⌜Amar es libre y está lleno de posibilidades, ninguna ocasión mejor para demostrarlo que estos dos alfas que rompieron los esquemas no solo amándose entre sí, también tuvieron corazón para alguien más ⌟
⇝ Taehyung alfa
⇝ Seokjin alfa
⇝ Yoongi omega
Su rostro siente una mano acariciándole, su naricita se mueve intentando reconocer ese aroma que capta al tenerlo tan jodidamente cerca sin poder hacerlo porque es la primera vez que lo olfatea; apretando sus ojos se gira en posición a donde proviene el aroma, queriendo captarlo todavía mejor.
- Podéis llamarme Suga — pronuncian en su oído, casi en un susurro.
Un sonidito adormilado sale de los labios del alfa menor antes de que pasen los segundos suficientes para que Taehyung abra los ojos abruptamente sin entender qué está pasando, sintiendo el sudor frío y su corazón latir con prisa, pero cuando consigue aclararse se da cuenta de que solamente está Jin durmiendo a su lado y el gatito entre ellos, dejando ir pequeños ronroneos.
- Hyungie, hyungie — llama, empezando a sentirse paranoico — J-Jin hyung por favor, despiértate.
El alfa se remueve, llevándose al gatito de por medio que abre también los ojos, mirando a su dueño más joven con cara de no entender nada, decidiendo que es buena idea andar hacia él para acariciarle con su rostro en el pecho.
- ¿Qué pasa, bebé? — pregunta Jin, aun entre este mundo y el de los sueños.
- T-Tengo miedo, creo que tenemos presencias en la casa, debemos llamar a un experto en exorcismos — el alfa mayor abre los ojos, para arquear una ceja frente a la cara de pánico que tiene su menor y la de asfixia que tiene el gato que lucha por respirar entre sus brazos — hace unos días me siento observado, pero es que ahora mismo acabo de oler a miel y canela, además de que alguien me ha pedido que le llame de una forma muy rarita.
El gatito salta de sus brazos, mostrándole la cola con claro disgusto, sin que Taehyung entienda absolutamente nada mientras le ve irse a tumbarse encima del pecho de Jin, que acaricia su pelaje.
- ¿Qué forma? — pregunta divertido el alfa pelinegro, mirándole con atención.
- Me ha pedido que le llame Suga, pero yo no entiendo a qué se refiere — lloriquea, acercándose a su esposo, casi atrapándolo en un abrazo de oso — ¿Quién es Suga? ¿Me estaré volviendo loco? ¿Necesitamos vacaciones? ¡AYUDA!
- Taehyungie, no puedes delirar a estas horas de la noche porque mañana tenemos una sesión de fotos para la revista Elle y tenemos que brillar más que normalmente, mi amor — el alfa deja un beso en su frente, tranquilizándole un poco — no sé a qué se referirá ese sueño que has tenido, pero ¿Sabes qué? Suga me parece un nombre perfecto para nuestro pequeño michi.
El felino mueve la cola con felicidad y ellos casi podrían jurar que sus ojos brillan intensamente y Taehyung asiente, decidiendo al mirarlo que en efecto ese nombre le va bastante bien; ambos alfas entrelazan las manos y el menor esconde su rostro en el cuello contrario, cerrando los ojos.
- Ha sido un sueño muy real — susurra, sintiéndose adormilado de nuevo — además, también he captado el almizcle, hyungie.
- Normal que lo captes, así olemos los dos — le responde, queriendo dormirse de nuevo — ahora debemos descansar para mañana y que nuestro pequeño bebé también lo haga, él estará cansado de no hacer nada — Taehyung mira brevemente al felino, que lo observa de igual forma, para sonreírle y cerrar los ojos — mañana será un nuevo día y además con suerte saldremos un poco antes y podremos ir a comprarle esa cunita que tanto quieres a Suga.
- Está bien — asiente un poco, casi dejándose llevar al mundo de los sueños de nuevo — buenas noches, te amo hyungie.
Y con un pequeño beso en su frente, el alfa mayor se deja caer en el sueño junto con su esposo, agarrados y pegados a pesar del tamaño de la cama gigante que tienen, ignorando por completo a esos dos orbes esmeraldas que les observan muy atentamente, mientras menea la cola con diversión.
- Siento haberte asustado, Taehyung.
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El alfa mayor coge a su esposo dramático del rostro, mirándole seriamente con la intención de que se tranquilice, aunque le está costando hacerlo.
- Mi amor, seguro que está por la casa, no te preocupes — dice el pelinegro, intentando mantenerse sereno — no tienes que ponerte así, es un gato y los gatos hacen estas cosas como desaparecer de repente.
- A lo mejor no se acostumbra a que pasemos tanto tiempo fuera y se ha ido porque no le hacemos caso — lloriquea, haciendo suspirar a su mayor — ¿Por esto no nos quieren dar cachorros verdad? ¿Somos malos padres? Jinnie hyung nuestro felino nos ha abandonado igual que nos abandonaría nuestro cachorro a pesar de no saber andar ni valerse por sí mismo.
- Kim Taehyung relájate que se está yendo la cabeza — el mayor le suelta, empezando a enfadarse — yo buscaré por el estudio y el baño de abajo, tú mira en la cocina y en el salón, ¿Sí?
El menor asiente, para sorberse los mocos y girarse hacia la cocina antes de empezar por el salón mientras que Jin va derecho a abrir la puerta del estudio, sabiendo que ahí no puede estar porque los gatos o pueden abrir puertas, pero lo que se encuentra le descoloca totalmente.
Del respaldo de su sillón sobresalen unos cabellos naranjas y toda la habitación apesta al aroma que decía su marido el otro día, llevándole a un estado de confusión total.
Con prisa, cierra la puerta fuerte y se asegura de que no pueda salir ese individuo que les está invadiendo la casa, para llamar a voces a Taehyung que viene lo más deprisa que puede, sin entender nada.
- Tantos años casado contigo me están empezando a afectar — dice el pelinegro, haciéndole fruncir el ceño — y hasta yo creo ver y oler cosas — Taehyung entiende aun menos, y ladea la cabeza — hay alguien aquí dentro que no conocemos.
El alfa menor se lleva las manos a la boca en sorpresa y entonces Jin se decide y abre la puerta, ambos descubriendo que no hay nadie, pero que la ventana que da al jardín está abierta.
- Mierda, yo no entiendo nada — suspira el mayor, entrando al estudio — juraría que vi una cabeza naranja y olí a canela y miel, lo juro.
- ¿Tendremos un ocupa y no lo sabemos? — se pregunta Taehyung, curioso.
Pero el sonido del gatito apareciendo por el pasillo le hace olvidarse de cualquier posible inquilino no deseado en su casa.
