Solo compañeros sexuales ¿Aceptas?....
Fue la propuesta que el austriaco le dijo a la soldado novata T/N, con la condición de NO involucrar sentimientos, pero por supuesto ser compañeros sexuales no es suficiente, T/N quiere ser más que eso, desafo...
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El cuartel estaba más movido que de costumbre. Soldados con armas largas, las desmontaban y limpiaban con precisión mecánica, otros cargaban municiones en sus chalecos, preparándose para lo que podría ser la operación más crítica hasta el momento. Algunos corrían apresurados por los pasillos, atendiendo órdenes y verificando el equipo. Hoy era el día decisivo.
En la sala de juntas, la Task Force 141 repasaba el plan por última vez. Cada entrada y salida del objetivo estaba marcada en los planos desplegados sobre la mesa, las rutas de infiltración y escape calculadas al milímetro. Makarov había logrado escapar demasiadas veces. Hoy, eso acabaría.
Mientras tanto, en su habitación, König se preparaba con movimientos metódicos. Se puso la camiseta de un solo tirón, la tela ajustándose sobre su torso marcado. Luego, tomó el chaleco táctico y lo aseguró sobre su pecho con facilidad, ajustando las correas para que quedara perfecto.
Luego de terminar de alistarse, König salió de su habitación y caminó con pasos firmes por el pasillo. Sin embargo, tras avanzar unos metros, se detuvo en seco. Un suspiro pesado escapó de sus labios mientras una tensión invisible lo mantenía anclado al suelo. No podía marcharse sin hacer esto, era ahora o nunca.
Con una decisión silenciosa, giró sobre sus talones y se dirigió a la enfermería.
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Mientras tanto, en la habitación, T/N se sostenía con cautela al borde de la cama. Había pasado demasiado tiempo acostada, y sus piernas aún sentían la debilidad de estar inactiva por varios dis, pero estaba mucho mejor. La enfermera la sujetaba del brazo, ayudándola a dar pequeños pasos por la habitación.
—Eso es, ve despacio, no te sobre esfuerces demasiado — Le aconsejó con paciencia.
—Estoy bien, puedo caminar por mi cuenta, lo prometo — respondió espondió T/N con una pequeña sonrisa mientras se soltaba del agarre.
Sus pasos eran lentos pero seguros. Una sensación de alivio recorrió su cuerpo al darse cuenta de que pronto podría dejar atrás esa cama y regresar a misiones, por supuesto la punzada de sus heridas era un recordatorio constante de que debía llevar las cosas con calma.