21. Pasado

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Pasaron dos semanas y parecía que Sunghoon, lentamente, estaba entrando en razón de nuevo. Ya no era tan despiadado con Jay, sin embargo nadie se atrevía a dejarlos solos en la misma habitación. Sunoo se aseguró de hablarle a Jay a menudo, le decía que Sunghoon estaba siendo terco, que estaría eternamente agradecido con él por haberle ayudado, y que hacía una linda pareja con Jungwon.

En las dos semanas que pasaron, habían estado teniendo muchos ataques, estos constantemente provenían de otros barcos. Sunghoon le había explicado a Sunoo que habían pasado por muchas colonias holandesas, razón por la que habían tantos barcos alrededor: los holandeses eran adinerados, y sus colonias prometían vidas adineradas, lo cual muchos comerciantes habían descubierto. Si la tripulación de Sunghoon hubiera sido de alguien más, no habrían tenido tanto éxito en los ataques, eso es lo que Sunoo pudo notar. No solo habían atacado a los comerciantes, sino que se habían metido en batallas con otros piratas, y siempre ganaban. Sunoo supuso que eso tenía sentido, ya que si hubieran perdido, ya estarían muertos.

Sunoo también se hizo más tatuajes: después de que una exótica ave aterrizara en la barandilla del barco, se había tatuado un ave. Durante una noche de borrachera, se tatuó un tic tac toe, solo por diversión. Su tatuaje más nuevo era en su pecho, que era amargo recordatorio de cómo era el mundo ahora: también un pequeño chiste interno, ya que Sunoo solía pensar que él no podía decidir sobre su propio futuro (era lo que era), pero sí podía, había escogido esta vida, como pirata. Una decisión que podía hacer cien veces más.

Durante una mañana, Sunoo se dirigió a la cabina de Sunghoon en busca de un documento sobre los ingresos del barco después de su último ataque. Sunghoon le había dicho que atracarían pronto, y necesitaba saber cuánto dinero les quedaba para poder gastar (Sunoo esperaba que fuera un anillo).

Sunoo era uno de los pocos que podían entrar a la cabina de Sunghoon sin la autorización de éste. Cuando entró, Sunghoon no estaba allí, pero no era sorpresa. Después de abrir el cajón del escritorio, hurgó a través del montón de documentos que se habían acumulado las últimas semanas. Habían estado teniendo muchos ataques, lo que quería decir que Sunghoon se había ganado otros dos anillos de las dos veces que mató a una tripulación completa en lugar de simplemente llevarse sus pertenecías.

Cuando los dedos de Sunoo agarraron un par de documentos, creyendo que eran los que estaba buscando, los sacó, solo para darse cuenta de que eran los equivocados. No solo equivocados con los que necesitaba, sino con su significado y existencia.

Eran los papeles de Sunoo. Los papeles que lo declaraban un esclavo sexual.

Sunghoon no se había deshecho de ellos todavía, a pesar de que Sunoo había estado convencido de que ya los había destruido. Si Sunghoon lo amaba tanto como decía hacerlo, ¿Por qué todavía tenía estos estúpidos documentos?

Después de un par de segundos, Sunoo suspiró y los arrojó sobre el escritorio de Sunghoon, sin molestarse en guardarlos. Se obligó a mantener la mente clara, diciéndose que estaba exagerando y que Sunghoon, probablemente, tenía una razón lógica por la cual esos documentos todavía existían.

Salió de la cabina de nuevo, no parecía ser capaz de quedarse y confrontar a Sunghoon, especialmente cuando las cosas estaban tan bien entre ellos, mejor que nunca.

¿Por qué Sunghoon todavía tenía esos papeles? ¿Y, eran la razón por la que Sunghoon no le había pedido matrimonio todavía? ¿Eran la razón por la que Sunghoon no lo había marcado todavía?

¿Sunghoon tenía otros planes?

Fueron horas después, cuando la luna reemplazó el sol, que Sunoo ya no se pudo mantener alejado de Sunghoon y regresó a la cabina. Abrió la puerta, esperándose de todo menos lo que vio.

A sea without water, a compass without direction ⪼ SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora