Pruebas

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Max Allen....

No me gusta este colegio, para empezar ni siquiera quería estudiar aquí, odio tener que ser el nuevo, todos en este nefasto lugar son igual de tontos, chicos fresas, populares, sin cerebro. Unos peores que otros, jamás en mi vida me haría amigo de personas así, además ni que lo necesitase, siempre he estado mejor solo.

Pero por alguna razón Lía me parece muy agradable, ella es diferente, es divertida, alegra, tímida y hasta algo molestosa. Tal vez sea la excepción de este horrible lugar.

Regresé del bar con una cuchara para poder comer de ese chocolate pero Lía ya no estaba en donde la dejé.

-"genial"-me dije-¿Dónde rayos se metió?

Comencé a caminar por el campus y la vi a lo lejos comiendo la nutella al lado de dos chicos.


Lía Evans...

Me senté al lado de Louis y Matt a comerme mi nutella, mientras caminaba los vi golpeándose y tuve que venir a separarlos, después de un rato Max finalmente me encontró.

-¿Lía ya me vas a dar?-me dijo Max-

-no-le respondí entre risitas-

-¿me hiciste conseguir esto por gusto?-me mostró una cuchara-

-dame-Louis me quitó de mi chocolate-¿Quién es el niño nuevo?-señalo a "Maxwell"-

-a ti que te importa-le respondió Max-

-¡hey! no le hables así-le dije-

-que amargado-dijo Matt-

-ese es mi problema-lanzó la cuchara al piso-me voy..-Max se dio me día vuelta y empezó a caminar hacia el salón-eso me pasa por ser amable-susurró pero yo si lo escuche-

-¿y a ese que le dio?-me preguntó Louis-

-ignóralo- sugirió Matt-es antipático

La verdad me sentí algo culpable cuando Max se fue, yo no quería hacerlo enojar pero también creo que su temperamento es algo inestable, no era para tanto, solo fue una travesura el esconderme de él.

Cuando regresamos al salón Max ya está sentado en nuestro asiento, me senté a su lado pero ni a me habló, sólo se dedico a rayar su cuaderno y tararear una que otra canción. Bueno si él no me hablana yo tampoco, no tenía por qué.

Llegó la profesora de literatura y nos entregó un folleto aunque era más bien una prueba de esas que toman a inicio de año.

Por gusto *pensé* mis neuronas murieron en vacaciones

Busqué un lápiz o una pluma en mi mochila azul pero mi cartuchera no daba señales, seguramente la dejé en el escritorio por la mañana; me volteé hacia atrás para ver a Louis y Matt quienes se habían cambiado de asiento poco antes de que acabase el receso, los muy tontos apenas se habían dado cuenta que estábamos muy lejos uno del otro.

-¿tenéis un lapicero chicos?-les pregunté-

-yo solo he traído uno-me dijo Matt-es inicio de año, aun no compró nada

-¿me ves cara de bazar?-me dijo Louis riendo-

Rodé los ojos y me acomodé nuevamente en mi asiento.

Supongo debo pedirle uno a Max, Ryan está muy lejos.

Di un largo suspiro y toqué su hombro para que me mirase.

-¿me podrías prestar un lapicero?-le dije cuando capté su atención-

Me miró un momento y vi que frunció el ceño ligeramente, me dio el lápiz con el que él estaba escribiendo y luego saco otro para seguir escribiendo en su prueba. Al menos alguien aquí tiene todos sus útiles completos.


Max Allen...

Solo le presté el lapicero por ser amable, ella ni nadie de aquí me importan, no necesito amigos. puedo estar bien yo solo además ¿a quién le puedo llegar a importar yo?, eso me lo tengo bien claro, me lo han repetido tanto todos estos años que ya no dudo de que sea cierto.

Durante la prueba por alguna razón de vez en cuando volteaba para ver Lía, creo que ella no esta tan segura de sus respuestas, yo casi no recuerdo nada, siendo sincero no leí nada en las vacaciones.

-¿Cuál te falta?-le susurré en cuanto la maestra se distrajo-

Me miró algo confundida porque tal vez no esperaba que yo la ayudase pero aun así señaló lentamente con su dedo la pregunta 3 de la hoja.

Asentí con la cabeza y deslicé  mi prueba hacia su lado para que la copiase.

-te falta la ultima-me susurro-cópiamela

Vi su hoja y ella si la había llenado, me puso su prueba más cerca y la apunté en mi casillero de respuestas, había sido arriesgado ir a dirección el primer día por copiar pero ya  luego de unos minutos la maestra recogió las hojas y no sucedió nada.

La cosa es, ¿Por qué trato de ser amable y bueno con ella?. Buenos, de todos modos ambos copiamos.


Tú lo cambiaste todoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora