cat&WOLFs ✹ TaeGi/TaeJin/JinSu

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Con mucha dificultad y un sonido pesaroso saliendo de sus labios, el alfa mayor entra por la casa, con las miles de cosas que su pequeño esposo le había obligado a comprarle, no estando contento con haberle hecho acostarse a altas horas de la madrugada solo para prepararlo todo para el nuevo inquilino de la casa.

- No me quiero imagina si tuviéramos un cachorro — suspira, cerrando con dificultad la puerta tras de sí — es capaz de ponerme a construir una piscina solo para el bebé.

Un calorcito hermoso le llena el pecho solo de imaginarse a su pequeño marido esperándole dormido en la cama mientras abraza al cachorro, sin tener claro cual de los dos despertar antes porque ambos son dos bebés llorones.

Un sonidito al que no se acostumbra le hace mirar hacia abajo, viendo como el gatito que adoptaron anoche se le mete entre las piernas y vuelve a sonreír, andando con cuidado para ir hacia la cocina, seguido del felino que muy silencioso anda detrás de él, mirando con curiosidad cada movimiento que hace.

- Hola gatito — saluda, dejando las cosas en la encimera — la verdad es que no he podido comprarte la cuna que quería Taehyungie, pero puedes dormir donde te apetezca, aunque sí te he comprado comida de michis — el felino de un saltito se sube a la encimera, mirándole con curiosidad — es de pato y ternera, no sé si te gustará, pero me ha costado muy cara, así que te la comes igualmente.

El cerebro de Seokjin se desconecta momentáneamente cuando ve al gatito hacer un amago de risa, pero piensa que debe ser producto de su poco sueño; se queda en silencio mientras pone una de las latas de comida en el bonito cuenco que Taehyung le ha obligado a comprar, viendo con orgullo como el minino se agacha y comienza a comer.

- Bien, un bebé listo, voy a por el otro — el alfa pelinegro se dirige hacia su habitación, recolocándose los cabellos mientras sube las escaleras hacia el piso superior donde se encuentran tanto su dormitorio como el pequeño estudio fotográfico que comparten ellos, dejándose las demás estancias de la casa, en el piso inferior. El mayor sonríe al ver a Taehyung abrazando con fuerza el peluche con forma de hámster al que le deja su aroma cada vez que se marcha antes que él, sintiéndose dichoso por enésima vez — bebé, venga tenemos que despertarnos.

Caso omiso, Taehyung simplemente se dedica a abrazarse un poco más al peluche y poner un puchero, diciendo algo que Seokjin no llega a entender.

- Amor, es nuestro día libre, no podemos estar toda la mañana durmiendo — Taehyung se remueve, sintiendo cómo un cuerpo se le tira encima, sonriendo inconscientemente — además, el michi nuevo ya está desayunando, solo me faltas tú por alimentar, venga mi vida.

- ¿Me cargas? — pregunta con esa voz tan aniñada como gutural que tiene cuando se despierta.

- Sabes que sí — dice con una sonrisa, bajándose de la cama para cogerle de la cintura y levantarlo mientras que Taehyung se agarra a su anatomía cual koala, descansando su nariz en la glándula de aroma, casi pudiendo escucharse ronronear del gusto — no he podido comprar la cuna que querías, pero le he dado permiso para que se suba a todos los sitios mientras que le compramos una.

- Bien — dice con simpleza, siendo llevado sin dificultad por el mayor hacia abajo mientras restriega su nariz contra su cuello — quiero tortitas, huevos revueltos y bacon y también zumito de naranja.

- Si no fueras un alfa pensaría que estás embarazado — se ríe, para luego gruñir en advertencia ante el peligroso mordisco que deja Taehyung en su cuello — sé que ese tema es complicado, pero no me muerdas con la excusa esa, bebé, sabes que me molesta mucho que abuses de tu condición de alfa para hacer lo que te dé la gana.

La cabecita de Taehyung sube hasta sus labios, picoteándolos en modo de disculpa para acabar poniendo un puchero ante la mala cara de su mayor.

- Perdóname, hyungie — susurra mientras se deja atravesar por los oscuros ojos del pelinegro — luego te haré mimitos en nuestro rato de la bañera, ¿Sí? Es que tengo un poco de tristeza con el tema del cachorrito.

- Lo sé, pero no me muerdas, sabes que mi lobo os ama, pero no dejamos de ser dos alfas, vida mía — suspira, dejando un casto beso en sus labios.

Y nuevamente un sonidito al que deben empezar a acostumbrarse les llama la atención y el mayor debe aguantar el no caerse porque Taehyung prácticamente se tira de sus brazos hacia el suelo solo para coger al gatito que los recibe mientras mueve la cola energicamente, con la cabecita ladeada.

- Buenos días michi hermoso — saluda, apretándolo contra su cuerpo — eres tan bonito, es que te como.

Jin se ríe al ver la cara de agobio que pone el felino cuando Taehyung se lo echa al hombro como si fuese un saco de patatas, mangoneándolo como le apetece una y otra vez, pero destilando un aroma de felicidad y alegría que le hace sentirse más seguro a cada momento de haber rescatado a ese minino.

- Tenemos que llevarlo al veterinario y comprarle una maleta para que nos lo llevemos de viaje — dice Taehyung, sentándose en su sitio de la cocina mientras el felino se acomoda entre sus piernas — y más importante, buscarle un nombre.

- Sí, eso es importante — Jin asiente, para abrir la nevera y empezar a buscar los ingredientes — no podemos llamarle michi para siempre.

Ambos alfas observan al anaranjado felino que mueve la cola con pasividad con los ojos cerrados y cara de gusto mientras Taehyung acaricia su pelaje y Jin se acerca a su esposo para dejar un bonito beso en su mejilla.

Un gritito de emoción sale de los labios de Taehyung al escucharle ronronear.