The Boyfriend App l.h au (Español)

Capitulo 22

Dev y Luke salieron de la escuela, tomados de la mano. Hace tiempo, habían aprendido a ignorar las miradas que les daban. Eso era molesto, ¿por qué la gente seguía mirándoles? No tenían idea, pero escogieron ignorarlo.

Dev estaba feliz. Realmente lo estaba, pero también estaba asustada. Tenía miedo que todo fuera a terminar, porque ella sabe que la felicidad no dura para siempre. Las cosas buenas vienen con un final, es inevitable. Tenía miedo que las cosas buenas que le pasaban fueran a terminar.

Para Luke era tan fácil dejarla. Tan fácil, que la asustaba. Él podría dejarla en un abrir y cerrar de ojos, y ella no podría hacer nada con ello. Él era humano ahora. Podría hacer lo que quisiera cuando quisiera. Ella no quería eso. Ella no quería que la dejara, y estaba asustada.

Tenía miedo de perder a la única razón de su felicidad.

Y por más que viese a Luke, quién ocasionalmente la veía con admiración, el sentimiento de paranoia no desaparecía. Y probablemente nunca lo haría.

Ambos entraron a Jevan's (por supuesto), mientras Dev mordía sus labios y veía el suelo, pensando en cuán afortunada en la forma más estúpida era, irreal.

Entraron al pequeño local, y Kaden no estaba allí, una pequeña chica, con cabello negro corto y ojos color almendra estaba en su lugar. Compraron dos conos de chispas y se sentaron en la misma banca al lado de la ventana.

Se sentaron en silencio mientras comían, antes que Luke decidiera romperlo.

−Dev, sabes que me importas, ¿cierto? -La cabeza de Dev volteó hacia arriba, aún tenía llena la boca de helado -Me refiero a, me importas. Y me gustas mucho. Y sólo quería que... sólo quería que lo supieras.

Dev tragó rápidamente el helado que tenía y le dio una cálida sonrisa.

-Lo sé, Luke. Y espero que tú también sepas que me importas, y me gustas. Mucho.

Luke observó su helado, con una pequeña sonrisa, como si fuese un chiquillo en vísperas de navidad. Se veía hermoso, y le molestaba tanto que él no supiera que lo era.

Él era tan dulce. Cada vez que caminaban juntos, él siempre tomaría su mano y enlazaría sus dedos. Cada vez que llovía, él pondría sus manos sobre la cabeza de ella para que la lluvia no la tocase y se resfriara. Le daría besos de la nada, en los momentos menos esperados. Eran esas pequeñas cosas que él hacía, que hacía que le gustase más.

−Somos tan cliché. -Dev rió, mientras terminaba su helado. No es que no le gustaran los clichés, pero tampoco le encantaban. En cierto modo, todo parecía tan cliché estos días.

− ¿Qué?

–Dije, que somos muy cliché. Es como, deberíamos de estar en una película, o en un libro, como dijo Joan. -Dev sonreía mientras se recostó en la silla. -Sí, un libro. Siento que estamos en algún tipo de novela o algo.

Luke elevó una ceja, terminándose el helado y reclinándose en la silla como ella. − ¡No somos cliché! Salí de un iPad, ¿qué tan cliché es eso?

−Buen punto -asintió sonriendo -pero seguimos siendo muy cliché.

Dev sabía que él no estaría de acuerdo, pero él escogió mantenerse en silencio, y ella sonrió para sí. Arregló sus gafas, que se habían resbalado un poco.

− ¿Luke?

− ¿Uhm?

− ¿Tú crees que... esto es todo? Como... ¿Como el final? Ya sabes... ¿el final de nuestra historia? - Dev preguntó tímida, jugando con sus dedos esperando la respuesta de Luke.

Él frunció el ceño, pensativo. Y esto no la hacía sentir mejor. Sentía su estómago caer. Él silencio era abrumador, y Dev se aclaró la garganta, arrepintiéndose inmediatamente de haberlo preguntado. Él cambió de humor tan rápidamente, que le fue imposible no preocuparse.

−Así que... el helado estaba... uhm, bueno, como siempre. -nunca había estado tan nerviosa de hablarle a Luke en tanto tiempo.

−Sí.

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−Oye, Dev, ¿Dónde están tus padres? -Fue lo primero que Luke le dijo a la mañana de ese sábado

Ella bostezó estirándose, antes de elevar las cejas hacia él.

− ¿Por qué quieres saber? Y hey, hiciste panqueques, gracias.

−No lo sé, nunca lo había preguntado, tengo curiosidad. Y no hay de qué. - Luke se encogió de hombros, mostrando un poco de panqueques en su boca.

−Oh, pues− Dev tomó un plato y tenedor, sentándose frente a él en la cocina − Mi papá trabaja en esa compañía Hewitt-Pickcard. Él viaja mucho, pero su sede está en Japón, creo. Mi mamá trabaja con él. No llaman nunca, realmente, como siempre están muy ocupados, pero sí, no los vemos mucho.

−Oh -Luke no sabía qué decir− lo siento, Dev.

−Está bien, − Dev se encogió de hombros, colocando panqueques en su plato. Honestamente ella ya había pasado la fase de "odio-tanto-a-mis padres" que ya no le afectaba− Es como si no existieran. Ha sido así desde siempre. Ocasionalmente regresan cada dos meses, pero nunca confirman nada. No he sabido de ellos por alrededor de... poco más de un mes.

−Eso es triste− Luke frunció el ceño. Ella no merecía nada de eso. En cierta forma, ella era independiente. Quizás por ello era tan cercana a Jonas, era la única familia qué tenía. Hablando de su hermano... −Hey, ¿Cómo está Jonas?

−Oh, mierda. -Dev abrió los ojos. Él estaba en lo cierto: ella estaba tan encerrada en su vida, que se había olvidado de su hermano y su mejor amigo. -Tienes razón−se sorprendió de haberlo olvidado− él no puede perder más clases o no podrá ponerse al tanto. Yo tengo su teléfono, así que no podemos llamarle. Supongo que iremos mañana al hospital.

Luke no dijo nada, sólo asintió. Se veía molesto, como si algo le preocupara.

−Estoy muy feliz que no haya pasado a más. - Dev suspiró satisfecha, rompiendo el silencio, cerrando los ojos por un momento.

−Seguro... − Luke asintió, pero ella notó que él no estaba allí. Bien, digamos, físicamente lo estaba, pero se veía tan... distante.

Ella lo observó mientras él veía su plato, jugando con su comida. Su mente parecía estar en otro lado, y ella se estaba preocupando. ¿Es que hizo algo mal? Dev carraspeó ajustándose los lentes, intentando atraer su atención pero fallando viéndolo prestarle atención a su comida.

− ¿Luke? ¿Todo en orden?

Luke parpadeó dos veces, antes de verla y darle un pequeña sonrisa.

−Estoy bien− pero ella vio a través de él. Obviamente algo estaba mal, y estaba molesta de que él no le tuviera la confianza suficiente para decirle.

− ¿Hice algo mal? -Dev se atrevió a preguntar, obviando que tenía miedo de su respuesta.

−No, tú no has hecho nada malo, Dev. Está bien.

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Nota de Autora:

Sé que fue un poco aburrido, pero, les advierto... se viene el drama...