Hazme el amor

16 Rivales

Capítulo 16

Rivales

- Nunca estuve con Ale. Ella es una hermosa mujer. La quiero mucho, es una gran amiga y nuestra relación pues no llego hasta allá. Créeme que quería. Quería corresponderle. Juliana la tomó por la cintura. La acercó y con sus rostros pegados.

- Me fue duro saber que estabas con alguien más en todo sentido. En cuerpo en sentimiento y corazón. Es algo difícil para mí. Decía Juliana aún con su chica abrazada y frente al edificio.

- Para mí era más difícil poder entregarme a alguien que no eras tú, alguien con tus mismos ojos, pero que al final del día no eras tú. Sí dormíamos juntas, pero nunca pude. Juliana acarició los labios de la rubia poco a poco y besó los labios de la mujer. Con una delicadeza y dulzura.

- Eres mía y yo soy tuya. Susurró Juliana. Un poco suave le continuó diciendo. - Pues yo también tengo cosas que decirte. Anoche me encanto como me tomaste. Valentina se sonrojó. - Siempre soy yo la que da placer y pocas veces, no te estoy comparando. Es que pocas veces había sentido esa necesidad de entregarme por completo. Me sentí tan bien a tu lado. Nuestro amor y nuestra intimidad. Amo tanto estar contigo.

Valentina besó los labios de la castaña, escuchar esas palabras la llevaban a querer llevarla a la habitación, pero tenían que trabajar así que le susurró.

- ¿Podemos hablar de todo esto más tarde? Aquí en casa. Juliana asintió rodando la nariz de la rubia. Mientras ella sonreían como dos enamoradas adolescentes. Una persona las interrumpió.

- Disculpe señorita. Expresó el portero. Ambas mujeres se giraron. Vieron al hombre con un enorme ramo de flores. Margaritas y girasoles. - Señorita Valentina, como cada día le ha dejado flores. Juliana miró las flores y miró a su rubia.

Valentina se separó de Juliana, se acercó al hombre y tomó las flores agradeciendo al portero.

- Gracias Roberto. Miró a la castaña. - Son de Ale. Debo explicarte muchas cosas. Fue algo que incómodo a Juliana, pero ella no iba a darse por vencida. Ya Ale y Valentina habían terminado la relación.

- Te amo Val y ahora que te recuperé, no voy a permitir que ningún mal entendido nos separe. Sí tú dices que esto tiene explicación pues yo te creo. Se acercó y besó a la rubia. - Ahora me voy a casa a ducharme, escuchar a mi hermano y luego iré a mi oficina. ¿Nos vemos aquí en la noche? ¿Te parece mejor sí salimos a cenar? Valentina accedió inmediatamente.

- Sí. Desde luego. Se dieron un beso pausado y Juliana se separó.

Al irse Juliana inmediatamente subió Valentina con sus girasoles emocionada por lo que había pasado esa noche. Quizá no eran las recomendaciones del psicólogo, pero ella no estaba dispuesta a perder a su chica. El pasado le costó, pero decidió perdonar y volver con la única mujer que ha causado fuertes emociones en su vida. Su Juls lo era todo para ella. Su Juls era la única mujer que entró por completo en su corazón.

Llegando a su apartamento recibió un mensaje de ella.

Juliana: Gracias por la noche increíble que me diste. Te amo.

El pecho de Valentina se le infló. Se sentía en las nubes, sentía que caminaba por el cielo. Emocionada respondió.

Fan: Te amo Juls eres el amor de mi vida.

Luego de ese mensaje procedió a cambiar el nombre de Juliana a Juls. Y se sentó en su cama. Miró los girasoles.

- ¿Qué haré contigo Ale? Me duele no poder corresponderte. Eres una gran mujer y la persona que me ayudó en mi momento más duro, pero no te amo.