Un adios a la fuerza.

32.2K 1.7K 75
                                    

Este capítulo se lo dedicó a: @miumikumiau1313

Pov: Joyce

No puedo creer que tenga a este energúmeno reclamándome. Reclamándome a mí, a mí. A la que le restregó uno zorra y dijo como quiere follársela ¿Pero que se ha creído el que es?

Mi dueño no será, eso ni que lo sueñe. Yo soy una mujer libre, sin ninguna restricción de ningún hombre. A la mierda.

-A ver querido ¿Tu quien te has creído que eres para venir a reclamar nada, he?-pregunto entre dientes.

-Joyce, no termines de sacar el demonio que hay en mí. Mira que soy capaz de darte una buena tunda y después follarte hasta que no haya un mañana.- responde el susodicho de la misma manera.

Sus palabras me asustan, y más si dice pegarme pero no se lo hago notar. Dios es increíble a donde he venido a parar. Este hijo de su mamá se cree muy dueño de mí, que digo de mí, de mi cuerpo. Porque, yo sé que eso es lo único que le interesa, mi cuerpo. Pero se le va a acabar el relajo, hasta aquí llegue yo.

-Mira Alex, te diré esto por última vez. La verdad es que te lo he dicho antes pero parece ser que no me escuchas o entiendes. Yo. No. Te. Quiero. Cerca. De. Mí.- deletreo muy segura.

No termine de decir esto bien cuando ya me tenia contra la pared. A decir verdad me estaba cagando literalmente. Me tenía agarrada del cuello y estaba apretando demasiado.

Esto se está saliendo de control. El se ve muy enojado por lo que le dije y mas por que según el huelo a puro sexo.

-Alex por Dios suéltame, me estas lastimando. Cálmate, ¿Si? Hablemos como dos personas civilizadas. Anda por favor suéltame, me haces daño.- ruego con las lágrimas muy cerca.

El no entendía razones. Con cada palabra mía me apretaba más. Era como que si mis palabras fueran un estimulante para él y su descontrol. Lagrimas comienzan a salir de mis ojos y me siento desfallecer. Siento que muero y no sé qué hacer para hacerlo entrar en razón.

-Quiero que entiendas que tu eres mía, solo mía. No quiero que nadie más te toque, que te mire, SOLO YO ¿ENTENDISTE? Solo yo.- grita.

Me suelta de forma abrupta y sin más se va. Desaparece en un segundo y yo caigo sin fuerzas al piso hecha un manojo de nervios y miedo. Me esfuerzo por llevar aire a mis pulmones.

La garganta me duele por la presión antes hecha en ella. Me siento desgraciada, no sé que voy hacer, el está loco. Jesús, Alex ha perdido el control ¿Cómo fue capaz de tratarme así? ¿Cómo pudo?

Tengo miedo, tengo mucho miedo. El solo hecho de pensar que lo volverá a hacer me aterra. Sé que no debí decirle lo que le dije pero ¿Qué quería? El se paseo por el centro comercial con esa zorra y quería que yo no hiciera nada, que no siguiera con mi vida. Solo a él se le ocurre semejante cosa.

Me levanto del piso y desido darme una ducha para tranquilizarme. Tengo que dormir, descansar, es mi única solución por ahora. Después de darme un baño, me coloco el pijama y me tiro en la cama. Decir que me dormí en seguida es decir mentiras. Rodé mucho en la cama hasta conciliar el tan ansiado sueño, el cual conseguí  dos horas después.

(...)

Me levante con un tremendo dolor de cabeza. Los acontecimientos de anoche comenzaron a bombardearme. Las cosas sucedidas anoche aún están como si fueran de hace un momento, es increíble que después de haber pasado unas
noche alocada y súper divertida, me pasara esto, de verdad que Alex se volvió loco. Pero ignoró todo y me dirijo al baño, porque para mi desgracia hoy tengo clases.

(...)

Después de un día atareado y de mucho pensar, decidí hablarle a Alan. Si, se que él se ha portado muy bien conmigo y por eso es que lo apartare de mi. No quiero que Alex le haga daño y tampoco quiero que me lo haga a mí. Por tanto he decidido cortar con el por lo sano.

Marco el número de Alan y él contesta a los dos tonos.

-Hola Joy.- escucho su voz del otro lado de la línea.

-Hola, Alan. Estoy llamando porque quiero que hablemos. Umm... ¿Aun estas en la escuela?- pregunto dudosa.

