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Hay gente que los miraría y diría, ¿Qué más necesitan? Lo tienen absolutamente todo y eso es cierto, no hay nada en este mundo que les falte a los dos protagonistas de esta bonita historia que vengo a contar.

Aunque el ser humano es algo egoísta y tiende a pedir y desear más de lo que se tiene, aunque ni ellos mismos supieran que esa necesidad estaba ahí.

¿De quienes hablo? De los dos alfas más cotizados del momento, a nivel profesional y amoroso, pues Kim Seokjin y Kim Taehyung son una pareja casada desde hace varios años que además son los dos modelos más importantes de Corea del Sur y representantes de su país en lo internacional.

Hay quien se queja de que estén juntos, y no solo porque han roto la regla básica y antigua de que un alfa solo puede estar con un omega, si no porque levantan muchas envidias respecto al otro; todo omega y beta piensa que es injusto que dos alfas tan hermosos, simpáticos y agradables como ellos sean una pareja consolidada, remitiendo a frases tan groseras como estas:

Es un desperdicio para los omegas.

Deberían cortar y buscarse una pareja decente para ellos.

Jamás tendrán hijos si son dos alfas.

Y si los adoptan, ¿Quién de ellos será el padre omega?

Al mayor de ellos, todas y cada una de estas frases le da bastante igual pues él ama a su perfecto marido con posibilidad o no de tener cachorros algún día, es realmente feliz en ese matrimonio al que dentro de unos días le van a celebrar el séptimo aniversario.

Se casaron muy jóvenes, pero es que no solo dependió de lo mucho que se atrajeron conforme se visualizaron también tiene mucho que ver que son el destinado del otro.

Y ahí se encuentra, mirando varios anillos en la aplicación personalizada de Tiffanys que solo las celebridades tienen con la intención de comprarle el enésimo anillo a su hermoso alfa, el cual está terminando de realizar una sesión de fotos para la revista CQ de Corea, como cada año.

- ¡Hyung! — llama el menor, haciendo que este, suba la cabeza, sonriéndole — ¿Me podrías esperar un poco más? No me gusta cómo salen mis fotos hoy.

El alfa de cabellos negros suspira, para asentir y guardar el móvil con rapidez o se le caerá, pues ya sabe lo que viene ahora; sus brazos se abren y su sonrisa crece en su hermoso rostro cuando el menor se le tira encima, pasando las piernas por su cintura y sus brazos por su cuello, estampándole un furioso beso en sus voluptuosos labios que le hace gruñir por la intensidad.

Las manos del alfa agarran el trasero de su menor mientras ambos se dedican a besarse con la misma intensidad que lo hicieron por primera vez hace tantos años, derritiéndose en brazos del otro.

- ¡Taehyung! Venga, por favor — lloriquea el mánager del alfa menor, demasiado cansado — mi esposo me está esperando en casa, mi pobre cachorro también.

Es en ese momento cuando el mayor de la pareja deja un pequeño y fugaz beso en su esposo, suspirando al sentir que el agarre se aprieta.

- Venga, mi vida, necesitas terminar o Hoseokie no podrá ir con Jimin nunca — pide el mayor, con el mejor tono de compresión que puede — luego tú y yo iremos donde más te apetezca ir, bebé.

- Te amo, Jinnie hyung — susurra, dejando otro pequeño beso en sus labios.

El mayor pestañea rápido, sintiendo el torrente de emociones de su esposo en su mismo cuerpo, porque a pesar de que no los une una marca, sus lobos están tan enlazados con el otro que no pueden evitar sentir todo lo que el contrario siente, siéndole inevitable emocionarse cuando su pareja también lo hace.

Taehyung se pone en el suelo, para darse la vuelta y volver a una sesión de fotos dramática y exagerada que gracias al cambio de ánimos drástico que sufre se vuelve tan perfecta como todas las que realiza normalmente.

Con el corazón en un puño, Jin ve cómo su esposo se deshace en esa tristeza que lleva acumulando mucho tiempo y que cada día crece un poco, pero viéndose siempre tan hermoso que a veces piensa que es irreal, que él mismo, siempre seguro de sí mismo, se siente inferior a ese rostro.

- Taetae — dice, llamando su atención — te amo, bebé.

Y ama con profundidad cómo en los cachetes de ese hermoso alfa se esparce el color rojizo solo por esas dos simples palabras que se encarga de repetirle cada día, a cada momento que puede.

- ¿Cómo podéis seguir siendo tan empalagosos después de tantos años? — pregunta el mánager de ellos dos, mirando cómo Taehyung vuelve a estar de buen humor frente a todo el mundo — ni siquiera Jimin y yo estamos tan cariñosos como vosotros, a veces me dais envidia y todo.

- Que mentiroso eres, si estás todo el día enseñando la foto de tu esposo y tu cachorro — se ríe el mayor, mirando a su compañero — algún día podré presumir yo también de tener fotos de Taehyungie con un cachorro.

- ¿Se vería bien eh? — dice con orgullo, mirando al alfa menor — a ti también te pega un cachorro.

- A mí solo me interesa la felicidad de mi esposo, todo lo demás me importa una mierda — gruñe, sonriendo poco después al ver que su menor ha finalizado con las fotos — y ahora nos vamos, tengo que prepararme mentalmente para el capricho que me va a pedir Taehyung en este momento.

- Quiero ir a cenar al parque de atracciones, hyungie — dice sonriente, llegando hasta él.

Y Hoseok se ríe, viendo la cara de horror del alfa al ver el capricho que le ha pedido su esposo, para luego asentir y dejar un bonito beso en su mejilla.

cat&WOLFs ✹ TaeGi/TaeJin/JinSuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora