ℳaѕĸed тearѕ - Jikook//Kookmin

Parte 11: ¿porque seguir hundiéndote?

~narra jimin:

¿Qué Yoongi qué?- preguntó Momo.
-Sí, yo me he quedado igual.
-¿Y vas a ir?- me preguntó Irene cerrando su casillero.
-Claro que no. Lo último que quiero hacer con mi tiempo libre es pasarlo con él.
-Huye rápido en cuanto suene el timbre- me aconsejó la Rubia.
-Debería...- el susodicho timbre sonó. Las miré a las dos, las cuales se encogieron de hombros y señalaron la puerta principal con sus ojos.- Nos vemos mañana entonces...- me puse la mochila al hombro y empecé a caminar a la salida. Bajé los escalones que daban a la puerta principal y empecé a caminar por el aparcamiento.
-¡Eh, park!-me giré y vi a Yoongi venir tras de mí, mierda, tendría que haberme quedado mirando al frente.- ¿Qué hay de ese café?
-Tengo cosas que hacer...- repetí de nuevo.
-¿No me puedes dar ni media hora?
-No, no puede. – ambos nos giramos para encontrarnos con jeon. Yoongi puso cara de malos amigos, yo me sorprendí pero bajé la mirada.

~Narra jungkook:

Salí pronto de la escuela ya que quería llegar a casa temprano para poder seguir con el trabajo. Por problemas con el horario nos habían adelantado el plazo de entrega y más valía ir haciéndolo que dejarlo todo para el final. Cuando bajé las escaleras para llegar al aparcamiento lo vi caminando solo y con la cabeza gacha, para no variar. Me extrañé cuando oí a Yoongo llamarlo, caminé más rápido con la intención de escuchar qué es lo que le tenía que decir aquel descerebrado, el parecía tan frágil...

-Tengo cosas que hacer- se la veía verdaderamente incómodo con Yoongi, y no era de extrañar. Él siempre se había comportado muy mal con el, teniéndolo como una de las miles de dianas de sus bromas y ahora de repente quería pasar tiempo con el. Detrás de aquello no podía haber nada bueno, uno no puede confiar en Yoongi, y eso lo sé de primera mano.
-¿No me puedes dar ni media hora?- le estaba hablando y tratandolo con una superioridad que me sacaba de mis casillas. Estaba viendo todo lo intimidado que tenía jimin, y no pude evitar no entrometerme.
-No, no puede- me salió con un tono bastante más frío del que esperaba. Los dos se giraron hacia mí, Yoongi me miró con odio, como si le hubiera molestado que interrumpiera, queriendo saltar sobre mí, el tan sólo bajó la mirada, creo que con un rostro de agradecimiento.
-¡Dichosos los ojos!- Yoongi alzó sus manos con una sonrisa cínica e irónica- ¡Cuánto tiempo, Kookie! ¿Qué ha sido de ti? He oído por los pasillos que has empezado a juntarte con gente indeseable.
-No Yoongi, antes me juntaba con gente indeseable, ahora he ido a mejor. Si no te importa, he quedado con Jimin para hacer el trabajo, no puede dedicarte la tarde. Además, creo que tienes mejores cosas que hacer que ir molestándolo.
-¿Molestándolo? ¿Acaso estaba haciendo yo eso?- le preguntó, intimidándolo, la única manera que tenía él de funcionar.
-Yoongi, déjalo ya. ¿Quieres?
-Tranquilo, no hace falta que te pongas celoso, tu chico es toda tuyo- rio él, alejándose por fin no sin antes darle un empujón a jimin.

~Narra jimin;

No podía creer que jungkook me hubiera sacado del aprieto. Levanté mi mirada para chocar con sus ojos cafes.

-Gracias...- susurré.
-De nada- sonrió él levemente- ¿Se puede saber qué le ha dado por molestarte ahora?- me encogí de hombros.
-Creo que prefiero no saberlo.
-Oye... ¿Quieres que te acompañe a casa?

SI TE HUNDES EN ARENAS MOVEDIZAS Y ALGUIEN TE LANZA UNA CUERDA, ¿PORQUE SEGUIR HUNDIENDOTE?