-Sí. Te estoy viendo ahora.- doy la vuelta y lo veo. Esta sonriendo de esa forma que tanto me gusta. Me va a doler decirle esto, lo sé. Pero es lo mejor para los dos.

-Hola ¿Cómo estás?- me da un beso en la mejilla y ya siento que este será el ultimo que nos daremos.

-Estoy bien. ¿Podríamos sentarnos en algún lugar tranquilo para poder hablar?- le pregunto

-Claro. Vamos a la heladería.- cruzamos la calle, pues la heladería se encuentra frente al instituto.

Después de haber entrado a la heladería y pedir nuestros helados decido que es momento de actuar y zanjar esto.

-Veras, Am... yo se que anoche quedamos en algo pero tengo que decirte que no va a poder ser.- el me mira de forma confundida y a decir verdad lo entiendo. Hasta yo estaría confundida en este momento si estuviera en su lugar, por tanto trato de explicarme mejor.

-Anoche te dije que tendríamos una relación de deseos, ósea, aquí te quiero, aquí te cojo.

-Sí. Me acuerdo de todo. Pero ¿Ha que viene esto ahora?- no le puedo decir qué un tipo me amenazo anoche para que me alejara de él y cualquier hombre a mi alrededor.

-Siento decirte que ya no quiero más. He decidido esperar para tener una relación seria. En las últimas semanas me he tratado de comportar de una manera que no soy yo. Todo esto a causa de mi ex, no sé si sabes que Tonny era mi novio y lo encontré follando con otra por eso me plantee relacionarme con el sexo opuesto de forma liberar, sin compromiso y a decir verdad, me he dado cuenta de que eso no va conmigo.- miento un poco.

El me mira de forma triste y me parte el corazón. No quiero verlo triste pero tengo que hacerlo. Tampoco quiero decirle las típicas palabras de que "no eres tú, soy yo. Todo mejorara para bien y encontraras la persona indicada". No, no quiero decirle eso, se que en vez de mejorar su estado, solo empeorara.

-Bueno. Si esta es tu decisión la respeto y te entiendo. Y no te sientas culpable por mí o afligida. Esto pasara y por favor no quiero que dejemos de ser amigos.-comenta con una sonrisa forzada.

Eso me da que pensar pero tampoco el me puedo obligar a encerrarme en mi propia burbuja y dejar atrás al único amigo que tengo. Así que decido asentir con la cabeza y darle una sonrisa. Más tarde me encargare de explicarle a "Don no quiero hombres a tu lado" que no me puedo quedar sin amigos y espero y lo entienda.

Después de esto Alan cambio de tema y se lo agradecí internamente. Hablamos de esto y de aquello sin tocar nada del tema principal.

Duramos como dos horas bromeando y riendo como si no hubiera pasado nada entre nosotros. A decir verdad que Alan es especial, es todo lo que una chica puede desear.

-Bueno, creo que es hora de irme. Fue un placer hablar y pasar el rato contigo Alan.- le informó.

-Para mí también ha sido todo un placer. Gracias.- concluye él.

Ambos nos paramos de nuestros asientos y salimos. No me había dado cuenta que ya estaba oscuro. Ambos cruzamos la calle y nos montamos en nuestros respectivos autos, no sin antes despedirnos con la mano.

En el camino decido llamar a Alex. No sé si es buena idea pero quiero que deje tranquilo a Alan. Marco su número y al tercer tono responden pero no responde quien me esperaba. Quien está al otro lado de la línea es una mujer y me dan ganas de mandarlo a la mierda, es un maldito cabrón. Dejo mi coraje de lado y decido hablar.

-Hola ¿Quién es?- dice ella. Me dan ganas de decirle sus tres pero me abstengo.

-¿Sera posible que le pudieras pasar el teléfono a su dueño?- digo neutra.

-¿Y quién lo solicita?- cuando le voy a responder escucho un forcejeo y el maldito habla.

-¿Qué sucede?- dice este sin más. Me dan ganas de colgar pero a lo que vine.

-Solo llamo para informar al señor que ya he cortado con Alan. Sólo te informo que mi amistad con él sigue pero sin ningún SEXO de por medio, eso es todo. Adiós.- termino y cuelgo.

No deje que respondiera y colgué el teléfono. prendo la radio y para mi buena suerte (Nótese el sarcasmo) esta sonando una de las tantas canciones tristes de Camila. Eso  es todo.

Domada por un PervertidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora