Cap. 11 Hold me.

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 Era sábado en la noche y estaba lista para enfrentarme con la misión que John me había otorgado, quizás esa sería la última vez que Tom me vería trabajar para Sonic.

 Underground era enorme, estaba repleto de personas famosas y de entrevistadores, junto con fotógrafos de revistas y  de televisión. Sin dudarlo llevé mi cámara para capturar el clima de allí.

— Señorita, necesita invitación para acceder.

— No tengo invitación, trabajo en Sonic, enviada de John.

Dicho eso, el guardia de seguridad me dejó libre el paso. Al parecer John era importante. Me sentía extraña, pero excitada ante tantas personas de otra élite. Sin dudas era una niña en un parque de diversiones. Me acerqué a la barra en busca de una bebida, un cóctel exactamente.

— ¿Puedo preguntarte algo? —le dije al barman, quien asintió— ¿Tienes idea dónde puedo encontrar a Matilda Brown de The Sun?.

— ¿Maltida? ella esta en sección VIP, quizás la puedas encontrar allí. 

— Gracias.

— Hey, suerte con ella —me sonrió.

 ¿Por qué iba a necesitar suerte?. Eso me dejó intranquila.

 De pronto, Tom Odell estaba allí, junto con Cara, ambos juntos como una pareja oficial o no, ellos eras una pareja.

 No permitiría que me viera nuevamente, no podría decirle que renunciaría y jamás hablaríamos otra vez. Tomé mis objetos y mi cóctel y subí las escaleras al segundo piso en busca de Brown. 

 No fue difícil reconocerla, me acerqué a ella presentándome y respondió cordial, al parecer yo le agradaba y le encantó tener material sobre Tom, decía que era un gran músico y que atraía mucho a la prensa. 

— ¿Por qué llevas una cámara, cariño? —me preguntó luego de cerrar la conversación.

— Bueno, sabría que me encontraría con gente importante y decidí traerla, pero no la he usado hasta ahora.

— ¿Eres profesional? 

— ¿Qué, con esto?, no, pero espero serlo. Me encanta.

— ¿Puedo ver tus fotos?.

—Por su puesto —se tomó un tiempo para verlas, por su aspecto lucía sorprendida y me sentí orgullosa de todo lo que había capturado.

— Sabes, tengo un amigo que puede ayudarte con eso, por si te interesa. —dijo mientras seguía observándolas— Me agradas, cariño. 

— ¿Ayudarme a ser profesional?. 

— Al parecer, ya lo eres, tus tomas son asombrosas. Quizás un trabajo te facilitaría todo este asunto de entrevistar a gente como yo. A no ser que te guste tu empleo.

— Lo cierto es que, renunciaré en poco tiempo... 

— ¿Eso es un sí?. 

— Eso es un: me encantaría —reí.

 Matilda Brown me había abierto las puertas a quién sabe qué, pero me fascinaba. Me entregó su tarjeta y me despedí de ella. Había saldado cuentas con John.

 Underground tenía una terraza, al parecer hacía mucho frío y a nadie le interesaba estar allí, por esa razón decidí subir, necesitaba tranquilidad aunque me helase. Me posicioné cerca del borde, observando la ciudad y todo su alrededor, era maravillosa.  

 Sentí un abrigo cubrir mis hombros, cuando volteé estaba el dueño de todos mis pesares.

— Tom...

— ¿No pensabas decirme que estarías aquí? —dijo tapando mi cuerpo con su saco, su perfume me embriagaba.

— No tenía porqué hacerlo.

— ¿Podrías parar con esta distancia?.

— ¿Por qué no te detienes tú con tus jueguitos? —dije molesta, empujando su pecho. Él no se apartó.

— No estoy jugando contigo, debes creerme. 

— ¿¡No!? —grité enfadada—, te acercas a mí como si fuera una idiota y luego te besas con Cara, y sin embargo vienes de nuevo a quién sabe qué ¡Ten tu estúpido abrigo y déjame en paz! —empujé nuevamente dejando que el saco cayera, esa vez sí retrocedió.

— Lo siento, ¿Esta bien?. Lo siento por todo, lamento no haber llamado ni una sola vez y sobre todas las cosas lamento estar con Cara —se acercó a mí—. Sé que te he lastimado, pero debes creerme que lo siento. No ha pasado ni un día en que no piense en ti desde que dejé Londres, y lo de Cara ha sido algo estúpido en absoluto, quizás lo más idiota que he hecho en mi vida. Cuando... cuando te vi con ese Dylan y luego hablaste de él, yo no pude soportarlo, no creí que alguien aparecería en tu vida y  los celos me invadieron...No puedo soportar estar lejos de ti de nuevo, Claire. No puedo —sus brazos me rodearon, y sentí su corazón agitado.

— Es tarde para decir 'Lo siento'. Cara debe estar esperando por ti...

— Después de que todo esto termine, se irá de mi vida para siempre, lo juro. No me interesa.

— ¿Cómo pretendes que te crea si aún sigues con ella mientras abrazas a otra chica?.

—  Sólo debes hacerlo —acarició mi cabello—, hazlo por favor.

— Tom, he renunciado a Sonic... 

— ¿Hablas en serio?.

— Sí. Yo he decido...salir con Dylan. 

I know (Tom Odell) TERMINADA. Parte I.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora