⌜Amar es libre y está lleno de posibilidades, ninguna ocasión mejor para demostrarlo que estos dos alfas que rompieron los esquemas no solo amándose entre sí, también tuvieron corazón para alguien más ⌟
⇝ Taehyung alfa
⇝ Seokjin alfa
⇝ Yoongi omega
Sin embargo, el mayor miedo de Yoongi se cumple, pues han pasado unos días desde el celo del alfade cabellos dorados y este apenas abre la boca para decir nada; es cierto que está cariñoso, participa con ellos en las cosas de la casa y no hay ya berrinches ni nada de malo por lo que preocuparse, pero el felino sospecha que Taehyung estaba más consciente de lo que les hizo pensar.
Por ello, aprovecha que el alfa menor está fuera de la casa, para acercarse a Jin que prepara la comida, para hablarlo con él.
- Dime Yoonie, ¿Necesitas algo? — dice este, mirándole con una sonrisa amable.
- Pues verá — coge un gran trago de aire, sintiéndose nervioso por momentos — me parece que el señorito Taehyung no está bien — Jin suspira, asintiendo — he estado pensando en lo que nos dijo del cachorro y empiezo a pensar que se siente algo así como desplazado o fuera de lugar.
- Yo también lo opino — confirma el alfa, sintiendo el pesar en sus venas — creo que Taehyung estaba más consciente de lo que pensamos y que no sólo hablaba su lobo.
- ¿Cree que podemos hacer algo para animarle? Para que no se sienta desplazado o algo así — el felino juguetea con sus dedos, nervioso — y-yo siento lo mismo por ambos, m-mi cachorro será tan hijo de uno como de otro, p-pero entiendo que el señorito no se sienta del todo f-feliz si no e-es...
- En mi opinión deberíamos darle espacio — corta el alfa, sorprendiéndole — agobiar a Taehyung hace todo el efecto contrario al que buscamos, debe salir de sus labios el hecho de que se abra a nosotros con sus sentimientos.
- Le haré caso entonces, usted lo conoce mejor que yo — sonríe, sintiendo sus mejillas calentarse cuando el alfa le revuelve los cabellos — ¿Qué cree que será? ¿Cachorro o cachorra?
- A mí me da igual mientras sea sano y fuerte — dice con convicción, retirando la olla del fuego — mi alfa desea una cachorra.
- Yo también, me gustaría tener una cachorrita hermosa — confirma, emocionándose solo de pensar en ella, acariciándose la panza — deberíamos empezar a buscar un nombre para el bebé, tal vez alguno que sea independiente del género.
- Me parece una gran idea, la verdad — asiente, girándose para poner la mano en su rostro.
El felino recibe un suave beso en sus labios, uno totalmente inesperado que le acelera completamente el corazón, uno que les hace olvidar que la puerta de la casa ha sonado y que les invita a profundizarlo un poco, uno que no les hace sentir la presencia de Taehyung hasta que a este le da tiempo a observarles besándose.
- Buenas tardes — saluda el alfa, sonriéndoles a ambos cuando se separan.
- Hola amor — devuelve el saludo Jin, acercándose a él.
Pero ocurre algo que jamás había pasado en 7 largos años de matrimonio y es que el alfa menor le quite los labios a su esposo cuando este le va a entregar un beso, simplemente lo abraza con rapidez y luego saluda a Yoongi con la mano, mostrando una sonrisa que lejos de ser real, es demasiado falsa.
El corazón del alfa mayor duele, de forma intensa y desesperada, pues ve cómo su esposo, su todo, el amor de su vida se da la vuelta y se marcha hacia arriba.
- S-Señor Jin... — susurra Yoongi, queriendo llorar de la impotencia.
Pero este ya no le escucha, sus ojos están puestos en la escalera, esa por la que se han perdido los pasos de su esposo y sus pies se mueven solos, andando hacia su encuentro, porque esto sí le ha preocupado.
Taehyung puede estar enfadado, triste, llorando o incluso dormido, pero en ninguno de los momentos se niega a un beso, nunca lo ha hecho y muchísimo menos le ha quitado la cara cuando ha ido a entregarle uno y eso le duele al punto de sentir pinchazos en el pecho y su lobo, se encuentra de la misma forma.
Es entonces cuando las emociones le abordan y no puede evitar llorar, cuando llega a la puerta de su habitación y escucha el llanto entrecortado de su menor.
Todos los miedos le sacuden de golpe, pensando que su alfa le va a abandonar, queriendo abrir y rogarle que deje de llorar, que vuelva a ser ese chiquillo emocionado, caprichoso y alborotador que es siempre, que vuelva a ser el mismo Kim Taehyung del que se enamoró a primera vista.
Pero solo tiene fuerzas para sentarse en la puerta a escucharle sollozar mientras él le imita en silencio, desde fuera.
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Es entrada la noche, el rubio no ha salido de su habitación en todo el día, presa del miedo y de la más pura confusión, sin querer ver a ninguno de los dos, no tiene fuerzas para enfrentarlos, pero sabe que deberá hacerlo en algún momento.
Pero eso no impide que su corazón se emocione y se acelere cuando baja y se encuentra a ambos dormidos en los sofás, con la comida encima de la mesita de noche y un pequeño pastel, que sospecha que es de fresa por el color; sus ojos doloridos vuelven a llenarse de lágrimas y no puede evitar caer de rodillas al suelo, destrozado.
Ese golpe hace a ambos despertarse de golpe, asustados, aun más cuando ven a Taehyung sollozando de nuevo cuando lo hacen.
- Mi vida — dice Jin, acercándose a él, poniéndose de rodillas a su altura — dime qué te ocurre.
- P-Perdón, Jinnie, Yoonie — solloza, dejando coger la mano por el felino — perdón por todo, por mi actitud, por todo, no os merezco ni un poco — ambos pestañean rápido, reteniendo las lágrimas por verle así — p-pero me he hecho pruebas y n-no puedo tener cachorros, al m-menos no de forma natural.
Esa realidad golpea de forma fuerte y furiosa tanto al alfa como al omega.
