La Casa de las Historias de Terror.

Capitulo 49 : la dama del pozo

Esta entidad es una mujer espectral, que aparece de noche junto a pozos o ríos, envuelta en un halo de niebla oscura y con un vestido largo, mojado y deshecho, que parece estar enredado con algas y lodo.

La Dama del Pozo fue en vida una mujer que perdió a sus hijos de una manera trágica, y su dolor la llevó a deambular y buscar consuelo cerca de pozos y aguas profundas. En un acto desesperado, se lanzó a un pozo oscuro, donde murió sin ser encontrada por nadie. Su espíritu, sin embargo, quedó atrapado entre el dolor de la pérdida y el deseo de venganza hacia aquellos que podrían lastimar a sus seres queridos.

Quienes la ven dicen que primero escuchan un lamento profundo y escalofriante, que se mezcla con el sonido del agua moviéndose en algún pozo cercano. Si alguien se atreve a mirar, la verá surgir lentamente, con su rostro pálido, casi cadavérico, enmarcado por un cabello largo, oscuro y lacio que cubre parte de su rostro. Su piel parece haber sido corroída por el agua y el paso del tiempo, con ojos vacíos pero llenos de una ira que hiela el alma.

La Dama del Pozo ataca a aquellos que se acercan imprudentemente a los lugares de agua profunda por la noche. Sus víctimas son encontradas después, como si hubieran caído accidentalmente en pozos o ríos, con los rostros congelados en una mueca de terror absoluto. Los rumores dicen que, si alguien escucha su lamento y no huye, puede ver cómo ella extiende sus manos heladas y húmedas para arrastrarlo hacia las profundidades de su pozo, donde las aguas parecen susurrar los nombres de aquellos que alguna vez amó y perdió.

Se cuenta que La Dama del Pozo, conocida en leyendas locales como "La Madre de las Aguas Oscuras," sale de su pozo en noches sin luna, y su lamento resuena en el aire, diciendo "¡Ay, mi hijo!" De acuerdo con las historias, si escuchas su lamento cercano, está lejos; pero si lo oyes a lo lejos, entonces está muy cerca.

Esta confusión en su ubicación aterra a quienes se encuentran en los alrededores, ya que nunca saben con certeza dónde se encuentra. La voz fantasmagórica de La Dama del Pozo parece provenir de todas direcciones, como un eco incesante que impregna el aire. Las leyendas afirman que quienes intentan seguir el sonido terminan viendo su figura espectral emerger lentamente del pozo, levantándose con movimientos antinaturales, envuelta en un manto de niebla.

En una de las historias más conocidas, una pareja de jóvenes que decidió acampar junto al pozo escuchó el famoso lamento. Creyeron que, como lo oían cerca, estaban a salvo. Pero justo al sentir alivio, vieron una figura surgir desde el borde del pozo. La Dama los miraba fijamente, y su mirada vacía parecía taladrar el alma. Al darse cuenta de que la tenían a escasos metros, intentaron huir, pero ella ya los había alcanzado, extendiendo sus manos hacia ellos con una expresión de profunda tristeza y furia. A la mañana siguiente, solo encontraron el campamento destrozado, y desde entonces nadie ha vuelto a acampar allí.

Muchos aseguran que La Dama del Pozo busca en cada víctima una oportunidad de redención, atrapada en un ciclo sin fin de lamento y venganza por el dolor que la consumió en vida.