menos, no de esta manera. Lo ha visto soltar algunas lágrimas, pero nunca lo ha escuchado sollozar así. Es doloroso, mucho más que el dolor que Sunoo siente.